• Prosa Poética

    GRITA LA NOCHE SU SILENCIO

    Grita la noche callada nostalgia,
    mientras llora el verso escondido.

    Habla el silencio sin medir palabras,
    sin tener voz.

    El viento fugaz se hace sentir
    sin dejar verse.

    Grita la noche su silencio en la oscuridad
    alejando el temor.

    Duermen los sueños
    esperando el nuevo día.

    Todo se echa a descansar
    sin dejar huellas en la madrugada.

    Queda la espera de aquello que ha de venir
    sin que pueda saber que será.

    Autor: poeta uruguayo Miguel Márquez

    ——————————————

    ¿QUÉ CALLAN LAS NOCHES?

    Hay noches que callan la nostalgia
    esa que permanece en versos escondidos.

    El silencio se expresa sin palabras
    quizás en algún eco lejano.

    El viento se hace ver
    en cabelleras despeinadas.

    La noche calla en soledad
    su oscuridad atemoriza.

    Deambulan los sueños
    en la esperanza de un nuevo y mejor día.

    Todo lo que duerme, descansa
    en las huellas que han dejado.

    Queda la espera, aquello que será en el día
    sin que deje de ser un misterioso secreto.

    Malania

    Imagen: M. J. T.

  • Poemas

    VOY A CAMINAR

    Voy a caminar donde el silencio se esconde,
    donde duerme la risa y la magia se apronta queriendo salir.

    Voy a caminar donde los sueños esperan
    para acompañarme cargando felicidad.

    Voy a caminar donde nos cante el viento
    haciendo danzar las hojas de cada árbol del lugar.

    Voy a caminar donde brille el sol aunque no lo veamos,
    donde las noches regalen su luna y toditas sus estrellas
    pintando sonrisas.

    Autor: poeta uruguayo Miguel Márquez

    Imágenes: M. J. T.

  • Prosa Poética

    CUANDO LLORA EL SILENCIO

    Cuando habla el sentido, seguro algo trae,
    serán las voces tan vivas buscando desahogo.

    Cuando el viento nos deja,
    queda esa soledad cual nos llega sin darnos cuenta.

    Cuando llora el silencio,
    duermen todos los sueños apagando su magia.

    La risa se borra,
    dejando momentos colgados para no ser olvido.

    Es el tiempo quien busca dejar su felicidad,
    tratando alegrar al silencio, borrando su llanto
    y seguir andando con una sonrisa presente.

    Autor: Poeta uruguayo Miguel Márquez
    Imagen propia

  • Prosa Poética

    DONDE VIVE LA RISA

    Donde vive la risa quiero llegar, echando fuera las lágrimas,
    quiero ser feliz olvidando tristezas.

    Donde vive la risa quiero quedarme, olvidando pena y dolor,
    guardando recuerdos de momentos bellos.

    Donde vive la risa quiero mi morada, abrazando los sueños
    y toda su magia hecha para siempre.

    Autor: Poeta uruguayo Miguel Márquez 

    ¿Vive la risa en algún lugar? ¿Risa es sinónimo de alegría?
    Creo que hay diferentes tipos de risa, puede ser intencional forzada o espontánea.
    Puede nacer de un acto de alegría, pero también de la ironía.
    Puede un ser reírse en una fiesta, festejar el nacimiento de un nuevo ser querido, de una mascota, o simplemente reírse exteriorizando alegría por cualquier otro motivo que lo haga feliz.
    Pero está la risa sarcástica, esa que hiere al otro, esa que hace doler el alma del otro. La risa que es sinónimo de burla, o aquella malévola, llena de odio, que responde a la forma de ser de alguien que solo ha conocido el lado oscuro de la vida, una vida llena de amargura y tristeza.
    Entiendo que el autor uruguayo se refiere a la risa sinónimo de alegría.
    Esta risa vive:
    en el corazón de la gente buena,
    en las cosas que a nuestros ojos son bellas,
    en los ambientes saludables
    y hasta en el brillo de las estrellas.

    Malania Nashki.

    Imagen de la red (Vitae. Tendencias verdes)

  • Prosa Poética

    VOY A CAMINAR

    Voy a caminar donde el silencio se esconde,
    donde duerme la risa y la magia se apronta queriendo salir.

    Voy a caminar donde los sueños
    esperan para acompañarme cargando felicidad.

    Voy a caminar donde nos cante el viento
    haciendo danzar las hojas de cada árbol del lugar.

    Voy a caminar donde brille el sol aunque no lo veamos,
    donde las noches regalen su luna y toditas sus estrellas
    pintando sonrisas.

    Autor: poeta uruguayo Miguel Márquez
    Imagen: Malania

  • Prosa Poética

    LETRAS QUE DICEN MUCHO

    EN UN MAR DE VERSOS

    De Patricio Massa

    Las letras y yo.
    Nos conocemos hace mucho.
    Jugamos desde siempre.
    Compinches de mil travesuras.
    Cabalgamos los renglones sin mayúsculas ni minúsculas saltando puntos y comas, sembrando en palabras mi sentir.
    Navegando en un mar de versos bajo un manto estrellado de sueños, a su trazo dejan estelas de mi pulso…y en lo más profundo de mi silencio, se sumergen a buscar la paz del corazón del niño que allí habita.

    Por Malania Nashki

    ¡Cuántas cosas se pueden hacer con las letras!, minúsculas o mayúsculas, en diferentes tipos caligráficos.
    Cuando empezamos a aprenderlas, solo nos enseñan a copiar y a identificar el nombre y el sonido de cada una.
    Pero una vez que las identificamos las usamos a nuestro antojo.
    Así surgen desde diminutas esquelas hasta voluminosos textos.
    Desde cartas de amor hasta mandamientos judiciales que pueden alegrarnos o entristecernos e incluso, matarnos de un infarto.
    La palabra escrita (o pronunciada) tiene mucho poder, y debería usarse con responsabilidad y respeto.
    Recuerdo aquella esquela, tipo cartita de amor, arrojada desde la calle envuelta en una piedra pequeña, atada con un hilo. Llegó hasta el patio del colegio de monjas donde las pupilas estudiábamos, sentadas sobre troncos de árboles que luego de estar secos se convertirían en astillas para mantener el agua caliente del gran calefón. Esa piedra traía una declaración de amor.
    Algo más que se quedó para siempre en mi mente: Las cartas de adolescente escritas desde el corazón. Las respuestas recibidas con esas letras perfectas, como dibujadas, por un aspirante de ingreso a las fuerzas de seguridad. O esa breve nota que decía: “Escríbeme, he borrado todos los contactos del teléfono y las direcciones de correo, y no tengo cómo comunicarme” procedente de un letrado muy querido.
    Y así podría continuar citando letras entrelazadas, párrafos, y textos enteros.
    Quizás dentro de esas elevaciones, montañas, cerros nevados, se amontonan las palabras, o quizás se deslizan con el agua cuando el sol calienta y se produce el deshielo.

    Malania

  • Prosa Poética

    VOY BUSCANDO

    Dueto

    Autor: Escritor y Poeta uruguayo Miguel Márquez.

    Voy buscando esa paz ausente que quieren perderla, ese amor lejano y no ser tan frío.

    Voy buscando lo que un día existió, esas ilusiones cuál quieren borrarlas. 

    Voy buscando esa magia que tanto anhelamos, todos esos sueños llenos de felicidad.

    Voy buscando esa libertad que no prive nada, pudiendo reír sin dejar de hacerlo, guardando recuerdos de cada momento vivido.

    De Malania Nashki:

    NO VOY BUSCANDO

    Ya no busco la paz ausente, porque está presente en mí, de la mano de Dios que no me deja perderla. No hay amor lejano, amo todo lo que tengo, todo lo que me rodea. No sé si soy fría porque desde mi interior siempre brota la calidez de una sonrisa.

    No busco lo que un día existió, porque lo que fue ya no está y lo pasado no volverá. Siempre hay ilusiones a la vista y dentro de mi corazón.

    No la busco porque nunca la he perdido, esa magia que todos anhelamos tenerla, los sueños llenos de felicidad.

    No voy buscando libertad, porque la tengo. Puedo reír sin prejuicios, y guardo recuerdos de todos los momentos que he vivido.

    Imágenes: de la red

  • Poesía

    ELÍPTICO ECLIPSE

     
     
    Un eclipse arrepentido se levantó contra el cielo 
    cuando la granizada golpeó los vidrios del portezuelo, 
    con ventanas entreabiertas a la hora de la siesta 
    desnivelando los quicios, sembrando el pánico, 
    haciéndolos sentir que estaban vivos, 
    rompiendo el silencio con estrépito trueno 
    y con  el impulso de su obtuso aliento.
     
    Ni un designio de su voluntad que apareciera impreso 
    se veía en letras grandes con la gloria de otros tiempos 
    y sin encontrar sosiego 
    hasta los pájaros en las jaulas, estaban muertos de miedo. 
     
    Todo era complejo, aunque estaba completo 
    en los espejuelos de la mesa donde el hombre estaba tenso, 
    entre las flores de su propio huerto 
    que en jarrones perfumaban la casa y todo su cuerpo, 
    allí permaneció perplejo. 
     
    Arengas  repetidas tan presentes en su vida 
    a merced de sus sueños ahogados 
    en un amanecer  solitario  y lento,
    mientras su insomnio pastoreaba madrugadas 
    y en vientos de luna llena sentía el paso del tiempo, 
    dejando huellas descalzas con las palmas de sus manos 
    estampadas en paredes enmohecidas en noches sonámbulas. 
     
    Preso del tumulto exterior lleno de espanto, 
    por todas partes los vestigios olvidados que el viento se iba llevando, 
    con  lluvias de hojas secas que acababan en el último peldaño 
    de una escalera de fieltro bajo la cual se guardaban 
    los únicos platos de antaño.
     
    Todo era culpa de aquel eclipse, decía ella para consolarlo, 
    y él tirado como un mújol azul plateado 
    en una casa de náufragos con puro olor a quemado, 
    se abatía en el remanso de la decrepitud 
    con alpargatas de desahuciado. 
     
    Malania
     
    Imagenes de la red.
     
                                                                               
  • Poemas

    CAMINEMOS JUNTOS

    Caminemos juntos por donde pasan los sueños, donde vive la esperanza regalando sonrisas. 

    Caminemos juntos donde la vida abre sus puertas y las ganas son muchas.

    Caminemos juntos donde nos llama el ayer vuelto recuerdo, vistiendo cada día del mejor color.

    Caminemos juntos donde las palabras son verdaderas salidas del corazón.

    Caminemos juntos donde nada detiene cuando vamos pensando, todo se puede para ser feliz.

    Poema del escritor y poeta uruguayo Miguel Márquez

    Imagen R. E. Ch.

  • Poemas

    SOMBRA SERENA

    Hay días en  que pienso:
    qué sosa sería mi vida 
    si no llegara cada tanto
    uno de esos poemas 
    que me aguan los ojos. 

    Hay otros días en que siento 
    que no quiero recordar,
    porque no quiero 
    o porque no puedo soportar 
    encontrarme conmigo misma ni un ratito.
    Como dice el viejo Borges,
    cuando sueña con el otro
    que lo sueña al mismo tiempo.

    Encontrarme a mí misma,
    jovencita soñando esas cosas 
    que no he hecho.
    Recordarme angustiada por salirme 
    a buscar esos sueños q no fueron.

    Que no fueron como sueños
    pero fueron verosímiles, 
    reales de mis hechos y mis dichos. 
    Solo fueron, 
    sueños soñados q cayeron
    en la sombra serena del olvido. 
    Lo vivido ha crecido tanto, tanto!
    que el soñado ha perdido su asidero.

    Autora: Silvia Beatriz Carvallo

    Imagen: M. J. T.