• General

    REFULGENTE

    Resplandece,
    ilumina,
    encandila.
    Es el rey de la naturaleza.
    Sin él no tendríamos
    ni luz, ni calor,
    no podríamos sentir
    el aroma de una flor.
    No pide permiso
    y traspasa fronteras
    se baña en el mar
    y en el río penetra.
    Refulge
    por entre las ramas,
    acariciando hojas
    se pasea.
    Y aunque las nubes
    estén opacas,
    ilumina el aire
    y las aceras.

    Imagen: M. J. T.

  • General

    LA ROSA AMARILLA

    En el aire flota
    un sentimiento
    transitando
    los bordes aromáticos
    de una flor amarilla
    con pétalos matizados
    por el sol y la tierra.
    Con su belleza
    decorativa
    aterciopelada
    más que traviesa
    muestra el arte
    de la naturaleza.
    No existe espejismo
    es verdadera vida.
    El sol la engalana
    la perfuma
    la ilumina
    y le da color.

    Imagen: N. V. S.

  • General

    ATARDECER DE FUEGO

    Allí donde la vida levanta muros
    la inteligencia abre una salida.
    Posa la naturaleza para el poeta
    como la dama para el pintor.
    Como en un soplo de fuego
    el sol se va despidiendo de un día más.
    Después la claridad se vuelve un suspiro
    vacía de pensamientos.
    El espacio busca la noche
    para el descanso de laboriosas manos.
    En el aire flotan nubes
    que de azules se vuelven grises
    para convertirse en negras invisibles
    mezclándose con la briza fría
    de un silencio cristalino y picaresco.

    Imagen: Propia

  • General

    MERECEDOR

    Regalo de la vida,
    refugiarse en el perfume de las flores
    y en el seno de la naturaleza pura,
    para hacer de nuestro baile imperfecto
    el más hermoso,
    al compás de la música de los pájaros,
    poder  montar a caballo despierto o dormidos,
    soñar juntos piel a piel
    y deleitarnos con la savia
    y miel de nuestra intimidad.

    Imagen: M.J.T.

  • General

    BUENA RUTINA

     
    A través del tiempo pude darme cuenta que las mejores postales que nos ofrece la naturaleza son efímeras. Además, no se da nunca una igual a otra. Son espectáculos, que quienes los apreciamos, nos sorprendemos de ellos y si no aprovechamos el momento justo, nos lo perdemos para siempre.
    Esto ya lo he dicho en otra ocasión. Pero la de hoy, en mi recorrido de las 7 de la mañana, fue particular porque estuvo presente un fenómeno natural poco visto en esta zona, la neblina. Más de una hora percibiendo aromas diferentes. Cubiertos de rocío el césped, las plantas, las flores y los frutos. El pasto recién cortado, otros altos me llegan hasta los tobillos. La lluvia arrastró tierra suelta que encontró al paso, por cauces de arroyitos inventados por el abundante caudal de agua caída. La tierra no pidió permiso y se depositó en senderos de cemento aptos para las caminatas en el bulevar de la avenida. Hay que esquivar el barro para no resbalar y es ahí donde mis pies aplastan el pasto humedeciendo mis zapatillas grises. La altura mediana de los árboles de ese tramo, ofrecen el perfume de las flores silvestres. Una vez que cambio el rumbo y enfilo mi regreso a casa, otro es el espectáculo. Las guayabas y su alfombra, quedaron atrás, así como las paltas, los mangos, y otras frutas de estación. Ahora tengo que esquivar las espinas de los rosales que sobresalen de las verjas. Muy orondas se mecen al compás del viento perfumando las veredas con sus ramilletes blancos, rosados y lilas. Los que más abundan son los blancos que tienen un aroma inigualable. No son iguales a las rosas que venden en las florerías que parecen de plástico. Estas son nacidas en tierra fértil y se bañan de rocío al alba y al ocaso, o en noches calmas, casi en todas las estaciones del año. Quizás por eso conservan el perfume original a rosas frescas.
    A todo esto, tengo que sumar el canto de los pájaros: mirlos, gorriones, loros, algún extraviado zorzal y el papagayo de mi vecina que me saluda al pasar. Si no lo saludo me silba y se pega una carcajada.  
    Vuelvo a casa renovada después del incomparable espectáculo natural. Una buena rutina.

                                                                                                                                 

    Rosa Roja de N. V. S.
  • General

    INTERROGANTES Y RESPUESTAS

    Segunda presentación.

    Por Marina Collado Prieto y Malania Nashki (Elsa)

    ¿Dónde pervive la historia de lo eterno imborrable?
    Pervive en nuestro subconsciente. Pero también en nuestras venas con el correr de la sangre.  

     ¿Dónde nace el odio que tanto hiere? 
    Nace en el NO, en la negación de algo que se pretende y no se consigue. En la negatividad general contrapuesta a lo positivo de la vida. En el resentimiento por algo no cumplido.

    ¿En qué lugar del ser los misterios del alma se desvelan? 
    Pueden desvelarse en el corazón, en la mirada, en los gestos.

    ¿Dónde comienza la razón que a la locura da sentido?
    En el amor.

    ¿De dónde procede la voz que en sueños mi nombre invoca? Del alma de algún ser querido.

     ¿A quién se dirige la canción que compuso el corazón con acordes del alma?
    A otro corazón querido y amado.

     ¿Quién es el portador de los mensajes indescifrable?
    Un pájaro, una mariposa, el sol, la luna, el mar y tantos otros de la naturaleza, pero sobre todas las cosas, un ser humano que permanece en silencio.

     ¿Quién velará mi sueño cuando la noche eterna me alcance?
    Tu mismo ángel.

     ¿Dónde nacen las sonrisas que se esconden tras las lágrimas? 
    En el corazón.

    ¿De qué color son los besos que se cruzan las miradas? 
    Pueden ser blancos inmaculados o rojos carmín pero siempre transparentes.

    ¿A Qué sabe la distancia cuando las almas se buscan y se aman en silencio?
    La distancia siempre sabe a nostalgia.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    INVITACIÓN NATURAL

     

    Música de trenes 
    fugitivos de las albas, 
    de truenos que hacían estragos, 
    de diluvios teñidos de malva,  
    dejaban desolación 
    en un  corredor tenebroso 
    entre hilos de telarañas.
    Cuando despuntó nuevamente el sol 
    se encendieron de rosa los almendros, 
    violetas silvestres rodearon el prado 
    y el amarillo de lapachos encolumnados 
    se rodeó del respirar 
    y del canto de estridentes pájaros 
    dejando atrás 
    el callejón de miserias de ácaros
    inmerso en las perpetuas y tristes neblinas. 
    El sol con sus poderes intactos 
    hoy invita a visitar estos lugares 
    incluyendo 
    un silencioso paseo por el lago 
    para gozar de la naturaleza 
    con su perfecta y atractiva belleza.
     
    Imagen: propia
                                                   
     
  • General

    AÚN DESPIERTO

    Trémulo y prosaico,
    excitado
    por la fragancia de la naturaleza,
    inmerso en el bosque
    de sus más desdichados sueños,
    solitario y cegado
    por las censuras injustas,
    pretende armonizar su espíritu
    descansando su cuerpo
    bajo la cortina de un durmiente,
    recibiendo caricias
    y latigazos de lluvia
    en su último velo de sueño,
    mientras xenón lo envuelve
    invitándolo a seguir
    encendiendo el fuego.
    Imagen: S. D. V.
                                                          
  • General,  Poemas

    DETRÁS DE UN CERRO

    No recuerdo cuál fue el primer día
    que comencé a observar la luna y las estrellas.
    Creo que nace ese poder de contemplación
    cuando el amor se manifiesta y corre por nuestras venas,
    entonces surge la necesidad de ir
    más allá de nuestro alrededor,
    de buscar nuevos horizontes
    y así encontrarnos con la fuente de inspiración,
    muy poderosa por cierto, la luz de la luna,
    que si bien no es suya propia,
    sabe reflejar muy bien al astro rey de la naturaleza,
    obra de la creación del universo.

    Es por eso que sufro cuando veo y siento que:
    Se ha anestesiado el poeta
    se han vuelto mudos sus versos
    sus palabras se han ahogado
    en aguas del manso río
    detrás de algún cerro.

    Y es por eso que le digo:
    Sé como el pájaro, vuela.
    Que la tormenta no detenga tu soñar.
    No pierdas el tiempo en rencores
    o en nostalgias por cosas no realizadas.
    Sé un triunfador ante todos
    vístete de sonrisas
    construye tus días con alegría
    y pinta al viento
    con tus versos en melodías.
    Recuerda que eres poeta en esencia
    y ríndele homenaje en emotiva memoria
    a aquel día cuando has escrito
    tu primer poema de amor.
    No dejes que nada ni nadie
    te quite el poder de reflejar tus deseos
    en el canto alegre de un zorzal.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    POR EL SENDERO

    Cantaba sin oírse y sin que nadie lo oyera,
    llenando las horas vacías de la calma;
    regaba el lecho de misteriosas piedras,
    un arroyo profundo de aguas pálidas.
    Se despojaba de los rumores de almas
    esperando la lluvia para limpiar estrellas,
    que reflejadas en el  crepúsculo cálido
    gozaban en laberinto agudo de sus breñas.
    El sol improvisaba una sonrisa fresca,
    besando con sus rayos lianas y rosaledas,
    crespones oscuros y hojas pintorescas,
    en un amanecer fragante de la naturaleza.
    Mientras camino por orillados senderos,
    pienso en ti y en tu sonrisa bella.