Poemas

ESPEJO CONCA

Penando,
en el umbral de la azotea,
frente al espejo
llueven preguntas
y se plasman en eco,
adolorido por un hoy,
inocente y partido
que desgarra el corazón,
no complaciente y herido,
por la tiesura
de tu voz ausente.
Gotas de misterio,
arrebatan la calma
del ayer que regresa,
por una mirada lejana,
que requiere con urgencia,
de palabras de verano
sin marañas.
Mil preguntas sin respuesta,
que infligen
la prosperidad de un nosotros,
al ver en el invierno
ausente tu mirada
y que el tiempo
se encarga de la nada.
¿Será que se puede
dilucidar la verdad
en el revés de las cosas?
Quizás la respuesta
la tenga el espejo conca,
o esté en el verde del bosque
o en las azules aguas borrascosas
Imagen: R. E. Ch.
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