ELÍPTICO ECLIPSE
Un eclipse arrepentido se levantó contra el cielocuando la granizada golpeó los vidrios del portezuelo,con ventanas entreabiertas a la hora de la siestadesnivelando los quicios, sembrando el pánico,haciéndolos sentir que estaban vivos,rompiendo el silencio con estrépito truenoy con el impulso de su obtuso aliento.Ni un designio de su voluntad que apareciera impresose veía en letras grandes con la gloria de otros tiemposy sin encontrar sosiegohasta los pájaros en las jaulas, estaban muertos de miedo.Todo era complejo, aunque estaba completoen los espejuelos de la mesa donde el hombre estaba tenso,entre las flores de su propio huertoque en jarrones perfumaban la casa y todo su cuerpo,allí permaneció perplejo.Arengas repetidas tan presentes en su vidaa merced de sus sueños ahogadosen un amanecer solitario y lento,mientras su insomnio pastoreaba madrugadasy en vientos de luna llena sentía el paso del tiempo,dejando huellas descalzas con las palmas de sus manosestampadas en paredes enmohecidas en noches sonámbulas.Preso del tumulto exterior lleno de espanto,por todas partes los vestigios olvidados que el viento se iba llevando,con lluvias de hojas secas que acababan en el último peldañode una escalera de fieltro bajo la cual se guardabanlos únicos platos de antaño.Todo era culpa de aquel eclipse, decía ella para consolarlo,y él tirado como un mújol azul plateadoen una casa de náufragos con puro olor a quemado,se abatía en el remanso de la decrepitudcon alpargatas de desahuciado.MalaniaImagenes de la red.DESEO LATENTE
Si pudiera ser ellapara contemplarte en la nocheo en horas de siestapara peinar tus cabellosreflejar tu miraday aliviar tus angustiasdecirte que eres únicoque cada línea de tiempono marca vejezsolo traza huellaque indica experiencia.Si pudiera ser ellala que advierte tormentasy alerta ante la lluviapara que no te haga dañoy puedas descansar ocultoen tu lecho al vientobajo nubes grisestras campos desiertosllenos de silencios.Quisiera ser ellala poderosa lunadel brillo de tus ojos, espejode tu sonrisa el reflejo,porque tú has sidoy sigues siendo mi sol.Malania
Imagen: Lua T.
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DE SERENATA
En vuelos madrugadoreso a media mañana,sin cumplir un horario fijo,luego de recorrercualquier ventana,la tuya o la mía,vierte al aireen notas sincopadascomo un clangortaladrando los oídos,interfiriendo en muchos casosel feliz descansodel hombre agotadoque duerme desvanecido.Es que nadie enseñó al avey por ende no distinguela luz naturalsi es del sol o de la luna,tampoco si es de velalámpara de tulipáno con forma de tuna.Y cantaal amanecero a media mañanafeliz está al cantaren vuelo a cualquier ventanal,a fin de serenatearporque él sabe que al final
su visita nos alegrará.MalaniaImagen: C. B.¿MÁGICO?
Como gotas de estrellas y luna llenacon perfume a rocío la brisa plenami amanecer se iluminócon la alegría de tus palabrasesas que una noche arrebatóel viento en luna nuevaescondiéndolas en sus bolsillosarrancándome suspiroscolor nostalgia de Nochebuena.MalaniaImagen: J. A. T.COMIENZA EL DÍA
Sillas vacías.
Sin tazas, sin cucharas
mesas vacías.
Los anteojos
reflejan la claridad
de un sol por salir.
Ya llega el café
humeante y espumoso
con medialunas.
Comienza el día
el de hoy será agitado
tarde o temprano.Malania
Imagen: M. J. T.
UN POSTE SIN LUZ
Casas y árboles
pintan la noche
de un ocaso postergado
por nubes multicolores.
Un poste sostiene una lámpara
no se enciende, está confundida
no sabe si es de noche o es de día.
O quizás es cómplice de parejas
que se besan a escondidas.
Se encenderá a media noche
cuando se duerma la luna
y se adormezcan las nubes.Malania
Imagen: LUA T.
TESTIGO DE LOS SECRETOS
El sol fulguraba orgulloso
al otro lado del planeta
bronceando pieles de veraneantes
provistos de ropas ligeras.
Ciento ochenta grados
eran suficientes para volar
y encontrar otro paisaje natural.
Al norte se agazapaba una arboleda
de otoñales hojas y flores marchitadas
por heladas invernales
y el pasto sobrevivía a la sequía.
Caprichoso el tiempo navegaba
por el inmenso mar del designio.
Despierto él
debatiéndose con un permanente insomnio
sin conseguir el placentero sueño.
Despierta ella
aspirando el aroma de la noche
aroma de la soledad
de los interrogantes y de los espacios vacíos.
Solo el olor del ayer los regocijaba
con sus entrañables recuerdos.
mientras la insolente luna llena
por los ventanales se filtraba
única testigo de los secretos
de esos inmersos espacios vacíos.
Malania
Imagen propia
AGUJEROS
Las mañanas sin tu saludose vuelven sordasno transmiten nadani el eco de mis aventuradas palabras.Es como pasar de la luz del sola la sombra fría de la lunaes como ir y venir entre negras rocascon hierba crecida y agujereadapor los escarabajos que pululano las orugas que se escondenentre las hojas marchitas y oscuras.Así vive mi alma en un túnel de dolorsin tus respuestas que alienten alguna razónpara dar sentido a volver algún díay poder ver el generoso soldesparramando su dorada calidezsobre las montañas de tu vida y la mía.Malania
Imagen propiaLA INTRUSA
Era una gata triste que caminaba por los tejados y dormía bajo la luz de la luna con un gato vestido de azabache y sol. Él la llamaba con maullidos alegres y ella se sentía feliz. Una de esas noches blancas sin luna él no asistió a la cita. Ella deambuló sola por las calles del barrio hasta que encontró un lugar para dar a luz a dos hermosos gatitos.
Las dos gatas de la vivienda la recibieron sin mimos, indiferentes, como si fuera algo natural permitir la entrada a una intrusa, que llegó para tener a sus crías en el altillo de la casa.
Un día de lluvia apareció el gato azabache ojos de sol y se la llevó junto a los gatitos. A los pocos días, un ruiseñor anunció la visita con su canto. Ella volvió como si esa fuera la casa que tuvo siempre, pero no como visita, vino a quedarse. Temerosa, se acerca a comer y a tomar agua. No pide mimos ni ronronea como las otras dos. Pero se la ve bien, al menos tiene techo y comida. De sus hijos no se supo nada más.Malania
Imagen: M. J. T.
NADA FÁCIL
Cuesta ascender por la cuestapara llegar a la cima del olvidoporqueaunque quisiera no recordarno se puededejar todo atrássin pensaren los hermosos momentos vividos
bajo la misma luna.
MalaniaImagen: G. de Comodoro