• Poemas

    ADVOCACIÓN

    Advocaba en sus versos
    a la dama misteriosa,
    la veía vestida con brocado azul
    con dibujos de flores asépalas,
    la consideraba una diosa.
    Tarareaba a capela  
    por las calles adoquinadas,
    dibujaba símbolos
    con versos en el aire,
    cual gaviota aterrada
    escondida en un establo.
    Sabía que nunca la encontraría,
    pero la soñaba
    con euforia exagerada.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    EL BANCO VACÍO

    Algo no se ha ido aún,
    ni el sonido del incendio lo devora.
    Se instaló en la intemperie de tu ausencia,
    en un banco vacío que te espera.
    Las flores amarillas se expresan
    a través de su dulce perfume,
    y el viento lo transporta en caricias,
    a través de la distancia,
    salvando errores,
    desatando nudos,
    soltando el silencio,
    para anclar en la sombra de un gran puerto.
    La lluvia revive
    la esperanza de nuevas flores.

    Imagen: A.M.N.

  • Poemas

    DORMITANDO TU PRESENCIA

    Tu aroma perdura,
    entre las flores
    que alegran el ambiente
    iluminando con sus colores.
    El gris del día
    ya no me altera,
    y las ondas positivas
    se manifiestan  brillantes.
    Un sonido me indica
    que estás ahí,
    dormito con tu presencia,
    estás aquí junto a mí
    no en cuerpo pero sí
    en alma, corazón y vida.
    Ahora, frente a ti,
    pensándote,
    acariciando tu mirada.
    Tus manos me transmiten
    el calor del café,
    con dos de azúcar.
  • Poemas

    CAMPANILLAS ROSAS

    A campo abierto,
    donde la inspiración brota,
    revive en ellas
    campanillas rosas;
    las amas tú, las amo yo. 
    Porque me has enseñado
    a contemplar en silencio,  
    y acariciar como las flores,
    hablar con la mirada sosegada,
    a disfrutar del ambiente.
    Me preguntabas mil veces
    cómo me encuentro,
    a lo que respondí siempre
    ahora bien, siempre bien,
    con una sonrisa latente.
    Mientras los insectos amarillos
    esperan que la lluvia
    lave sus abyectos  ocelos,
    las campanillas rosas
    gozarán bellas.
    Meciéndose en el viento
    lucirán orgullosos  pétalos,
    albergarán  mariposas,
    cuidarán celosamente sus nodos
    aún bailando a campo abierto.
    Imagen: R.E.Ch.
  • Poemas

    NATURALEZA MÁGICA

    Una estrella fugaz desplegó su cola
    y con ella un puñado de palabras,
    como si fuese una guirnalda
    de flores color malva.
    Frente al espejo colorido
    con sus ojos almendrados,
    contemplaba el mar en calma  
    con imaginación obsesionada.
    La estrella se internó en las aguas
    y con ella rodaron las palabras,
    que flotaron extraviadas
    formando flores crepusculares.
    Un absorto espectador
    inmóvil sobre la playa,
    insinuó una estrofa
    en una hoja desplegada.
    Sobre ella una crisálida
    con las iniciales de su nombre
    y vio nacer a una mariposa
    sobre un ramillete de flores pálidas.
    El espectador se dio cuenta
    que la naturaleza es mágica.

    Imagen: Gentileza de R.E.Ch.

  • Poemas

    REFLEJOS DE CARAMELO

    Con su inagotable acritud
    se sorprende
    ante la exuberante alegría
    de aquella dama de ojos pícaros,
    reflejos de caramelo.
    Se interna en un manantial claro,
    siembra un camino de flores
    del que nunca quisiera salir.
    Pero como nada es para siempre,
    un halo de tenue luz
    le indica que la vida,
    ardua continúa.
    Y bajo un cielo despejado
    emprende el regreso,
    entre la humareda gris
    de un cigarro encendido.

  • General

    PASEO DE NUBES

    Hoy las nubes pasean de la mano,
    unas van por todo,
    otras van por nada
    y simplemente navegan
    en el mar de los sueños,
    sobre campos, ciudades y montañas.
    Expelen aromas,
    los que durante el paseo
    del éter absorbían,
    y suaves melodías
    cuando se rozan con aquellas
    que permanecen como estatuas,
    esas que penden
    de hilos fosforescentes,
    aturdidas por el mismo sol,
    que les ayudará a soltar
    sus acumuladas lágrimas,
    sobre los campos resecos
    y flores mustiadas.

  • Poemas

    CAMINATA EN COMPAÑÍA

    Salió a caminar muy temprano,
    perfiló su atuendo acorde al clima,
    redondeó las esquinas,
    recorrió el bulevar
    hasta llegar a la avenida.
    Continuó caminando y observó
    cómo un picaflor la seguía,
    y de a ratos entre flores se escondía.
    Succionó amapolas y campanillas
    y en una de ellas descubrió
    que otros colibríes había.  
    Revolotearon, mezclándose
    jugando a la ronda
    como niños parecían.
    Entre gorjeos y risas
    se alejaron de su vista.
    Ella prosiguió su camino,
    ya no iba sola, a él lo sentía,
    iba hombro a hombro en su compañía.

    Imagen: Gentileza R. E. Ch.

  • Poemas

    LUCIÉRNAGA

    Radiante,  lapacho amarillo,
    sus pétalos al viento
    regalan en alfombra su brillo
    a la solitaria acera.
    De la vereda de enfrente
    nace el encantamiento.
    Un lapacho rosa, luce y se mece
    en hálito de vida.
    Una jovial luciérnaga, pasea nocturna
    vuela y vuela irisada, galante y celosa
    del amarillo y rosa.
    Busca otros lares
    y queda aletargada
    sobre un árbol coposo.
    Durmió todo el día
    y al despertar sintió el aroma
    dulce y delicado
    de néctar avenado.
    Lapacho espectacular
    de flores turquesa
    único en su especie
    circunspecto y sublime.
    Con lenguaje sin palabras
    la seduce y enamora
    con encanto sin igual.
    Cada noche el lampírido
    ilumina los  pétalos
    custodiando su belleza
    con exclusividad.
    Pero en la madrugada siempre elige una,
    solo una, y la flashea,
    a sus ojos  la más bella,
    aquella que eligió amar,
    la que desde el primer día
    elogió su amor, ese amor
    que con su luz le propiciaba
    un maravilloso ardor
    en invernales madrugadas.
  • General

    ORQUÍDEA DE MISIONES, ARGENTINA

    Veo su cara tallada en el árbol sobre las flores y a un oso de perfil que besa su mejilla derecha, mientras él se colma de placer con el aroma de las orquídeas. Debajo de las flores, un rostro boquiabierto tallado, como si quisiera gritar algo al viento. El trío cuida el racimo de las bellas  color rosa. El árbol luce su verde y regala la sombra necesaria para que estas bellezas no sean agredidas por la crueldad de los rayos, que viajan atravesando el agujero de ozono.