Poemas

MUJER TRANQUILA

Fluctuaba a los cuatro vientos,
el canto de amor del poeta,
con todas las letras.
No ha dejado palabras en el tintero,
ni colgadas en el estante de la vida.
Pero a ella, mujer muy tranquila,
esos vientos la exasperaban.
Prefería internarse
en curiosos rincones,
con el aire placentero
de la vegetación a pleno.
Observar como una hoja
nada bajo la lluvia.
Escuchar la alegre serenata,
de trinos al amanecer.
O cuando el sol va desapareciendo
en el ocaso de los días de enero,
con lluvia o con sol,
reposar en la pradera húmeda,
gozando del delicado chapoteo
enamorado de frescor.

Imagen: R. E. Ch.

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