ERES
¿Acaso eres?…
Esa hoja que se desprendió del árbol,
y flota en el océano,
como si fuera una pequeña nave
que navega hacia el amor,
portando sobre ella
múltiples caricias? …
¿Llegarás algún día?…
Para entregármelas,
para hacerme sentir
que vivo todavía?…
El tiempo vuela,
a través del viento,
la distancia y el amor.
Pero mi precioso y caro pasar del tiempo,
quiero dedicártelo a vos.Malania
Imagen: Propia
DESPERTAR EN LA NOCHE
Palabras que acarician mi alma.
Silencios que traen recuerdos,
de un pasado que no existió.
De un amor que está presente,
como olas de mar en calma.
Amor…
En el tiempo, en la distancia.
En estrellas del amanecer
que no restan su importancia.
En el arco iris de paisajes
que van al vuelo. Estás ahí,
como caricia de terciopelo.
Palabras a cielo abierto
desencadenadas de una tormenta.
Pasa la noche,
no es todo sueño.
Palabras con rayos de sol,
latidos del corazón, aumentan.
Un ¡Te quiero!, corre hacia el viento,
la nube blanca es amuleto.
¡Te espero!, grito en silencio.
¡Te amo!, queda en suspenso…Malania
Imagen: Rox E. S.
NO LO ABANDONES
El sol se apodera del entrelazado asfalto que une mi casa con la tuya, con la de ella, con la de él.
A mediodía quema los pies descalzos de las mascotas perdidas.
Ya no les quedan sueños solo lamentos de un caminar sin fin.
Buscan comida entre las bolsas de residuo que los vecinos dejan en los canastos.
Pedazos de pan, restos de carne en huesos del asado del domingo, o del puchero de cualquier mediodía.
Entre rejas miran hacia adentro para ver si algún alma solidaria le tira un poco de comida fresca.
Con pena se alejan buscando la sombra de algún árbol y un poco de agua que algunos buenos vecinos dejan a propósito para que ellos sacien su sed.
Otras veces se alegran moviendo la cola en agradecimiento por la comida fresca que alguien les ofrece. Pero no se quedan, siguen su camino entre muros de cemento y agrios silencios.
Es la rutina de perros (no tanto de gatos), que luchan por subsistir.
Han nacido en algún lugar, alguien los habrá criado desde pequeños, o quizás desde temprana edad, han sido abandonados por los que fueron sus dueños. Los dejaron en un yuyal, en un descampado, o en algún lugar soleado y con asfalto caliente. Quién sabe. Nunca han tenido ni siquiera una caja de cartón con un pedazo de trapo viejo donde poder dormir los días de invierno. Ni un oso de peluche para jugar como muchos perros tienen. Han nacido y crecido en una cuna de lamentos: “no te quiero”, “no tengo tiempo para cuidarte”, “no tengo comida para darte, el presupuesto no alcanza”. O lo que es peor: “no te me acerques”, “sal de aquí, hueles mal”, y tantas otros pretextos para no aceptar a estas “criaturas” o animales, como mejor te quede llamarlos. No saben hablar, no saben pedir ni quejarse, se comunican con su mirada cuando están tristes o enfermos, o cuando necesitan algo, y con el batir de sus colas cuando están alegres.
Y en estos transitados trayectos les duele la vida, les quema el desánimo al caminar por el asfalto caliente en busca de comida y agua.
Si cada uno de nosotros se apiadara de ellos, al menos colocando recipientes con agua fresca, que podemos cambiar todos los días, y algún pedazo de pan o restos de comida fresca, no pasarían hambre ni sed. Ellos no tienen la culpa de haber nacido o de haber sido abandonados.Y si en tu barrio o ciudad no has encontrado a ninguna de estas mascotas callejeras, eres afortunado de que no te duela el alma por verlos sufrir.
Malania
Imagen: propia. Es de un perro que apareció en el lugar y le brindaron refugio.
SI PUDIERA
SI PUDIERA
Si pudiera regresar el tiempo
y brincar al compás del viento,
habitar al borde del mar
y del alba aspirar el aire fresco.
Si pudiera hoy tomar tus manos
acariciar tus suaves dedos,
caminar por frescos senderos
al ritmo joven de nuestros cuerpos.
Hoy todo sería distinto,
los susurros del amor serían más claros,
el eco de tus palabras resonaría eterno,
y en tus ojos vería el reflejo
de un “para siempre” compartido.
Pero el tiempo, como río, no vuelve,
y solo nos queda un hermoso recuerdo.Malania
Imagen: propia y de la red
Parque Centenario. Fotos Andres Perez Moreno / prensa Ambiente y Espacio Publico SENTADA SOLA
Te vi sola y lejana, sentada, guardabas silencio,
tu voz callada mientras el tiempo se iba.Te vi en tu tristeza, quise acercarme pero no pude,
dejé seguir el momento, no logré entender tu pena.No me animé a preguntar, tuve miedo a molestar,
el viento mecía suave tu cabello, parecía acariciarte.Sentada sola estabas, en mí las preguntas,
¿Por qué? sin respuestas, cómo saber qué te hiere.Te vi y nada pude hacer, cómo calmar tu dolor,
no puedo olvidar, tú llorabas, tan solo miré sin hacer nada.Sentada sola ahí en ese viejo banco de una plaza casi vacía,
me faltaron palabras para llevarte consuelo,
me fui también, llorando y no comprendí.Autor: Miguel Márquez
Imagen: Rubén E. Ch.
MISMAS HORAS, DISTINTOS TIEMPOS
Cómo saber sin hacer ¿?
es como vivir sin amar
He soltado hace ya tiempo
amarras de mi puerto.
Las estrellas de mis sueños me han guidado.
Como un niño voy descubriendo mi camino
dejándome llevar.
Atravesando incertidumbres cultivo mis certezas
y así las huellas voy dejando atrás.
Tan solo eso quedará…
Hacia adelante va mi vida.
Hay tierras que no he de volver a pisar.
Cerraré algunas puertas y otras tantas
se abrirán.
Aunque al día le pongan nombre
y en veinticuatro se divida,
lo que pasó, se fue
y lo que vendrá, no existe.Autor: Patricio Massa
Imagen de la redHOY TE BUSQUÉ
Hoy te busqué en vano,
fui hasta el fondo del mar,
recorrí montañas,
le pregunté a las estrellas
y a las coloridas nubes,
nadie te ha visto pasar.Te has recogido en silencio
tal vez para meditar,
o quizás corres al tiempo
desde la tierra al mar,
por campos y bosques
¿dónde estás?.Te busqué para besar
tu alma y tu corazón,
no te encontré,
pero igual lo hice,
desde este lejano rincón.Malania
Imagen: gentileza de Gerardo S. V.
TARDES DE DOMINGO
¿El mal tiempo nubla los recuerdos?
¿De quién? ¿De qué? ¿De cuándo?
Quizás nuble los suyos pero no los míos.
Las cosas son como tienen que ser
y lo que pasó, ya fue.
Lo recuerdo con una sonrisa en los labios,
con un corazón alegre por haberlo conocido.
O no. Y sonrío por no haber tenido la oportunidad
de continuar viéndolo,
porque a veces la trastienda no es buena.
Con lo que fue, fui feliz.
Y no es que tenga la mente adormecida,
la tengo lúcida como aquel primer día
que me acompañó al salir del café hasta la puerta de mi casa,
un edificio de departamentos de catorce pisos.
No hubo indecencias, no fue un mal tiempo.
Y es por eso que quedan hermosos recuerdos
sin llantos ni arrepentimientos.Malania
Imagen: Gentileza de Mariana
BRUMA Y MAR
Las incertidumbres navegan entre brumas y sombras,
en desconocidos tiempos, con desconocidas verdades.
Cuestionadas certezas se enredan en la espuma del mar.
Nos convencemos al ver una roca
plantada en el suelo sin poder moverse.
Hasta podemos tropezar con ella.
No cuestionamos su estado,
no nos preguntamos si es feliz,
si quiere estar ahí bajo el sol caliente
o bajo la helada de invierno.
Para nosotros es un ser inanimado.
¿Lo es?
¿Tendrá ilusiones el mar?
Su espuma quizás es una forma de expresar algo
pero no lo comprendemos.
La sabiduría del tiempo puede deshacer una ilusión.
Abrazamos luces que luego se convierten en sombras y desaparecen.
Cuestionamos muchas cosas, verdades y mentiras.
Pero al contemplar el mar vemos una sana realidad,
y encontramos la paz aunque sea por un momento o varios, permitiéndonos ver la vida de tal o cual manera, sin cuestionarnos el porqué.Malania
Imágenes propias
FUERON LAS NOCHES
Fueron las noches, fueron los días
que se llevaron un poco de ti un poco de mí,
de todos nosotros.Llevaron nuestras lágrimas, nuestras risas
y todas las ganas de andar por el mundo feliz.Fueron las noches llenas de magia
que hicieron soñar tanta ilusión, creando fantasía.Fueron las noches, fueron los días
donde bailamos con la soledad guardando recuerdos.El tiempo pasó, pasaron los años, los días,
pasaste tú sin olvidarme, sin olvidarte,
sin olvidarnos.Autor: Miguel Márquez
Imagen: Manu R.