BAILANDO EN MI SOLEDAD
Dejando cantar el silencio, él sigue bailando,
mientras las horas no se pueden detener
y el tiempo continúa su viaje.
Todo parece un sueño pero es la realidad,
la fantasía tan viva juega con la ilusión.Bailando en mi soledad se dice muy suavemente:
ese hombre que va marcando el compás lleno de felicidad.Su risa a los cuatro vientos se siente
entre el encanto presente que lo llama a no detenerse.Bailando en mi soledad va repitiendo hasta salir el sol
sin dejar de hacerlo y pareciera querer volar sin destino.Autor: Miguel Márquez
Imagen: Malania
BAJO LA SOMBRA DE ESE ÁRBOL VIEJO
Bajo la sombra de ese árbol viejo
me encontré una tarde.
Reinaba el silencio.
Me quedé pensando en todo el ayer
lleno de nostalgia.
Detuve mi marcha para descansar.
Quise entender a la soledad sin tener respuesta,
vi la luz del sol dibujando figuras con todos los gajos
y quedé callado guardando olvidos.
Autor: Poeta uruguayo Miguel MárquezImagen de la red
MIRADA LEJANA
Mirando lejos estamos,
nos buscamos sin encontrarnos,
hablamos al silencio sin respuesta.
Queremos saber los por qué y nada nos dice,
seguimos andando en la soledad.
Te miro y me miras aunque no estemos,
extrañarse está en nosotros
sabiendo que el pensamiento une,
la distancia no aleja.
Mirada lejana nos tiene cerca,
puedo verte en recuerdo,
sonrío, lloro y sé que nada nos separa.Autor: Miguel Márquez
Imagen: Reyna de Py.
LA ESENCIA
Cuando la soledad nos rodea, nos abraza.
Qué bueno es sentir el amor de alguien,
con la fuerza y la esencia de cariño y amistad.
Nada más triste
que el manto de la soledad nos cubra
como una nube negra
eclipsando nuestra alegría de vivir.
Los recuerdos, los buenos recuerdos
son un soplo de aire fresco
en la esencia de nuestra existencia
envuelto en el manto oscuro
de nuestra soledad.
Pero nada más reconfortante
más auténtico, más cierto
que la esencia del amor,de cariño, de amistad,
para dar alegría y color
a nuestro corazón.
Autor: Poeta portugués Mario Margaride
Imagen: de la red
LUNA LLENA EN NOCHES DE INVIERNO
Noche fría y silenciosa, baila la soledad sin importarle,
al compás de la brisa helada.
El cielo limpio muestra su luna bella y radiante,
la puedo ver muy aseñorada.
Deja su magia a través de su luz llena de encanto
como buscando a los enamorados.
Luna llena en noches de invierno
sigues tan firme iluminando la madrugada.
Algunos hablan de amores, tú con el sol,
por eso hoy tan elegante para esperarlo al amanecer.
Luna llena en noche de invierno nunca te duermas,
estaré esperando por ti
para pedirte toda tu magia realice mis sueños.
Autor: Miguel MárquezImagen de la red
BAJO LA MISMA LUNA
Cruzando valles se va,
camina lento en su soledad llena de silencio.
Carga una pena, deja una lágrima
y el viento parece hablarle como diciéndole quien sabe qué.
Va con la luna iluminando el camino, lleva sus sueños,
vive feliz aunque la vida le haya quitado recuerdos.
Canta alivios, escribe versos que hablan por sí solos,
abraza las ganas dejando ir alguna ilusión.
Bajo la luz de la luna, consigo el tiempo,
pasan los días marcando años de tanta nostalgia.
Todo es ayer con el hoy lado a lado mirando a lo lejos,
buscando lo que no ha de volver mientras sigue marchando.
Autor: Miguel MárquezImagen de la red.
SÉ QUE NO PUEDO OLVIDARTE
Quisiera echarte a un lado,
dejar pasar el tiempo y seguir andando.
Estás en mis pensamientos,
mi voz te llama mientras la mirada te busca.
Sé que no puedo olvidarte,
nunca podré, porque quedó muy dentro
un gran dolor que dejó tanta tristeza.
Camino en la soledad con un vacío
guardando nostalgia,
siento irse las palabras llenas de silencio.
Sé que no puedo olvidarte,
jamás sabrás tanto te extraño,
a través de los años no pierdo la esperanza
aunque sé que no habrá regreso.
Autor: Miguel MárquezImagen: Propia (Malania)
TE ESPERÉ
Te esperé cuando ya dejé de verte,
le hablé al viento en mi soledad porque volvieras.A Dios en mis oraciones, pedí por ti,
te soñé aún despierto guardando mis palabras.Te esperé parado en la esperanza,
vi la noche y el día hacerse largo sintiendo tu ausencia.Te llamé pero mi voz no escuchaste, perdiéndose en desilusión.
Te esperé y aún sigo esperando aunque sé no volverás,
mis lágrimas lentas van perdiéndose en la tristeza
dibujando una sonrisa rara sin haberte dicho adiós.Autor: Miguel Márquez
Imagen: Propia (Malania)
¿DÓNDE DORMIRÁN LOS GRILLOS?
Poema Infantil
¿Dónde dormirán los grillos? ya no se escucha su canto,
la noche está silenciosa.
Quiero oír el cantar de los sapos,
volando a los cuatro vientos con el sonido de la naturaleza.
Canta grillito canta, los sapos tal vez
estén esperando para acompañarte a coro.
La noche parece triste, camina la soledad,
buscándote, una luciérnaga ilumina
todos los rincones con su luz intermitente.
¿Dónde dormirán los grillos? pregunto y no tengo respuesta,
tanto silencio, me quedo dormido sin escuchar su canto.
Autor: Poeta Uruguayo Miguel MárquezImagen de la red
EL OASIS DE EULALIA
En un tranquilo barrio semirural, escondido entre calles bordeadas de árboles y casas acogedoras, cercano al arroyo San José, se encuentra un jardín singular, un remanso de vida donde la soledad no tiene cabida. Este jardín pertenece a Doña Eulalia, una mujer de corazón cálido y amor por la naturaleza.
Ella no está sola en su hogar, pues el jardín es su fiel compañero. Desde el amanecer hasta el anochecer, está rodeada de seres vivos que hacen de su espacio un lugar lleno de vida y alegría.
Por los rincones del jardín, dos ranas cantan melodías que parecen fusionarse con el murmullo del agua de arroyo. Son las guardianas del estanque, no pierden tiempo en atrapar a cuanto insecto se les acerca, observando con ojos curiosos cada movimiento que ocurre a su alrededor.
A lo largo y sobre todo, a lo alto de las paredes, las lagartijas se deslizan ágilmente, jugando al escondite entre las piedras y las plantas. De todos los tamaños, se camuflan en diferentes colores, y aportan un toque de vitalidad al paisaje.
Los pájaros son los visitantes más frecuentes. Vuelan libremente, confiando en la generosidad de la señora Eulalia, que les ofrece alimento y agua. Entre trinos y aleteos, hacen del jardín su hogar temporal, llenándolo de vida y color.
Pero no solo los pájaros disfrutan de la hospitalidad de la mujer. Las mariposas revolotean entre las flores, dibujando un arco iris con sus alas delicadas. Los picaflores zumban cerca de las flores más dulces, deleitándose con su néctar.
Y como si fuera poco, varias perras curiosas deambulan por el lugar, siempre alerta ante cualquier intruso que se atreva a irrumpir en su territorio. Son las guardianas de la señora Eulalia, fieles compañeras que comparten su amor por la vida al aire libre.
Aunque en el jardín no haya lugar para los gatos propios, los vecinos felinos se aventuran por los tejados, curiosos exploradores que vigilan desde las alturas. Su presencia es bienvenida, especialmente cuando algún roedor intenta colarse en el jardín o en la misma casa. Con astucia y agilidad, los gatos vecinos protegen el oasis de la mujer, de cualquier amenaza que se presente.
Así, en ese jardín, la soledad es solo un recuerdo lejano. Rodeada de vida en todas sus formas, encuentra en la compañía de la naturaleza y sus amigos peludos una fuente inagotable de alegría y amor. Y mientras el sol se oculta en el horizonte, el jardín sigue vibrando con la magia de la vida en comunidad, hasta el momento en que cae la noche y con su oscuridad y su silencio mágico, envuelve al lugar invitando a todos a descansar.Malania
Imagen: propia