• Minicuentos

    ANA EN CELO

    ¡Ana! ¡Ana! ¡Anaaaaaaa! Gritaba un hombre y me detuve para ver si era a mí a quien llamaba.
    Mi nombre no es ese,  pero podría haberme confundido con otra persona. A esa hora de la mañana no circulan muchos peatones.
    ¡Ana! ¡Ana! ¡Anaaaaaaa! Y me di cuenta que perseguía a una perrita negra. De pronto vi que la mascota venía en dirección a mí y sorprendida más que asustada me quedé quieta sobre la acera. Ana se metió poco más entre mis piernas como pidiendo auxilio. Pero al ver que su dueño se acercaba comenzó nuevamente a disparar y detrás, un perro un poco más alto que ella de color canela la perseguía. El hombre cansado corría y gritaba ¡Ana! Casi sin aliento.
    No sé por qué me causó gracia, quizás porque escuché la algarabía de los pájaros sobre un lapacho florecido de rosa, como festejando la situación.
    Dos colibríes con colorido aleteo y una abeja gozaban de las apetitosas y perfumadas flores de azahar.
    Dobló la esquina el hombre detrás de Ana y el perro.
    Una vecina dijo: – Ana está en celo por eso la locura de su dueño. Ana se le había escapado cuando había abierto el portón de su casa para salir con su moto.

    Malania

    Imagen: L. M. R.

  • Poemas

    UN ÁRBOL BAJO LAS NUBES

    ¿Qué le pedirá el árbol a las nubes?
    Quizás un poco de agua fresca
    o una repentina y copiosa lluvia.
    ¿Qué le dirán las nubes al coposo árbol?
    – Con tus flores nos teñiste de bellos colores
    en un amanecer celeste
    entre violetas y turquesas.
    Entre nubes y árbol
    se pasea flotando la brisa cálida
    de un invierno diferente
    con algunos rayos fulgentes
    que nacen con la aurora
    y se esconden con el eco
    de un concierto de pájaros
    antes que el ocaso
    se apodere del árbol y de las nubes.

    Malania

    Imagen propia.

  • General,  Poemas

    SUEÑO

    Extasiada
    en tu dulce mirada
    y en el vapor fragante
    de las aristas
    de tu dorado trigal,
    no pude percibir
    que  la puerta se abrió
    con un resuello de extramuros
    entremezclándose  el acónito
    de esas flores azules
    más que amarillas,
    asediándome,
    sin que pudiera evitar
    convertirme
    en una niña decrépita.   
    Por suerte
    tu valiente actitud
    entre rosas y violetas
    permitió salvarme
    de tan horrible pócima.
                                                 
    Malania
    Imagen de la red.
  • Relatos

    AYER Y HOY

    Precisaba caminar para purificar el aire de mis pulmones y los pensamientos de mi mente.
    Quería recuperar la sonrisa para maquillar con ella mi rostro palidecido por el tiempo.
    Recordé aquellas flores que me regaló y que con el pasar de los días se fueron marchitando. No las quería tirar pero tampoco quería guardarlas mustias y ya sin perfume. Entonces me regaló una planta y cuando se fue de este mundo ella también se murió.
    El aire del amanecer y los primeros rayos del sol son mágicos e inigualables para recuperar la energía y devolver la sonrisa hasta al más triste ser humano.
    Hoy gracias a Dios, al Universo y a toda la gente que me rodea, olvidé la tristeza de las flores secas y la planta muerta. Pero de él me quedan los más bellos recuerdos, con nostalgia pero con una sonrisa de los hermosos momentos que nos hemos regalado.
    Hoy lo puedo ver en aquella palmera parada en medio del sendero que recorro, y sentirlo en el perfume de las flores, en las hojas verdes de los árboles o en la tierra mojada después de una fresca lluvia.

    Malania

    Imagen: propia.

  • General

    CAMINOS Y ENCRUCIJADAS

    Vamos andando por la vida donde nos encontramos con días que fluyen como agua de río calmo. Pero de pronto es posible que nos encontremos con encrucijadas donde sí o sí hay que optar por un camino o por otro. Con seguridad escogemos el que creemos que es el mejor pero no siempre resulta serlo.

    Nos gusta escuchar que nos digan que nos aman pero muchas veces nos cuesta expresarlo con palabras.
    Con agrado y hasta con una sonrisa contemplamos los nuevos brotes de las plantas y las flores del jardín. Pero nos cuesta mantenerlas. A veces nos lamentamos cuando se nos seca una planta sin saber el motivo, o cuando se nos muere una mascota por más que le hemos dado todos los cuidados necesarios.
    Aunque nos cueste siempre tratamos de hacer lo mejor que podemos y como mejor sabemos hacerlo. Pero muchas veces eso no es suficiente y entonces nos preguntamos: ¿habré hecho lo correcto?

    Malania

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    MARIPOSA SENCILLA

    Sin esfuerzo aletea,
    sobre el follaje florecido
    de lantanas, zinnias,
    claveles, lavandas  
    y campanillas amarillas,
    una mariposa resplandeciente
    de alas transparentes.
    La brisa perfumada  
    contrasta en la tarde
    con las nubes neblinosas
    de polen pigmentado
    que las abejas han dejado  
    como queriendo arrasar
    con todo lo más rico y provechoso
    de las flores, a pleno sol
    en horas de mediodía..  

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    TRIGAL DE AMOR

    En el plancton de altamar
    nada una saeta,
    justo detrás
    de un frondoso trigal.
    Dichosa saeta
    que puede flotar
    con libre albedrío
    detrás del trigal.
    Su destino era otro
    un sitio infranqueable
    de amor imposible.
    Él y ella separados
    por un eco desvanecido
    de palabras sin sonido
    con sentimiento de misterio
    en el que estaban inmersos.
    Aun así, nunca sintieron
    que habían perdido las noches,
    algunas con lágrimas
    separados por lo imposible.
    El trigal era el refugio
    con senderos interiores
    con espigas como flores
    de aromas incomparables.

    Imagen: Mila G.

  • General

    NUBES DE HUMO

    Sintió cómo el orgullo humano,
    se proclamaba
    entre las nubes de la envidia,
    provocando sentimientos encontrados,
    como si fueran imanes de un mismo polo.
    Desaparecieron con el viento
    las notas musicales
    y la tristeza se expandió
    sobre las olas
    de un océano de aguas turbulentas.
    Ya no percibió el perfume de flores
    solamente vio un grimorio
    molesto y lastimero.
    No importa la apariencia
    sino la profundidad del hecho,
    para suscitar sentimientos encontrados
    como vectores opuestos.

    Imagen propia

  • General

    TRAS EL VENDAVAL

    Los tulipanes renacieron
    entre los cilicios de la duda
    y la llovizna de las primeras luces.
    Se miró al espejo
    y detestó su propia imagen.
    La vida se volvió áspera
    mientras en el jardín
    la copiosa lluvia y vendaval
    secuestraron  pétalos y hojas nuevas.
    La rosa y otras flores asustadas
    volvieron a cerrarse en pimpollo.
    Pero el sol no tardó en brillar
    y las nubes gozaron airosas
    del aroma de las caléndulas.
    Su mirada se volvió diáfana
    ante la rosa florecida
    con sus pétalos abiertos.
    Imagen: R. E. Ch.
                                             Malania
  • General

    COLIBRÍ MÁGICO

    En una adormilada biblioteca,
    un joven estudiante,
    enfrascado
    en las páginas de un libro,
    se estremeció,
    cuando de pronto, rompió
    con estrépito,
    el silencio,
    un colibrí
    en aparente delirio.
    Era un colibrí mágico,
    que vagaba
    día y noche por el aire,
    visitando casas
    y otros lugares
    donde hubiera luz
    y flores en un jarrón.
    El joven sintió gran asombro
    y pensó que estaba
    en presencia de ciertas intrusiones
    y ciertas ignorancias.
    Pero luego se dio cuenta
    que era algo excepcional.
    Un fenómeno natural.

    Imagen: R. E. Ch.