• Poemas

    ENTRE TIPAS FLORECIDAS

    Y él se fue,
    entre árboles de flores perfumadas,
    donde el viento tejía memorias
    con hilos de luz en cascada.

    No miró atrás.
    Sus pasos callaban promesas
    que aún en mi pecho temblaban,
    como hojas que no quieren caer.

    El suelo, una alfombra amarilla,
    dibujaba el camino de su despedida,
    y cada hoja era un adiós
    que el otoño guardaba en su partida.

    Subió al tren sin palabras,
    como quien ya ha llorado en silencio,
    como quien se lleva la mitad del cielo
    y deja la otra mitad ni en ruinas ni suspenso.

    Yo me quedé allí,
    bajo los árboles que aún olían a nosotros,
    esperando que el perfume bastara
    para no olvidarlo del todo.

    Y él se fue,
    quizás definitivamente,
    pero su ausencia sigue llegando
    con la floración de tipas y naranjos.

    Malania

    Imágenes: gentileza de mi amiga Mariana. Bs As.

  • Poesía

    MASCOTA ESPÍA

    En un sector del jardín florecido,
    donde el sol se posa en paz al mediodía,
    camina sigilosa y sin ruido
    la elegante gata Sía.

    No es gata común, es espía
    de pajaritos que cantan sin temor,
    pero más que cazadora fría,
    es soñadora de amor.

    Entre flores se esconde ligera,
    ojos dorados, bigotes en tensión,
    más cuando el viento la espera,
    sólo juega sin intención.

    Los pajaritos vuelan desprevenidos,
    mientras Sía se estira al sol,
    la panza al cielo, los sueños dormidos,
    con el jardín como su control.

    Porque aunque parezca acechadora,
    Sía es reina, y no enemiga,
    bajo el sol, entre aromas de aurora,
    vive su vida tranquila… y amiga.

    Malania

    Imágenes: M. Julián T.

  • Poemas

    NOCHE DE NOSTALGIA

    El hombre estaba agotado
    había perdido toda esperanza.
    Han volado sus sueños
    desaparecieron sus deseos.
    Lleno de vacíos, nada le importaba.
    Sus actos carecían de significado
    lo que hacía a nadie le interesaba.
    Era eso lo que él pensaba.
    Sus palabras comenzaron a marchitarse
    su voz ya no vibraba en el aire.
    No lograba seducir ni a las flores.
    Sus versos estaban más que vacíos.
    Solo la nostálgica noche
    le brindaba consuelo.
    Se identificaba con ella,
    buscaba el olvido en la oscuridad.
    Quería desconectarse de sí mismo,
    alejarse de su naufragio mundano.
    Una vez dormido, no podía pensar
    no sufría por el adiós, quizás definitivo,
    sabía que la había perdido.
    Se abandonaba en esos sueños sin soñar.
    Pero esos sueños lo engañaban
    le decían que ella todavía le pertenecía,
    y que algún día volvería.

    Malania

    Imagen: propia

  • Poesía

    HORMIGA FLORIDA

    Una hormiga negra, brilla como el sol,
    lleva flores frescas sobre su cráneo inquieto,
    corona de pétalos, corona de misión,
    en su andar diminuto, perfecto y secreto.

    Camina sobre el mar, sin miedo, sin pesar,
    las olas no la tocan, el viento no la ve,
    como si el universo la dejara pasar,
    como si el agua supiera quién es.

    Cada paso un suspiro, cada flor una promesa,
    que entrega al horizonte con felicidad,
    su carga no pesa: es pura belleza,
    y su rumbo es sueño, fe y voluntad.

    Quién sabe adónde va, o si alguna vez llegó,
    pero el mar, en silencio, su viaje guardó.

    Malania

    Imagen de la red.

  • Prosa Poética

    DIFERENTES

    Las ideas bullían en mi interior, eran fuertes y profundas.
    Escuché a alguien decir que la tierra entera les pertenece a todos los hombres. ¿Será tan así? No estoy tan segura de eso. Si solo viviesen hombres, o mujeres, ¿la raza humana subsistiría sin animales, sin plantas, sin un bioma? Totalmente imposible.
    Pero seguí escuchando la conversación, y ahí sí, pude sentirme más convencida de que en algo tenían razón:
    Las divisiones que trazan los corazones mezquinos necesitan ser borradas. El planeta debe mantenerse limpio y sano de egoísmos para que todos podamos movernos de un lugar a otro sin restricciones, pues los dueños absolutos no existen.
    Deduje que, juzgar de antemano sin escuchar hasta el final, puede terminar en un gran malentendido. Así comienzan los “chismes” y calumnias.
    Las imágenes ilustran la diferencia que hay entre diferentes tipos de una misma especie: flores. Ellas no compiten, no se degradan unas a otras y ambas exhiben su particular belleza. Ambas son necesarias, por ejemplo, para alimento de abejas colibríes, etc. Y para embellecer nuestro paisaje.

    Malania

    Imágenes: Ernesto R. y Rubén Ch.

  • Poemas

    COMPETENCIA DE COLORES


    Hoy di un paseo entre los árboles,
    y vi cómo competían en silencio,
    cada uno mostrando su esplendor,
    con colores brillantes como un sueño.

    Las hojas se visten de oro,
    y otras, rojas como el fuego,
    se despliegan al viento con orgullo,
    bailando su danza al ritmo del cielo.

    En cada rincón, un arco iris de verde,
    donde el sol se filtra con cautela,
    y cada rama, con su traje único,
    canta una melodía de naturaleza.

    Un concierto sin palabras ni juicios,
    donde el brillo de cada color es testigo
    de que, aunque compiten por resplandecer,
    en su quietud, juntos aprenden a crecer.

    Algunos le dan respiro a las hojas
    ellas caen y desaparecen.
    Es hora de lucir sus bellas flores
    cada cual con sus propios colores.

    Malania

    Imágenes Ninet y propias.

  • Poemas

    TACURÚ Y FLORES

    Un nido de hormigas bajo el sol,
    un sinfín de pasos en tierra roja y oscura,
    mientras las flores de violeta al viento
    bailan suaves, llenas de ternura.

    Las hormigas se apresuran en su marcha,
    y las flores, quietas, se mecen en calma.
    Dos mundos en danza, tan distintos,
    pero ambos guardan paz en el alma.

    Malania

    Imagen: Propia

  • Poemas

    VIAJE DE SUEÑOS

    En un bosque, en el campo o en la ciudad,
    no hay lugar donde no habiten sueños,
    esos que navegan en silencio,
    entre las flores y frutos de árboles,
    entre grandes matas de arbustos
    o de hierbas aromáticas
    O viajan en vagones sobre rieles y durmientes
    mientras se observan maravillosos paisajes.
    No hay lugar mejor o peor para soñar,
    cualquiera es apropiado,
    lo importante es no dejar de soñar.

    Malania

    Imágenes propias

  • Poesía

    AÑOSO

    El campo está callado,
    en el cielo no hay grises,
    un añoso árbol allí vive
    donde su sombra persiste.
    Con tronco corpulento,
    muestra surcos de años,
    sus raíces abrazan la tierra,
    raíces firmes, de antaño.
    El viento lo acaricia
    y su corteza labra,
    murmurando historias
    de una vida larga.
    En sus ramas crecen
    con silencios guardados
    las flores de clavel del aire
    abriéndose en susurros callados.

    Malania

    Imagen: Claudia D.

  • Poesía

    LAPACHO ROSA

    Duerme el lapacho rosa
    sobre el suelo colorado,
    con sus flores marchitas,
    de sus ramas, despojado.

    Las palomas y gorriones,
    sus nidos están llorando,
    ¿Dónde pondrán sus pichones?
    el hombre los ha robado.

    Malania

    Imagen: Rubén E. Ch.