Poemas

  • Poemas

    AL AMANECER

    ¿Por qué versos tristes?
    si los prefiero alegres
    ¿Para qué llorar si existe?
    la ternura y el amor ardiente.
    Aunque no puedo negar…
    extraño tu saludo en madrugada
    y tus besos tempraneros
    meciéndose en mi almohada.
    Extraño tu dulce tu sonrisa
    y tus ojitos color miel
    que hacen brillar las estrellas
    en cálido amanecer.
    Imagen de la red.
  • Poemas

    SOL Y LUNA

     
     

    Peina la Luna llena
    su cabellera de plata,
    mirándose en gran espejo
    celeste mar de hojalata

    El Sol la encuentra muy bella
    en la mañana de fresas
    la saluda con un rayo
    a través de fresca estela

    Cástor le dice a su Luna
    ¡vámonos, que se hace tarde!
    y bajando muy despacio
    con nostalgia que lo invade

    Pólux, mirando al Sol
    no lo deja ni un instante
    porque siente un gran amor
    por su Gran Señor Brillante.

    Cástor no deja a la Luna
    Pólux no abandona al Sol
    Cástor y Pólux se aman
    ¿Adónde irá su afán de Amor?

    imagen propia.

  • Poemas

    POR ELLA

    Lo llamé por su nombre
    junto a la ventana,
    la puerta no estaba cerrada.
    Penetré despacito
    acomodé su almohada
    le tomé la mano
    acaricié su frente
    apoyé mi cabeza
    sobre su pecho acicalado.
    No se percató
    que allí yo estaba
    solo soñaba
    o estaba ausente
    mientras balbuceaba
    que ella se había ido
    pero aún llenaba su mente.
    No veía, no escuchaba
    simplemente soñaba.
    Entonces apronté
    mis trapos y mis harapos
    mi corazón, mis manos, mi todo
    y regresé resignada.
    Nada lo haría cambiar
    solo ella, la del vestido azul
    si regresara.
    Volví a mi lugar justo
    de donde partí apurada
    aunque sabía
    que nadie me esperaba
    solo el silencio
    y mi suave almohada
    en la fría madrugada. 
    Imagen propia.
  • Poemas

    LA MIRADA

    Esa mirada, tu mirada,
    la de aquella primera vez
    junto al ventanal del bar,
    la de todos los días que te puedo mirar,
    la que refleja la luna
    con el sol del día o en penumbras,
    me transmite paz.

    Tu mirada,
    la que se presenta a diario
    cuando cierro los ojos,
    la que aún callado
    insinúa un te quiero,
    la que calla secretos,
    la que domina nuestros impulsos.

    Tu mirada
    la que dice mucho y pronuncia nada
    la que me enamora y me llena el alma.

    Tu mirada,
    la que extraño al amanecer,
    la que  me hace soñar,
    la que me hace confiar
    en lo que no logro leer,
    la que se instala en mi mente
    y me permite un nuevo encuentro imaginar.

    Tu mirada,
    se arraiga en mi memoria
    me permite volar hacia donde estás.
    Esa mirada,  es tu mirada
    la que me mantiene enamorada.

    Imagen de la red.

     
  • Poemas

    GLICINAS AL VIENTO

    
    

    Al regreso de mi viaje,
    miré hacia el cielo.
    En vez de nubes furtivas
    me sorprenden
    las glicinas florecidas.

    El viento las mece
    como acunando un sueño
    se acomodan, se sonríen
    buen aroma despiden.

    Me fascina su color
    me enternece su hermosura
    contrastan con el naranja
    de las flores de la dura.

    El sol le pone su brillo
    el viento su candor
    – No las despojes, tormenta
    ¡sus pétalos son un primor!

    Imagen propia

    
    
  • Poemas

    EL TREN

    Tus poemas contienen
    entre sus versos,
    el viento cálido
    de una mañana de enero
    y el sol brillante
    del mediodía,
    cuando te acompañaba
    mientras te ibas.

    La taza de café,
    esa en la que bebías
    con dos de azúcar,
    conserva tu mirada color miel
    sobre tus grises ojeras,
    señal de insomnios continuos.

    Tomabas el tren
    con la esperanza de descansar,
    con la visión de cosas diferentes,
    recordando hermosos momentos,
    y te alejabas, respirando
    la atmósfera de nuestros tiempos.

    Imagen: C. J. V.

  • Poemas

    ÁPICES DEL AMOR

    Tu brazo cual estola,
    le ofrece calor,
    le llena de emoción
    con energía no eólica,
    con energía de amor.
    Traspira su piel
    brincan sus vértices,
    mientras los recorres
    con tus largos dedos
    de mano de hombre,
    detectas al paso
    del amor, los ápices.
    Todas sus aristas se estremecen
    hasta sus átomos en jolgorio
    le hacen cosquillas
    y le sacas mil sonrisas
    cuando la acaricias
    poniendo tus dedos
    en forma de horquilla.

    Imagen de la red.

                              
  • Poemas

    EL NUDO DE LA CORBATA

    Acaricié mi imaginación
    con la vista del mar,
    con el olor de mi habitación,
    la velocidad del viento,
    el deseo de desayunar contigo,
    la incertidumbre de los diversos paseos,
    unido a la sensación de la seda
    de tu corbata gris tornasol,
    al no saber hacer el nudo
    en tu cuello perfumado,
    dando mil vueltas.
    Te reías y me enseñabas
    ¿lo recuerdas?
    Creo que todavía te amo.

    Imágenes de la red.

  • Poemas

    COMO LINTERNA MÁGICA

    ¿Cuán frágil y perecedero es,
    el amor por las grandezas de la tierra?
    Supuestas instantáneas
    tomadas por mi memoria
    del reflejo de la tarde
    con el sol poniente,
    con una brisa suave y envolvente,
    sin vientos fuertes,  
    en proporciones casi iguales
    de relieve y hondonada,
    de recuerdos y olvidos
    que la memoria guarda
    o tal vez ignora.
    Como una linterna mágica y lejana,
    el sol se va escondiendo
    y  mis recuerdos de la infancia
    se mezclan entre luces y sombras.

    Imagen: J. A. T.

  • Poemas

    ESPERANZA Y LIBERTAD

     
    Avanzó desde el sótano oscuro,
    entre objetos de  bordes filosos
    y húmedas esquinas,
    entre espacios vacíos
    y amontonamientos mustios,
    entre maderas de roble
    y fajas de nogal y lino,
    entre cobre y hierro
    y chapas de metal sin brillo,
    entre duelas agujereadas
    mal clavadas y destempladas,
    entre escuerzos sedientos
    y vestigios de anillos,
    atravesando el portal
    con libre albedrío.
    Avanzó y avanzó,
    hasta llegar a un lugar tranquilo,
    en la cima de una montaña
    fría pero con sol
    y así pudo salvar las penas
    y su destino fallido.
    Imagen: C. J. V.