• Poesía

    LATIDO DEL CORAZÓN

    Quisiera crear una vida,
    con números pitagóricos,
    con raíces y potencias,
    entre llaves y corchetes.
    Con pentagramas del cielo,
    entre nubes blancas, lilas,
    rosas y celestes…

    Quisiera crear una vida,
    con cuentas pitagóricas,
    en enternecido azul
    de una noche tranquila,
    cuando mi corazón,
    en latido acelerado,
    las voces ocultas interpreta.

    Entonces, iré rumbo al amor
    y la luz guardará su belleza.

    Entonces, escucharé una voz,
    que me dirá, eres poeta…

    Malania

    Imagen propia

  • Poesía

    JACARANDÁS

    En la arboleda donde el viento canta,
    el sol se filtra, tímido y dorado,
    y entre los árboles, su sombra encanta,
    un mundo verde, en paz, abrazado.

    Los jacarandás de flores violetas,
    pintan de sueños el cielo lejano,
    y sus pétalos, cual seda ligera,
    alfombran senderos desde muy temprano.

    En sus ramas, los pájaros se esconden,
    para romper la tristeza de hombres callados,
    con sus trinos del alma, al paisaje responden,
    al respirar de un jardín un poco olvidado.

    Así, entre árboles y flores en calma,
    la arboleda cubre de quietud los seres,
    y los jacarandás sus flores derraman,
    aliviando corazones con males de ayeres.

    Malania

    Imagen: de la red.

    Avenida de Buenos Aires

  • Poesía

    NUBES AL VUELO

    La tarde se va despacio
    y las nubes color fuego
    se despliegan en el horizonte
    con calor en días de enero.

    Junto al sol llevan las luces
    con ansias de andar caminos
    o de dormirse en la noche
    bajo los astros azules.

    En una tarde de enero
    quiero retener las nubes,
    pero al tiempo en un adiós
    la alegría se diluye.

    Malania

    Imagen propia

  • Poesía

    MAÑANITAS

    Qué se traerán entre manos
    las mañanitas de primavera
    ¿Y las cálidas del verano?…
    Entre azules y celestes,
    tal vez, rosa o chocolate.
    El despertar apresurado
    de un día que sorprende
    de un amarillo alfombrado
    y por el sol, tornasolado.
    Quedará atrás el sueño
    y el palpitar de la noche,
    ansiosos por descubrir
    emociones sin derroches.
    Proseguirán su función
    con renovada energía,
    se grabarán tus huellas
    con memorable alegría.

    Malania

    Imagen: gentileza de Rubén E. Ch.


  • Poesía

    OJITOS DE MIEL

    Te llaman “Ojitos”.
    Dicen que eres picarón
    ¿Será por ser muy sutil?
    ¿O porque eres glotón?
    Con saltitos cortos
    vas de un lado a otro,
    con astucia y picardía
    nunca se te escapa
    ni el más pequeño mosquito.

    Malania

    Imagen: M. Julián T.

  • Poesía

    COLINAS

    Las colinas del amor
    son colinas de vida.
    Están en las estrellas
    o en el calor del sol.

    Trepa la colina de la vida,
    llénalas como quieras
    con pasión o con caricias,
    has que sean albricias.

    Cúbrelas con flores
    riégalas con miel
    que las colinas sientan
    amor al amanecer.


    Malania

    Imágenes propias

  • Poesía

    NATURALEZA EN COLORES

    Con atuendos de esperanza se viste la vida
    cuando la primavera pinta con rojos y lilas.

    La naturaleza generosa, fragante y sabia
    nos regala colores que nos hablan.

    Con matices y sombras se extiende la tarde
    el amarillo se funde con un rojo suave.

    En naranja dorado revive el alba
    despidiendo a la luna vestida de blanco.

    Bailan las flores con colores de fuego,
    canta el viento a las nubes del cielo.

    La paz del paisaje en lienzo sin igual
    nos invita a soñar en hermoso desvelo.

    Malania

    Imagen: Propia

  • Poesía

    SUSPIROS

    Con el viento viajan los suspiros
    y la música, entre ecos,
    se esconde entre las montañas.
    En el desierto la arena hace silencio
    y duerme bajo la noche calma.
    Pero a veces comparte los suspiros con el viento
    y vuelan abrazados por todo el universo.
    Quizás buscan el reflejo de incumplidos sueños,
    pidiendo a la lluvia que lave cicatrices,
    y que haga brotar semillas en cualquier superficie.
    Porque la naturaleza es luz y vida
    en desiertos, en montañas o en planicies.

    Malania

    Imagen: propia

  • Relatos

    DESPUÉS DE LA LECTURA DEL POEMA DE LEONARDO

    BREVE RESEÑA Y APRECIACIÓN PERSONAL.

    Desde muy joven me ha atrapado la lectura. He “devorado” letras de todos los tamaños,  todo tipo de contenido de revistas, diarios, libros. Y lo sigo haciendo. La pasión por la escritura llegó luego, por añadidura.
    Sobre todo la poesía con su correspondiente métrica y rima me ha cautivado. Pero luego entendí que no solamente ese tipo de poesía era relevante sino la poesía libre y los poemas. Así como en el año 2005 me ayudó a salir a flote luego de la pérdida de mi querido esposo, hasta hoy día, leer y escribir para mí, – como estoy segura que para muchos-, sirve de terapia alternativa para vivir mejor y sentirme feliz.
    Esta vez ha llegado a mis manos el Poemario de Leonardo Pereira Meléndez.

    El contenido de este Poemario me hace afirmar una vez más que las realidades de cada poeta son diferentes así como sus fuentes de inspiración, eso creo que lo sabemos todos.
    Entiendo que hay un emisor y un receptor en cada mensaje, en cada obra, y la forma de plasmarlo muchas veces puede depender de la intención que tenga el emisor. Y los diferentes receptores pueden recibirlo con interés o con indiferencia. Puede o no impactar de una u otra forma en el corazón y hasta en la razón.
    Cuando comencé a leer el Poemario, pensé en su manera de expresar a corazón abierto quizás su historia de vida, algo que le ha pasado. Pero después me llevó a pensar en el contenido profundamente sensual y sexual y me pregunté: ¿Hay necesidad de expresar por escrito en un Poemario todas esas cosas?
    Doy ejemplos:

    • “me sumerjo en medio de tus piernas

    a lamer lo que extraño”.

    – “
    donde tú puedas alzar tus pezones

    sin pasos ausentes.

    No más noches sin ti

    Tócame

    Aquí, justo aquí”…

    Ya iba a dejar de lado el Poemario porque no soy de las que gusta exteriorizar sentimientos, – para mí esas cosas de alcoba o de otros sitios, son íntimas y muy privadas y no necesitan ser compartidas- pero “algo, un no se qué” me instó a continuar leyendo. Y ahí encontré algo que me identifica en su escrito, y es esa forma de soñar y de sentir…
    Ejemplo: En esta tarde de lluvias, en silencio y no – silencio, silenciosamente, eres tú la que me acompañas.
    Pese a la distancia aquí estás conmigo.
    El viento que golpea mi rostro es tan fuerte como tu recuerdo.
    Mientras febo se oculta y el olvido me circunda,
    en silencio yo hago burbujas de destiempo”.
    Y esta otra:
    – “Adán no conoció el paraíso /de tus labios.

    Nunca más diré que Dios no existe”.

    Y pese al poco tiempo que contaba para continuar leyendo, no me arrepiento, porque me ha gustado tanto el resto del contenido que hasta me llevó a buscar la biografía del autor para saber a ciencia cierta quién era y quién es Leonardo Pereira Meléndez, un  destacado Escritor venezolano.
    Pude sacar una vez más la conclusión de que nunca hay que juzgar nada ni a nadie a la primera vista, sino darse el tiempo de ver las cosas con más detenimiento y precisión. Este bello Poemario lo merece.
    Gracias Sira Vargas de Biheller por enviarme tan valioso y preciado documento como lo es el Poemario de Leonardo Pereira Meléndez.  

    Imagen de la red.

    Malania Nashki

  • Poesía

    AMOR Y DESAMOR

    No te extrañes si te digo
    como si fuera un niño
    pues qué cosa es un poeta
    si no un niño perdido,
    solitario entre la muchedumbre,
    inquieto y vulnerable,
    como un pétalo de flor en la tormenta.

    Que aquí, muy dentro de mí
    y a lo lejos sigo siendo
    tu hombre enamorado
    el que se mira en tus ojos
    y se ríe. Feliz.

    Así muy dentro de mí,
    río también
    al entender esta ilusión
    imposible.

    Hoy en silencio me digo
    que la mujer es
    un hondo abismo
    que no puedo entender.

    Una mujer, que si la amamos,
    y si también nos ama
    es el vértigo mismo
    irrefrenable, incansable, brutal
    diosa en plenitud de vida.

    Yo hoy, aun
    sabiendo que es imposible
    solo espero que me quieras
    si tú quieres…

    Creo que cuando
    me doy cuenta que
    soy únicamente un hombre
    -me parece que lo soy-
    nada más que
    por quererte
    y que solo a tu amor,
    contento
    me doblegaría.

    A la distancia hoy
    me recuerdo
    a ese hombre con alma de niño
    que una vez movió sus labios
    para declarar su amor
    que lloró de felicidad
    expresándolo y que
    nunca,
    nunca fue correspondido.

    Ahí, es el preciso instante
    en el cual el hombre
    que finalmente soy
    siente el peso de la verdad
    y guarda silencio
    para no llorar más.

    Aun así, si…aún así,
    te doy gracias, mujer
    ilusión joven de mi vida
    por el milagro infinito
    de saber
    que puedo aun amar así
    aunque vos no me ames.

    Autor: Rubén E. Ch.

    Imagen: Gentileza de R. E. Ch.