• General

    ORGULLO DE HOMBRES

    Su mirada 
    se escurría sobre las cosas
    no lograba detenerse en ellas.
    Ese día vibró el aire frío
    y deshojó sus palabras
    letra por letra. 
    Su fragilidad se había resguardado
    tras un indecible hastío.
    Atravesó calles angostas
    inundadas por el sol.
    A la hora de la siesta.
    el silencio era absoluto.
    Las aceras recobraron
    su inmovilidad espectral.
    Las sombras ausentes dormían
    lejos del influjo de la luz.
    La visión del hombre
    se había desvanecido
    dejándolo prendido en el brasero
    de un cielo demasiado grande para él.
    Para saciar el violento deseo
    que le había asaltado
    con los primeros albores de la mañana
    marcando la aurora del tiempo
    de los amores lejanos
    buscó refugio
    en la magia de la casa vacía.
    Y ya nada pudo detener
    el torrente de palabras
    y envuelto en ellas
    perdió la noción del tiempo.
    En la finitud de un gesto anodino
    modificó junto al pájaro
    su visión del mundo.
    Un auténtico paseo de recreo
    inventado
    por un jardín prohibido
    perfumó su cuerpo
    con jazmines, rosas y amapolas.
    Un jardín donde florecía
    el orgullo de los hombres.

    Malania

    Imagen: C. J. V.

     
     
                                         
  • General

    FELIZ AÑO NUEVO

    ¡Feliz año nuevo!*

    *Una frase trillada, pero hermosa cuando la expresas con el corazón*  

    *Cada año trae sus propias faenas, unas intensas,  otras suaves, pero cada una, nos ayuda al crecimiento espiritual* 

    *Debemos enfocarnos en trabajar por lograr armonía, paz interna, a través de la reflexión  diaria, la oración y meditación.*

    *Esta es una tarea -algunas veces- ardua pero, necesaria si deseamos cambiar o seguir en el mismo rumbo*

    *¡Construyamos un año de amor, paz y prosperidad!* *¡Es posible!*

    *Sin embargo, nada de eso  cae del cielo*

    *No basta  con desearlo.  Se hace  necesario idear estrategias para alcanzarlos.  En cada planificación, proyecto debemos ir  agarrados de la mano de Dios. Pidiendo al Espíritu  Santo,  guía, sabiduría  y dirección. Idear planes  no para ensalzar nuestro  ego, sino para ayudar al prójimo necesitado, esa es  la clave. De esa manera, nuestra vida habrá valido la pena*

    *¡Feliz año nuevo!*

    Texto: Escritora Sira Vargas de Biheller. 

    Barquisimeto- Venezuela. 

    Imagen: gentileza R. E. Ch.

  • General

    ADIÓS 2023

    AGRADECIMIENTO A DIOS Y A LA VIDA

    Hoy se termina  un año que nos dejó muchas experiencias.  365 oportunidades  para renacer cada día, de recomenzar y poner en práctica  las habilidades que Dios nos dio para mejorar. 
    Pasamos días muy ajetreados, otros relajados, pero todos plenos de bendiciones.
    Algunos no tan felices pero, igualmente estuvimos agarrados de la mano de Dios.
    En cada despertar, la naturaleza desbordante estuvo acompañándonos para que la admiráramos, para que disfrutáramos de la maravillosa creación Divina. 
    Para reconfortarnos cuando estuvimos fatigados… hacernos sonreír cuando estuvimos  tristes. 
    El viento, nos regaló sus caricias, el sol su calor, la lluvia, el líquido  necesario para reconstituir nuestras células.  La tierra, nos brindó el alimento a través  de las plantas y los animales que consumimos. 
    Una cadena  de pequeños  milagros sucedieron día tras día, para brindarnos la posibilidad de estar hoy de pie. 
    ¡Gracias  Señor por mi familia y por los amigos que me acompañaron en este transitar!
    365 días de su  presencia amorosa ¿Qué más  puedo pedir?
    Si Dios me lo ha dado todo: familia y amigos extraordinarios. El alimento y el agua que necesito para vivir. ¡Gracias,  gracias,  gracias!

    Autora Sira Vargas de Biheller

    Imagen propia

  • General

    SIN RESPUESTA

    Algo se había perdido,
    mi carta no tuvo respuesta.
    Tal vez dije algo,
    palabras que no debí pronunciar
    que no tenía que poner en vela.
    Algo se hundió en mi interior
    y sin nada que pudiera rellenar,
    el gran vacío que quedó en mi corazón.
    Mi cuerpo, una resonancia hueca.
    Con el trabajo olvidaba,
    pero entre la noche y el alba
    de nuevo lo recordaba.
    Es duro esperar respuesta
    solo quería saber
    si lo había herido
    con mis palabras de amor,
    un amor sin futuro ni destino.

    Malania

    Imagen de la red

                                       

  • Poemas

    PUNTO ÚNICO

     
    Las golondrinas bordaban
    signos etéreos en el cielo turquesa
    como queriendo deshacer un nudo
    con un solo objetivo, el fluir de la vida.
    Le hablaban de un futuro cercano:
    tal vez junio
    se dibujaron en 6, 8, 10 y 11
     
    Recordó su niñez
    la fecha de nacimiento pero…
    ¿a quién puede interesarle su vida de niña?
    si está a más de la mitad de su camino.
     
    En el silencio
    de la madrugada tibia litoraleña
    destila gotas de su frente
    y todo su cuerpo
    pizcas de agua con sabor a sal marina
    cuando recuerda
    aquellos inolvidables momentos.
     
    Le gustaría comenzar desde el principio
    y no dar lugar al final
    para poder proyectar una continuidad
    sin perder la esperanza
    de que ese día llegará
    tal vez en ese 10 o quizás 11.
     
    Encontrarlo nuevamente
    En el bar de siempre…
    en el espacio desmesurado de la vida
    en un punto único (nosotros)
    en este sinfín de mundos a la vez.
     
    Una ventana
    aun siendo enrejada
    sigue siendo ventana
    pensó
    y un amor
    aun en la lejana distancia
    sigue siendo amor.
     
    Malania
    Imágenes: propia y de la red
                                             

  • ANÉCDOTAS

    CAMPANILLA SILVESTRE

    RECUERDOS DE LA INFANCIA

    Muchos son los hechos ocurridos en la infancia y que son recordados con amor, con nostalgia. Algunos con alegría y otros con tristeza. Hechos que a lo largo de nuestras vidas han marcado huellas, profundas o superficiales, pero huellas al fin.
    En una de esas charlas cotidianas, al intercambiar opiniones entre amigos/as, uno de ellos, Ricardo, me relató:
    En aquel tiempo (refiriéndose a cuando era niño), no todas las casas tenían pared medianera y muchas usaban como divisorias un tendido de alambre tejido formando una malla de cuadrados o rombos, que llamábamos  “cerco”.
    Y en la casa donde viví mi niñez, había tramos de pared medianera de ladrillos y parte, de ese tejido divisorio con los vecinos de los laterales.
    Con uno de esos vecinos, en la parte donde existía ese tejido de alambre, había un cierto espacio ocupado por una planta que, hermanada con el tejido, pasaba ida y vuelta de un lado al otro, tal como una enredadera, que no sé si tan así lo era. Y tenía bonitas flores, de pétalos color naranja y con forma perfectamente acampanado… y que siempre la conocí y así la llamábamos: “campanita”. Y tan dentro mí quedó el recuerdo de ella, porque (también lo hacíamos con las flores de algunas otras plantas) separábamos con un tironcito los pétalos en conjunto, de la copilla verde que los contenía y livábamos el néctar, compitiendo con las abejas que hacían lo propio, con la diferencia que las abejas no destruían la flor como nosotros lo hacíamos (ellas clavaban el aguijón a través de los pétalos)…
    Quizás las hay de varios colores en otros lugares y ojalá no se repita con ellas la ignorante depredación que inocentemente cometíamos sin que nuestros padres nos vieran.

    Malania
    Relato gentileza de R. G.

    Imagen propia.

  • General

    PARADIGMA NO MODELADO

    Las palabras son peldaños, que suben y bajan, se mecen, te penetran, y
    quizás no te llevan a ninguna parte. Te elevan y cuando menos lo imaginas,
    te hacen aterrizar, unas veces suavemente, y otras tantas te golpean contra
    la corriente.
    Algunas están cubiertas de amor, otras recubiertas de materia extraña,
    tan extraña que oscurecen por completo su esencia.
    Entonces, su significado no se reconoce y su poder se pierde en el vacío,
    o tal vez en el intento, en conflicto continuo entre el interior y el exterior.

    Malania

    Imagen de la red.

     
     



     

     

     

     

     

     

  • Poemas

    NUNCA MÁS

    Bajo el brillo de la luna
    serpenteaba una canoa
    y con ella alguien,
    aburrido de no hacer nada,
    plañía en medio del lago
    buscando esa paz
    que el opiáceo no le daba.

    Y afligido
    por su destino incierto,
    exhalaba
    con los brazos abiertos,
    clamando amor
    cual ave en el desierto,
    bajo un cielo azul
    en mar adentro.

    Un remolino lo sorprendió
    envolviendo la canoa  
    y sin contemplación ninguna
    al fondo los sumergió.
    Nada pudo hacer el sol
    y frente a la luna lloró.
    Nunca más nadie los vio.
    Malania
    Imagen: C. J. V.
                                  
  • General

    SACRIFICIO DE AMOR

    Ensortijado,
    ulula el viento
    en la noche oscura,
    remece las ramas
    confundiéndose entre
    el drenar ilusivo y real
    de la llovizna fría
    que cae gris sobre los catres
    cubiertos por impermeables.
    No sabe el marinero
    si descansar
    o esperar despierto
    el postergado amanecer.
    Y así pasa días y noches
    velando y custodiando
    las fronteras de la patria.

    Malania

    Imagen: S. D. V.

  • Prosa Poética

    EL HOMBRE QUE LOGRÓ CAMBIAR

    Un hombre avaro y egoísta, cierta mañana se sentó en un pequeño banco en el patio de su casa.
    Hacía calor ese día. Él miró al cielo y preguntó las razones de su soledad. Tengo todo querido Padre, es decir lo que se puede obtener con dinero, sí. Pero no tengo a nadie que me de amor, no tengo amigos.
    Luego hizo silencio cuando una voz le habló suavemente:
    – ¿Nunca reflexionaste, pensaste en qué estabas fallando?
    Él contestó a la voz
    – No, realmente no.
    La voz le siguió hablando:
    – Reflexiona entonces, reconoce tus errores, ama, sé bondadoso, haz el bien de corazón y tendrás felicidad, calmarás tus aflicciones.
    El hombre quedó pensativo, luego de un rato ya decidido a hacer lo que le dijo la voz, salió.
    Pasó el tiempo y todo cambió para él, la felicidad se apoderó de su interior.
    Aprendió la lección pero, no sabía quién era el dueño de esa voz que lo aconsejó.
    Una noche preguntó en la tranquilidad de la casa:
    – Voz, si me escuchas ¿Quién eres? dime si es que puedes.
    La voz no demoró en contestar
    – Soy tu Padre, el que llaman Padre Celestial, búscame al despertar y no te olvides al acostarte, antes acuérdate de mí en una oración.

    Autor: poeta uruguayo Miguel Márquez

    Imagen: de la red