• General

    SOLO SUYA

    No todo
    son letras en el mundo,
    tampoco  se sabe
    qué es un acto poético,
    si el escribir un poema
    o trepar por un dintel,
    si es ver crecer un árbol
    o contemplar un amanecer.
    Solo nos damos cuenta que existe
    cuando ha sucedido,
    bajo el sol o luna llena
    o en la penumbra del dosel,
    cuando ella se duerme junto a él,
    cuando una nube tapa la luna
    y en la aldea le susurra  
    que es toda suya,
    solo suya
    y nunca más de otro ser,
    justo en el momento
    en que el sol rompe
    minutos antes de lo habitual
    su hora de llegada
    y los descubre,
    ella envuelta
    solo con el perfume de su mar
    y él con la aureola
    de las huellas que en marea
    ella labró al brincar.  
    Malania
    Imagen propia
  • General

    HONGO PARÁSITO

    Solazaba en el nogal
    un pequeño agarical.
    Se desprendió de una rosa
    que creció junto a un lastre,
    perdida en el pastizal
    con color humo vaporoso,
    en un corazón erosionado.
    Y despacio las sirenas
    de las chicharras lloronas
    le fueron cambiando el tono,
    en grises y marrones herrumbrados.
     Malania
  • General

    ESTA NOCHE

     

     
     
    Adormecida …lo sintió entre sueños. 
    Estaba allí, eran sus manos, eran sus dedos 
    con movimientos muy suaves, despertándola. 
    Luego le hizo un guiño 
    y salió a caminar por la calle del sol.
    Una campana sonó a lo lejos.
    Ella despertó y lo buscó. 
    Pero solo había sido un hermoso sueño.
                                                             
    Malania
     
  • General

    ELLA

    Allá,
    donde termina el muelle
    se agolpa el cardumen de lisas
    cuando su figura se refleja
    en las cristalinas aguas del golfo.
    Trae en la bolsa
    un sinnúmero de migas
    de algún pan que ha sobrado
    y un puñado de semillas
    que arroja a la gaviota
    amanecida en la orilla
    para evitar la pelea
    con las lisas en familia.
    Su perro ladra
    quiere continuar el paseo
    que tuvo su inicio
    a las siete de la mañana
    posterior al habitual aseo.
    Ella sigue andando
    y él mueve la cola
    en señal de triunfo tempranero.
    De pronto Ella se detiene
    mete su mano en la bolsa
    hay más migas y semillas.
    Los comensales son
    un par de patos
    y varios mújoles
    que se disputan
    el manjar diario
    esta vez sin gatos.
    Ella y su perro
    continúan la marcha
    mientras yo me entretengo
    con cada nube diferente
    con cada rayo de sol naciente.
    Y al terminar el recorrido
    Ella, allí sentada
    sobre una base prismática
    con cabeza gacha
    llora una ausencia.
    Los peces y los patos
    vendrán por la noche
    a brindarle compañía
    para esfumar su dolor?
    Yo continúo mi camino
    vuelvo a estar contigo
    para no ser serenita.
    Prefiero tus palabras
    que a la distancia
    son mi abrazo
    y amorosamente
    son mi abrigo.

    Malania

    Imagen propia

  • Poemas

    ENTRE NEGRO Y RADIANTE

     

    El sol quema en costanera
    y las nubes escapan
    para no morir navegan.
    No son blancas ni celestes
    son de negra polvareda.

     

    Pero al otro lado del río
    las nubes no sienten frío,
    pasean sin disparar
    aunque ven a la noche
    que está por llegar.

    Malania.

    Imágenes: J. A. T. y M. J. T.

  • General

    EL FOGÓN

    La idea revolucionaria del fogón.
    ¿La luz es una partícula?

    ¿Alguien pensó como algunos físicos que la luz era una partícula?

    La confirmación definitiva del fotón ocurrió en 1923-1924. Asumiendo que la luz consistía en partículas reales que tenían una energía definida y una cantidad de movimiento, como balas pequeñas.

    Einstein lo dijo de manera muy sencilla: el espacio es lo que nosotros medimos con una regla de medir, y el tiempo es lo que medimos con un reloj. La claridad de estas definiciones revela una mente absorta en un gran propósito.
    Pero Einstein pensó que había algo especial en la velocidad de la luz, que la velocidad de la luz es una constante absoluta.
    Da igual lo de prisa que uno se mueva, la velocidad de la luz siempre es la misma, nunca te puedes agarrar a un rayo de luz.

    Fuente: El Código del Universo (Heinz Pagels)

    Imagen: S. D. V.

  • Poemas

    LUCES DE LUNA

    En soledad,
    envuelto en un aroma nostálgico,
    escuchó voces traídas
    por el viento de invierno,
    entre luces de colores,
    reflejos de luna llena
    y papeles grises.
    Murmura por el infinito pasillo,
    deseando curar
    las heridas del pasado,
    entre remolinos absurdos
    y un vértigo sin nombre.
    Hoy rebasan sus párpados
    con húmeda y salvaje inocencia
    en el desvanecer del tiempo
    recordándola en la distancia.

    Malania

    Imagen: R. E. S.

  • General,  Poemas

    AIRE DE SILENCIO

    Él la dejo en la inmensidad del silencio,
    tendida en el lecho de la oscuridad,
    sin sentido por el hoy y el mañana.
    Qué más da, si está ausente su presencia.
    Él prefirió caminar solo
    por las vías de la vida
    orillando las esquinas
    sin voces que lo acompañen,
    sin el sentir del roce de sus pieles
    de su brazo contra el suyo
    en la escalera del subte
    sin los besos tibios
    en el ascensor a cualquier piso,
    sin el café y el agua de las diez
    frente al verde y hermoso parque.
    El prefirió el caminar en soledad
    o quizás eligió
    en otros brazos estar.
                                                     Malania
    Imagen de la red.
  • Poemas

    CÁLIDO SUEÑO

     
     
    Si durmieras vida mía,
    en el barco de mis sueños
    y pusieras tu sonrisa
    en alas de benteveo,
    me amarraría a tus ansias
    esas que ambos queremos,
    a llenarnos de placeres
    de los que emanan en fuego,
    cuando el sol rompe la niebla
    y al frío empuja a lo lejos.
     
     
    Malania

     

    Imagen de la red. 

  • General

    BUENOS DÍAS

    Con pensamientos inexpresados
    y el tiempo incoloro
    imposible de captar,
    evocaba imágenes de fantasía
    enzarzado en una batalla
    que creía perdida.
    Soportó la fatiga
    y recuperando fuerzas
    desplegó sus alas y pensó:
    Debo emprender vuelo,
    hoy será un buen día.
    El hambre no le permitía
    quedarse quieto en su nido,
    debía buscar comida
    para ella y sus polluelos.
    Y dejando atrás los relámpagos,
    voló sin mirar los deshielos,
    se posó sobre una blanca dalia
    y un girasol amarillo.
    Comió semillas de mijo
    y tomó lo necesario
    para volver a su nido.
    Sus polluelos felices
    la recibieron en trino y a coro:
    Hoy es un buen día.

    Malania

    Imágenes de la red.
    Gentileza de R. G.