Poemas
A TRAVÉS DEL VENTANAL
Ella perdió a su madrey la vio cómo se iba.El conocimiento de la verdadno alivia su tristeza.La verdad ni la sinceridad,la fuerza ni el cariñoson capaces de curar la nostalgia.Lo único que puede haceres atravesar ese doloresperando aprender algo de él,aunque todo lo aprendidono le sirva para nadala próxima vez que la tristezahaga su visita de improviso.Lejos de sentirse oprimidapercibió una corriente singularen sus patas blancas.Holló la alfombra en la que dormíay se dirigió al ventanalse detuvo a mirar las gotas de lluviay el temblor de las verdes hojas.Su mirada jugó con ellasy se alegró con lo que veía.Cada cualcrea el paisajeque tiene ante sus ojosa su gusto y medida.Lo hace bello y alegreo lo detesta y entristece.Ella sigue el curso de los díascon su pelaje gris negruzcoy sus botas blancas de fantasíaen sueños de algarabía.MalaniaImagen: M. J. T.DUCHA CALIENTE
Sonrió ante el espejoaspiró el aire como si se asfixiaray una melancolía agriada envolvió su rostro.Vestida de humedad y nieblaproducto de una ducha calientesus cabellos enzarzados, pensó:“faltan tus dedos para peinarlos”Varias docenas de añosvan cayendo sobre la espaldacomo rocas desnudas y fríascarentes de solazsin posibilidad de cambio alguno.MalaniaImagen: propia
SUS PIES BLANCOS
No deseaba revelar su propia historia,una trama de cicatrices y quemaduras interioressobrecargado de mensajes que ella le enviaba.Él sabía lo que eso significabapero no sentía culpa ni arrepentimientotampoco quería la calma.No escuchaba, no veía ni tampoco hablaba.Anochecía, con la sensación de la arena blancabajo sus pies blancos y una muralla blancabajo el sol blanco, en señal de pureza.La luminosidad que lo envolvíaafilaba la lejana figura femeninaal verla partir por las vías del tren.Aspiró una bocanada de airecomo para dar alivio a su corazón.Tal vez no se atrevía a revelarsu deseo de partir con ella.Mientras el fuego centelleabaél palidecía con el viento.A veces es mejor no saber nada …a pesar de haber sabido quedesde antes sabía que lo sabía.Las olas temerosas de su ir y venirretrocedieron hacia el mar tranquilocuando el solse apoderó de la inmensidad del húmedo lechoregalándole calory esperanza de volver a verla.Malania.
Imagen: propia.
TOBILLO HERIDO
Las nubes competían
con matices diferentes.
Los últimos rayos del sol
contorneaban sus siluetas.
La lluvia invitaba al descanso
y mi cuerpo se desmoronó.
No hubo ladridos de perros
ni acordes de violín del vecino
que pudieran despertarme.
Y en ese sueño tempranero y profundo
soñé contigo, con tu lastimado tobillo.
Me pedías atención con tu mirada fija
y con inestables muecas.
Un estridente timbre sonaba en sinfonía
con golpeteos de nudillos en la puerta.
Me levanté sobresaltada
pero no encontré a nadie en la puerta.
Tampoco estabas sentado en el sillón
ahí donde te vi, con tu tobillo herido.
Tu ausencia enmudecía el aire
llenando el espacio con melancolía.
¿Te habrá llevado la lluvia?Malania
Imagen propia.
UN POSTE SIN LUZ
Casas y árboles
pintan la noche
de un ocaso postergado
por nubes multicolores.
Un poste sostiene una lámpara
no se enciende, está confundida
no sabe si es de noche o es de día.
O quizás es cómplice de parejas
que se besan a escondidas.
Se encenderá a media noche
cuando se duerma la luna
y se adormezcan las nubes.Malania
Imagen: LUA T.
TESTIGO DE LOS SECRETOS
El sol fulguraba orgulloso
al otro lado del planeta
bronceando pieles de veraneantes
provistos de ropas ligeras.
Ciento ochenta grados
eran suficientes para volar
y encontrar otro paisaje natural.
Al norte se agazapaba una arboleda
de otoñales hojas y flores marchitadas
por heladas invernales
y el pasto sobrevivía a la sequía.
Caprichoso el tiempo navegaba
por el inmenso mar del designio.
Despierto él
debatiéndose con un permanente insomnio
sin conseguir el placentero sueño.
Despierta ella
aspirando el aroma de la noche
aroma de la soledad
de los interrogantes y de los espacios vacíos.
Solo el olor del ayer los regocijaba
con sus entrañables recuerdos.
mientras la insolente luna llena
por los ventanales se filtraba
única testigo de los secretos
de esos inmersos espacios vacíos.
Malania
Imagen propia
AIRE ALCANFORADO
Escardando en la tierra florecidalas especies mustias de las vívidasatravesaron los huertos de la llanuradescendieron entre los olivosy los árboles de alcanfor y mirradeshaciendo su vida como nieve en el fuego.Ya no me engaño a mí mismo, dijo en voz bajani a mí, balbuceó ella con languidez y tristeza.Mi fe ya no está donde estaba.MalaniaImagen de la redAGUJEROS
Las mañanas sin tu saludose vuelven sordasno transmiten nadani el eco de mis aventuradas palabras.Es como pasar de la luz del sola la sombra fría de la lunaes como ir y venir entre negras rocascon hierba crecida y agujereadapor los escarabajos que pululano las orugas que se escondenentre las hojas marchitas y oscuras.Así vive mi alma en un túnel de dolorsin tus respuestas que alienten alguna razónpara dar sentido a volver algún díay poder ver el generoso soldesparramando su dorada calidezsobre las montañas de tu vida y la mía.Malania
Imagen propiaLA DULZURA DEL SECRETO
Una vorágine sísmicaprovocó el conciertode tu corazón y el míocautelosos del mundo externoconservando la dulzura del secretoalejados de la envidia carnalde transeúntes veraniegos porteñossupimos alejarla cianosis amenazadoraque en cautivante ansiedadpalabras tras palabrasimagen tras imagenpretendía injertarsu dosis moralista y embusterapara destruir nuestra felicidad.Nada de eso ha logradoy aquí estoy, y allí estásesperándonos una vez másy muchas veces más.MalaniaImagen propiaNADA FÁCIL
Cuesta ascender por la cuestapara llegar a la cima del olvidoporqueaunque quisiera no recordarno se puededejar todo atrássin pensaren los hermosos momentos vividos
bajo la misma luna.
MalaniaImagen: G. de Comodoro