CAMINOS Y ENCRUCIJADAS
Vamos andando por la vida donde nos encontramos con días que fluyen como agua de río calmo. Pero de pronto es posible que nos encontremos con encrucijadas donde sí o sí hay que optar por un camino o por otro. Con seguridad escogemos el que creemos que es el mejor pero no siempre resulta serlo.
Nos gusta escuchar que nos digan que nos aman pero muchas veces nos cuesta expresarlo con palabras.
Con agrado y hasta con una sonrisa contemplamos los nuevos brotes de las plantas y las flores del jardín. Pero nos cuesta mantenerlas. A veces nos lamentamos cuando se nos seca una planta sin saber el motivo, o cuando se nos muere una mascota por más que le hemos dado todos los cuidados necesarios.
Aunque nos cueste siempre tratamos de hacer lo mejor que podemos y como mejor sabemos hacerlo. Pero muchas veces eso no es suficiente y entonces nos preguntamos: ¿habré hecho lo correcto?Malania
Imagen: R. E. Ch.
PALABRAS
Palabras…Porque día a día ellas queman más, como prisioneras en el fondo del mar, mar de lágrimas que nunca surgieron, porque el tiempo y la vida las petrificaron y se durmieron en su interior.
Con palabras sencillas y sin rodeos, como en un cuento, así, recién nacidas por dentro, quiere decir lo que siente.Le preguntó aquel día-¿Puedo amarte?– Sí -le respondió-. Ámame como quieras, cuanto quieras, cuando quieras y por donde quieras- una sonrisa brotó de sus labios y un beso selló los de ella, y la enalteció.Hace más de un año que de ella se alejó la palabra “amor”. Se la llevó él cuando en una noche, mayo se lo arrebató para nunca más volver. Ya no quiere pronunciar “te amo” plantada ante una fotografía inerte. Aunque la observe mil veces, el tiempo no retrocederá. Es inevitable la muerte, su ausencia es definitiva.De pronto aparece otra persona:
-Quiere amarte, pero no la dejas, ¿sabes? Porque cuando está lista para hacerlo, tú en silencio te alejas.Quizá nadie se da cuenta que al amor para que florezca hay que fertilizarlo, para que emane todo su color, su brillo, su sabor y su candor.¿Cómo se fertiliza el amor? Se preguntarán. Una palabra dulce a través de un mensaje, una poesía, un poema, o a través de un email, del teléfono, o frente a frente. Y hay muchas más formas de decir “te quiero”, “te amo”. Y ahora, si estarías aquí te lo diría, porque así lo siente, y te lo puede decir.A veces no somos capaces de demostrar, de decir lo que sentimos para no hacer el ridículo frente al otro, pero es un error, porque nadie puede adivinar lo que el otro u otra siente.MalaniaImagen de la red17 DE MAYO
Un día como cualquiera, en vaivén de tristeza y rutina, sin rumbo fijo comencé a recorrer las páginas de internet; cualquiera era válida, hasta llegar a una en la que, por algo que no sé por qué, me detuve. Muchas fotos, algunas nítidas y reales, otras mentirosas y robadas de actores, otras sexis y sugerentes, algunas ridículas y sin sentido, otras de animales o de flores. Cada cual representaba la identidad de alguien que estaba detrás de la pantalla. Tras el recorrido de mi mirada, y tal vez por intuición, el índice pulsó sobre una imagen de perfil poco común. Un cuerpo emplumado, en el que no podía distinguir si era hembra o macho y si lo que reflejaba, era el momento preciso en que una cámara captó un acto previo a la reproducción o de qué otra cosa se trataba. Mi curiosidad fue en aumento, recorrí cada renglón del perfil que no decía demasiado pero lo suficiente como para creer que era una persona no del todo libre y que deseaba encontrar una salida hacia un hilo de dulzura y libertad. Virtualmente nos saludamos y de a poco fueron sucediéndose palabras en telegramas tan breves que a veces me causaba enojo el por qué no eran más extensos. Desencuentros fatales entremezclados con mínimas coincidencias se presentaron en el camino desde aquel diecisiete de mayo. Podría catalogarse como la inexistente película en blanco y negro titulada “Acepciones y eludidos”.
Una noche ventosa, como en relámpago irisado, me invadió la duda. Pensaba en él (me gustaba pensar en él), si era un trivial internauta, un solitario aranero, o quizá miembro de alguna secta religiosa o de algún foro judicial. Quién sabe qué misterio se ocultaba en ese hombre que, vestido elegantemente, esperaba mi llegada detrás de una mesa de bar. Su mirada fija y tranquila desvió mi intento por saber algo más de él, mientras tropezaba con su sonrisa que derretía mi corazón y mis dedos con los suyos en el intento de mostrar una identificación, que hasta el momento había sido un simple seudónimo. Salimos del bar luego de más de una hora de charla, caminamos cierta distancia y nos despedimos con un beso en la mejilla y apenas un roce de manos, lo que bastó para darme cuenta que en aquél hombre había algo que me atraía. Se sucedieron esporádicos encuentros de café y charla, casi siempre en el mismo sitio mientras la química iba sorteando dificultades para luego florecer al máximo. Y así fue.
Va pasando el tiempo cada vez con más alegrías que tristezas, más coincidencias que desencuentros, y el amor tomando curso. Días pasados, mientras viajaba por cuestiones de trabajo, su imagen se apoderaba de los interlineados del libro que es mi compañero de ruta. Vislumbraba las líneas de una nueva página y su imagen estaba allí con nuestras manos entrelazadas, abrazos tiernos y profundos de esos en que la fusión de cuerpo y alma va al unísono, y el deseo de tenerlo nuevamente junto a mí, intensificándose día a día, por lo que en ese momento, la lectura quedó algo postergada. La iluminación del transporte público era escasa y preferí reposar observando cómo las últimas luces horizontales del día brillaban cansadas, casi con desmayo, en el ambiente gris. Con acalorada alegría en mi rostro que era evidente y algún que otro pasajero la detectara, bajé y caminé hasta mi casa más ufana que nunca.Imagen propia.SIMPLEMENTE HOY
“me deleito en el placer de no pensar, ni formular preguntas ni esperar respuestas” lo escribió mi querida amiga Marina Collado Prieto en su presentación de la página Escritores y Letras, “Dormir o despertar”.
Y es así,
muchas veces cierro los ojos, no veo, no pienso, no hay nadie a mi alrededor, por lo tanto no habrá preguntas, ni tampoco me pregunto nada, simplemente existo, disfruto del estar. Pero a la par nacen cosas maravillosas: una paz enorme que me envuelve, una música suave que viene desde no sé dónde, el canto de un grillo que busca a su pareja en la oscuridad de la noche o el trino de pájaros que me avisan que ya amaneció.
Y me vuelvo a dormir, aunque sea por unos minutos más. Y sueño, algo que luego no recuerdo, pero que fue lindo, porque me despierto con una sonrisa.
Y pienso en la postal que me enviaste, ilustración del crepúsculo en diagonal y en declive, en ese corazón que parece el agujero bajo un puente formado por un árbol caído, y el agua del río que refleja las copas multicolores de los árboles. Pienso y sonrío, sola con mi soledad pero feliz por vivir un día más. Y no pregunto nada, ni siquiera para saber por qué me enviaste esa postal con una cascada.
Es hermosa y ya, ahí termina la cuestión. Porque no quiero pensar en el ayer, el presente es un hermoso regalo y no vale la pena desperdiciarlo.Malania.
Imagen de la red. Gentileza de R. G.
MARIPOSA SENCILLA
Sin esfuerzo aletea,
sobre el follaje florecido
de lantanas, zinnias,
claveles, lavandas
y campanillas amarillas,
una mariposa resplandeciente
de alas transparentes.
La brisa perfumada
contrasta en la tarde
con las nubes neblinosas
de polen pigmentado
que las abejas han dejado
como queriendo arrasar
con todo lo más rico y provechoso
de las flores, a pleno sol
en horas de mediodía..Imagen: R. E. Ch.
SER FELIZ
Camina plácido entre el ruido y la prisa, y piensa en la paz que se puede encontrar en el silencio.
En cuanto te sea posible y sin rendirte, mantén buenas relaciones con todas las personas.
Enuncia tu verdad de una manera serena y clara, y escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante, también ellos tienen su propia historia.
Evita a las personas ruidosas y agresivas, ya que son un fastidio para el espíritu.
Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado pues siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú.
Disfruta de tus éxitos, lo mismo que de tus planes.
Mantén el interés en tu propia carrera, por humilde que sea, ella es un verdadero tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos.
Sé cauto en tus negocios, pues el mundo está lleno de engaños. Mas no dejes que ésto te vuelva ciego para la virtud que existe, hay muchas personas que se esfuerzan por alcanzar nobles ideales, la vida está llena de heroísmo.
Sé sincero contigo mismo, en especial no finjas el afecto, y no seas cínico en el amor, pues en medio de todas las arideces y desengaños, es perenne como la hierba.
Acata dócilmente el consejo de los años, abandonando con donaire las cosas de la juventud.
Cultiva la firmeza del espíritu para que te proteja de las adversidades repentinas, muchos temores nacen de la fatiga y la soledad.
Sobre una sana disciplina, sé benigno contigo mismo.
Tú eres una criatura del universo, no menos que los árboles y las estrellas, tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no, indudablemente el universo marcha como debiera. Por eso debes estar en paz con Dios, cualquiera que sea tu idea de Él, y sean cualesquiera tus trabajos y aspiraciones, conserva la paz con tu alma en la bulliciosa confusión de la vida.
Aún con todas sus farsas, penalidades y sueños fallidos, el mundo es todavía hermoso. Sé cauto, esfuérzate por
SER FELIZ.Imagen de la red.
EN ALAS DE ARCO IRIS
Cuando de repentela angustia batallaen un día otoñalque todo pinta gris,los claustros vacíosecos de silenciostoman la partida.Y mágicamenterefulge el arco iris,presente en obsequioportando tu nombre,cargado de besosabrazos y caricias.Al abrir mis ojospercibo alborada,en bella sonrisarenuevas mi vida.Entonces sonrío,vuelve la realidad,colma fantasías,despejo el vacío ybrota en mi alma henchida.¡Gracias por estar!Imagen de la red.DORONDÓN
Lo vi con rostro vacilante, incierto como una memoria infiel. Su tez pálida, había dejado atrás el color de antes, un rosa festivo. Su pelo plateado daba impresión de noble dux. Pero una ligera obesidad lo fatigaba hasta dejarlo dormido luego de ingerir cualquier alimento.
En contraste a eso, como los árboles que en otoño varían sus colores, pareció cambiar su esencia cuando la vio llegar temblorosa y agobiada por el dorondón. El brillo en sus ojos lo transformó y esbozó una sonrisa que le hizo quitar su amargura. Un fuerte abrazo fue el inicio de su abrigo.
La vejez a veces se manifiesta como algo moral, y no es permanente el mismo estado de ánimo. Los cambios atávicos desaparecen de un momento a otro según la situación vivida.
Hoy la niebla espesa y fría los reunió para continuar juntos en la vida.Imagen: N.V.S.
RUGE EL VIENTO Y BRAMA EL MAR
En composición íntima y personal
con sorprendentes colores sombríos
aflora detrás de una sonrisa fingida
la frescura estival
después de una agobiante jornada.
Es hermoso contemplar
la calma del mar en el cielo despejado.
Pero cuando el sol brilla y quema
sobre un mar embravecido por las olas
y el viento frío se despliega
congelando hasta los tuétanos,
todos aquellos que todavía
tienen fuerzas de desear y querer estar,
continúan tendidos en la playa
mientras los demás disparan
y se protegen bajo los aleros y las paredes
de los edificios y las casas.Imágenes propias
INCANDESCENCIA
Caminaba por la sombra,
esquivando la acera del sol.
No quería que fuera cierto
lo que sabía era verdad.
No terminaba de entender
lo que sería su vida sin él
porque a su lado se sentía feliz.
Con sus ojos trémulos la mirada perdida
en la fosforescencia del horizonte,
caminaba y respiraba sin prisa
como para aplacar su pálido semblante.
La hizo tan pero tan feliz
cuando provocaba en ella
que se encendieran y brotaran
los capullos de su blanco pecho.
Horas felices sazonadas
con cálido sudor malva
en incandescentes mañanas madrugadas
o atardeceres en mediodía.
Ella deseaba que se quedara
no quería que el momento acabara
en ese silencio interior
que se rompía con un ¡¡¡Ah!!!…
prolongando atardeceres efímeros
de un amor sin porvenir.
Pero el presente era tan grandioso
cuántas veces!…
al sentir el escalofrío de las brasas atónitas
en sus pupilas y todo su cuerpo
cuando en la sombra apenas iluminada
percibía en su lecho
la inconfundible fragancia de su amado hombre.Imagen propia.