Eres poeta artesano en letras y surcos de mi cuerpo. Te quiero así tal cual eres con tus miedos, o no tus dudas y misterios con esa mirada tierna y sonrisa fresca. Sé que tu río me espera a navegar mi interior con dulzura y firmeza matizado con besos que saben tan ricos a miel y fruta fresca. Hoy me detiene la lluvia los fulgores en la estela. Ya llegará el gran día pido perdón por mi ausencia