• General

    CONTEMPLATIVA

    Posa en vigilia
    con susceptible expresión
    nada indiferente
    aferrada a la ventana
    vaya uno a saber con qué pensamiento.
    En evidente día ventoso
    se disipa el sol
    y la lluvia dibuja sobre el cristal
    pálidas estrellas y salpicados corazones,  
    describiendo sentimientos
    con matices de fondo ondeado
    de una tela pálida
    sobre el techo de hojalata.

    Imagen: M. J. T.

  • General

    LA ROSA AMARILLA

    En el aire flota
    un sentimiento
    transitando
    los bordes aromáticos
    de una flor amarilla
    con pétalos matizados
    por el sol y la tierra.
    Con su belleza
    decorativa
    aterciopelada
    más que traviesa
    muestra el arte
    de la naturaleza.
    No existe espejismo
    es verdadera vida.
    El sol la engalana
    la perfuma
    la ilumina
    y le da color.

    Imagen: N. V. S.

  • General

    ATARDECER DE FUEGO

    Allí donde la vida levanta muros
    la inteligencia abre una salida.
    Posa la naturaleza para el poeta
    como la dama para el pintor.
    Como en un soplo de fuego
    el sol se va despidiendo de un día más.
    Después la claridad se vuelve un suspiro
    vacía de pensamientos.
    El espacio busca la noche
    para el descanso de laboriosas manos.
    En el aire flotan nubes
    que de azules se vuelven grises
    para convertirse en negras invisibles
    mezclándose con la briza fría
    de un silencio cristalino y picaresco.

    Imagen: Propia

  • General

    RUGE EL VIENTO Y BRAMA EL MAR

    En composición íntima y personal
    con sorprendentes colores sombríos
    aflora detrás de una sonrisa fingida
    la frescura estival
    después de una agobiante jornada.
    Es hermoso contemplar
    la calma del mar en el cielo despejado.
    Pero cuando el sol brilla y quema
    sobre un mar embravecido por las olas
    y el viento frío se despliega
    congelando hasta los tuétanos,
    todos aquellos que todavía
    tienen fuerzas de desear y querer estar,
    continúan tendidos en la playa
    mientras los demás disparan
    y se protegen bajo los aleros y las paredes
    de los edificios y las casas.



    Imágenes propias

  • General

    INCANDESCENCIA

    Caminaba por la sombra,
    esquivando la acera del sol.
    No quería que fuera cierto
    lo que sabía era verdad.
    No terminaba de entender
    lo que sería su vida sin él
    porque a su lado se sentía feliz.
    Con sus ojos trémulos la mirada perdida
    en la fosforescencia del horizonte,
    caminaba y respiraba sin prisa
    como para aplacar su pálido semblante.
    La hizo tan pero tan feliz
    cuando provocaba en ella
    que se encendieran y brotaran
    los capullos de su blanco  pecho.
    Horas felices sazonadas
    con cálido sudor malva
    en incandescentes mañanas madrugadas
    o atardeceres en mediodía.
    Ella deseaba que se quedara
    no quería que el momento acabara
    en ese silencio interior
    que se rompía con un ¡¡¡Ah!!!…
    prolongando atardeceres efímeros
    de un amor sin porvenir.
    Pero el presente era tan grandioso
    cuántas veces!…
    al sentir el escalofrío de las brasas atónitas
    en sus pupilas y todo su cuerpo
    cuando en la sombra apenas iluminada
    percibía en su lecho
    la inconfundible fragancia de su amado hombre.
    Imagen propia.
  • General

    RESCATE DE AMOR

     
    El ojal y su botón
    salieron a caminar
    por la playa, por el mar
    muy juntitos a la par.
    De pronto un bío ladrón
    se arrebató al botón y
    el ojal quedó llorando
    la pérdida de su amor.
    “Qué haré yo sin ti botón”
    preguntó sollozando;
    lo buscó meses, días
    tal vez un par de años.
    Perdió memoria del tiempo
    hasta que al fin lo encontró
    calladito en una percha;
    alguien allí lo dejó
    triste, olvidado, sediento
    lleno de polvo el botón.
    Malévolo aquel ladrón
    ¿Qué te ha hecho mi señor?
    Entusiasmado el ojal
    muy pronto lo rescató
    y volvieron a pasear.
    A su casa lo llevó,
    ducha y vapor los cubrió,
    con su calor  lo envolvió
    para no perderlo más
    y en su cálido aposento
    disfrutaron el amor. 
     
    Imagen de la red

  • General

    VENUS

    Diosa del amor,
    enojada con su corazón
    cambió su objetivo y escribió:
    Lejos me iré al caer la tarde
    allá donde el ocaso
    coteja al sol para detenerlo
    donde la primera estrella
    luce hasta el amanecer.
    Lucero del alba
    que siempre está presente
    y no hay nube flotando
    que la oculte
    o la vuelva opaca.
    Es Shu,  Zorya 
    Aurvandil  o Fagua 
    viviente en mitología
    egipcia o eslava
    nórdica o muisca
    como dios, semidios
    o mensajero celestial
    estrella del alba
    o estrella del amanecer
    de otras creencias.
    Stella Maris o estrella del mar
    en la teología católica
     o elfa  Arwen o Undómiel
    de la escritura  sindarin
    mitología escandinava.
    Con tantos nombres
    un viento interior
    vertiginoso la envolvió
    y adormecida en el aire
    por su vida temió.
    Una mano amiga se acercó
    Orión, el Cazador
    en su constelación la refugió
    emocionada su desventura lloró
    pero su elfo la buscó
    y al encontrarla la rescató
    la retornó a su origen
    y nunca más la abandonó.
    Imagen: S. D. V.
  • General

    PARA TI

    Allá está ella,
    navegando
    hacia la luz de la luna
    en busca de su mirada
    bajo el sol sin bruma.
    Allá está ella,
    pronta a desembarcar
    con ansia primaveral
    encontrarlo y estrecharlo
    en abrazo sin igual.
    Allá está ella,
    con mimos acumulados
    sin papel ni seda
    sin capas y sin murallas
    a él serán regalados.

    Imagen propia

  • Poemas

    LUNA

     
    La luna se balancea
    sobre nubes de algodón
    con su vestido de seda
    bordado en oro del sol
    Nubes  blancas y celestes
    y también de otro color
    navegan muy despacito
    atrayendo admiración
    Se duerme la luna blanca
    en cuna de tornasol
    perfumada con narcisos
    siempreviva y girasol
    Despierta la luna llena
    con el canto del gorrión
    de zorzales y calandrias
    se esconde tras el calor
    En pareos satinados
    ella envuelve su candor
    de violetas matizados
    y pétalos de vapor.

    Imagen: J. A. T.

  • Poemas

    TÚ, MI SOL

     
    Silencioso y tímido sol,
    en amanecer perezoso
    entretenido jugaba
    con las nubes de Mahón.
    Desplegó sus rayos
    en nácar vibrante
    las tiñó de violeta
    gris y amarillo
    otras rosas y naranja
    las decoró con su brillo.
    Escogió a una de ellas
    se introdujo suavemente
    recorriendo sus espacios
    más íntimos  dulcemente.
    La cubrió con su calor
    y con arrullo de besos
    la contuvo con abrazos
    la sedujo con amor.
    El cielo cubierto de gris
    se volvió en lágrimas grises
    el sol junto a su nube
    descansó placentero
    muy airoso en su escondite.
     
    Imagen propia.