• Poemas

    SENTADO

    Dedicado al adulto mayor

    Sentado dejando pasar el tiempo,
    mirando a lo lejos lo que se fue,
    lo que la vida dejo atrás.

    Sentado hablando con el olvido
    sin entender las respuestas que me sabe dar
    mientras sigo tan pensativo.

    Sentado dejando me acompañe la soledad
    con su silencio guardando algunos recuerdos.

    Sentado viendo el viento llevarse sueños,
    alejar esperanzas de aquello que ya no viene. 

    Sentado atrapando paz, vistiendo tranquilidad
    mientras los años viejos pintan mi cuerpo
    sin apagar mi satisfacción de sentirme alegre.

    Autor: Miguel Márquez

    Imagen de la red

  • Descripción,  Poesía

    VAQUITA DE SAN ANTONIO

    Mariquita, Vaquita de San Antonio o Catarina, son una familia de insectos coleópteros. Muchas especies se alimentan de pulgones por lo que contribuyen a controlar estas plagas. La mayoría son depredadores carnívoros que se alimentan de insectos como áfidos y cochinillas. Otras especies se alimentan de plantas y hongos.
    Las especies que depredan plagas agrícolas se consideran insectos beneficiosos.

    Quien sabe cuántos nombres más tiene ese animalito que es útil para el jardín y plantaciones varias.

    En el jardín, las vaquitas de San Antonio,
    con diferentes colores, marcan su territorio.
    Vuelan ligeras, como un susurro en el viento,
    brillan en el sol, dejando su encantamiento.

    Alegran los días con sus paso sinceros,
    pasean sobre hojas, un camino viajero.
    Entre risas y sombras, su espíritu juega,
    la vaquita de San Antonio, siempre despliega.

    En cada rincón, un destello de vida,
    en su vuelo ligero, la tristeza se olvida.
    Con colores vibrantes, su magia contagia,
    en el aire, en la tierra, ¡la alegría es su equipaje!

    Malania

    Imágenes: R. E. Ch. y de la red

    Imagen: Gentileza de Ricardo G.

  • Efemérides,  Poesía

    CONSEJO MATERNAL

    Hoy, tercer domingo de Octubre, se celebra en Argentina, como todos los años, el Día de la Madre y Día de la Familia.
    Esta poesía, cuyo autor es Olegario Víctor Andrade, la recité en uno de los actos escolares de primaria.
    No la olvido y creo que no la olvidaré jamás.

    “Ven para acá, me dijo dulcemente
    mi madre cierto día,
    (aún me parece que escucho en el ambiente
    de su voz la celeste melodía).

    Ven y dime qué causas tan extrañas
    te arrancan esa lágrima, hijo mío,
    que cuelga de tus trémulas pestañas
    como gota cuajada de rocío.

    Tú tienes una pena y me la ocultas:
    ¿no sabes que la madre más sencilla
    sabe leer en el alma de sus hijos
    como tú en la cartilla?

    ¿Quieres que te adivine lo que sientes?
    Ven para acá, pilluelo,
    que con un par de besos en la frente
    disiparé las nubes de tu cielo.

    Yo prorrumpí a llorar. Nada, le dije,
    las causa de mis lágrimas ignoro;
    pero de vez en cuando se me oprime
    el corazón, y ¡lloro!…

    Ella inclinó la frente pensativa,
    se turbó su pupila,
    y enjugando sus ojos y los míos,
    me dijo más tranquila:

    Llama siempre a tu madre cuando sufras
    que vendrá muerta o viva:
    si está en el mundo a compartir tus penas,
    y si no, a consolarte desde arriba.

    Y lo hago así cuando la suerte ruda
    como hoy perturba de mi hogar la calma,
    invoco el nombre de mi madre amada,
    ¡y entonces siento que se ensancha mi alma!”

    Texto e imagen de la red.

    Biografía:

    Olegario V. Andrade nació el 6 de marzo de 1839.  Aunque existen discrepancias sobre el lugar donde se produjo el mismo, el acta de su nacimiento  y otros datos coinciden en que nació en Alegrete, Departamento de Río Grande del Sur, Brasil.

    Falleció en Buenos Aires el 30 de octubre de 1882, a causa de un ataque cerebral. 
    Su sepelio fue una muestra del reconocimiento general a su obra.  Habló el presidente de ese momento, Julio A. Roca, y recitaron sus composiciones poéticas personalidades del mundo de las letras. 
    Sus restos se encuentran en el Cementerio de la Recoleta, y un busto suyo se halla en el Jardín de los Poetas de El Rosedal de Buenos Aires. 

  • Poemas

    RETOÑOS POR LA VIDA

    Lucha, pervive
    pero no desangres.
    Sé generoso,
    pero no, cautivo.
    Siente tu corazón,
    haz que fluya sangre
    pura, por tus venas.
    Entra en los algodones
    para descansar,
    entra en las azucenas
    para gozar.
    Si entras en los hospitales,
    sufrirás.
    No dejes que te talen.
    Lucha con tus brazos,
    con tus alas en vuelo,
    lucha con tus piernas.
    Conserva tus fuerzas,
    no te vuelvas reliquia.
    No dejes que te talen.
    Y si lo hacen,
    ¡retoña con más fuerzas!,
    ¡conserva tu vida!

    Malania

    Imágenes: Ricardo G. y Rubén E. Ch.

  • Poemas

    CUÁNTAS, CUÁNTAS VECES

    ¿Podré amarte sin verte,
    sin mirarte?
    en regiones contrarias,
    unidas tan solo
    por el inmenso océano:
    Tú, en mediodía quemante.
    Yo, en fresco amanecer,
    bajo las frías sábanas,
    me conforma recordarte.
    Te busco con afán,
    sin darme cuenta,
    entre las infinitas palabras.
    Estás frente a mí,
    me haces sonreír.
    Estás conmigo,
    alegras mi existir,
    a través del infinito.
    Mi vida se detiene,
    un instante,
    para mirarte,
    para conocerte,
    para venerarte,
    para saludarte ruborizada.
    ¿Por qué no?…
    Tu fuego, es mi fuego.
    Tu fuego, en mi hoguera.
    ¿La estarás amando?
    Pienso:
    ¿Acaso te siento…
    en el misterioso aroma
    de las flores sin perfume?

    Malania

    Imagen: Propia

  • Cuentos,  Relatos

    EL DINERO NO ES TODO

    Continuación de la Segunda Parte publicada el 06-10-2024

    Ya no me volveré a dormir por hoy, creo…

    Tercera Parte

    Debo también dejar escrito, continuó Rubén, cuál es mi situación actual, en este momento. Luego de haber llegado desde el país del Norte, en Enero del 2020, “escoltado” por dos agentes federales hasta Ezeiza, después de deportarme por una falsa acusación de haber dejado una carta con amenazas que nadie vio, sino por una denuncia de una persona que después pareció haber desaparecido misteriosamente, y de haberme tenido detenido ilegalmente -según normas internacionales, es lo que adujeron- por 3 años, he perdido todo lo que tengo de bienes materiales.
    Mi suerte es que, de mi vida anterior en Argentina, quedaron buenos amigos. Uno de ellos me ayudó a vivir con una mínima decencia, y no como yo suponía que iba a dormir en la calle, y comer de beneficencia. Luego me consiguió una casa donde vivir, y hasta aparecieron algunos dólares de los que guardaba antes de que me llevasen detenido a aquel país, que me dio la chance de elegir qué comer, así como pagar por una pieza, un baño, y un espacio para cocina, que ya estaban destinadas a la demolición. Es aquí adonde vivo hoy.
    Pero otro amigo, esta vez del exterior, con quien trabajé en aquel país, y también salió de allí con un derrame cerebral hacia su país de origen, Australia, se ofreció a ayudarme. Empiezo a salir de la miseria. Y con esto me alejaré de la gente miserable que puede herirme lo suficiente como para hacerme odiar, y entrar en el ordeñe de emociones de los diablos.
    Y sé que me quedan muchos más amigos. Muchos que me conocieron cuando no tenía ni idea de todo esto que me pasó. También algunos de mi familia que están en Tucumán y Salta, con quienes siempre nos hicimos bien, y eso se recuerda.
    Ya me queda poco tiempo en este estado. Aprendí qué es lo que está pasando, y eso me hará buscar una puerta hacia la libertad o, al menos, no descuidarme para caer de nuevo en la “granja de ordeñe de los diablos”.
    De cualquier manera, debo escribir esto también como catarsis sobre la vida que llevo hoy, y no caer nuevamente, especialmente en la debilidad de tratar de acumular dinero como única motivación. El tema dinero es lo que usan los arcontes (diablos) para corromper a las personas, hacerlos sufrir y odiar, y quitarles esos sentimientos que son su alimento. Me debo recordar la promesa de tener solamente el dinero necesario para vivir, con ahorros para 3 años de vida en forma extremadamente simple. Nada más. Y si entra más dinero que esto, donarlo rápidamente a las entidades que quiero y admiro (como mi querido colegio de Tucumán: el Instituto Técnico). Así me escaparé de cualquier tentación económica, y en consecuencia, a la posibilidad de caer en las manos de los ordeñadores de emociones.
    Hoy ya es otro día, para pensar, razonar, meditar, y decidir en cómo hacer para salir hacia la luz. En cómo alejarme o cómo abandonar el mundo de los “arcontes”. Si a veces alguna vaca se escapa del corral de los humanos y puede vivir una vida libre por un tiempo, lo mismo puedo intentar yo.
    A veces, y cada vez más, pienso que todo esto va a ser posible si me alejo de todas las partes donde se supone que me puedan encontrar. Esto deberá incluir algo de Argentina, todo ese país de Norteamérica que tanto me hizo sufrir, y también Europa, donde creo está el centro del mal, y que influencian en muchos otros lugares del mundo. Claro, eso es el centro del mal desde “nuestro lado” de la montaña o del Océano. Al otro lado seguramente están los habitantes de otros países como Rusia, China, India por nombrar algunos.  Los demonios no van a dejar de conquistar y alimentarse en ninguna parte del mundo. Pero quizás algún lugar con poca importancia para ellos sea una solución  para mí. Debo seguir intentando buscar ese lugar, y ver cómo llego. Creo que ya estoy entendiendo cómo funciona el sistema de los arcontes, o al menos eso es lo que creo.

    Malania

    Imagen: propia

  • Descripción,  Poesía

    CASAS DE COLORES

    Casas de colores como almas que alientan
    transmiten alegría, donde el amor se asienta,
    frente a la arena que acaricia los pies
    son refugio dorado donde nada es desdén.
    Sus muros esconden historias perdidas
    pintadas de sueños, lágrimas, risas y vida.

    El mar, un lienzo azul como el cielo infinito
    y entre ellos, alegres, las gaviotas danzan
    no dejan huellas, tampoco nada escrito.

    Las olas susurran secretos en la brisa
    mientras las parejas de la mano caminan.
    Juegan los niños, sus risas estallan
    con sueños que se mezclan sin alimañas.

    Malania

    Imagen: Gentileza Antonio M.

  • Prosa Poética

    LA LUNA VIENE ASOMANDO

    La luna viene dejando su magia mientras las aves buscan su nido,
    para echarse a descansar.

    El cielo guarda su azul, para dar lugar a la noche llena de encanto.

    La luna viene asomando para llenarnos de sueños,
    cargados de fantasía que traen mucha ilusión.

    La luna viene asomando, con ella toda su belleza que trae tanta esperanza.

    Brilla con elegancia que me es difícil poder olvidarla
    por eso, sentado la espero bajo este viejo árbol en el banco de siempre.

    Autor: Miguel Márquez

    Imagen: de la red

  • Cuentos,  Relatos

    EL DINERO NO ES TODO

    Continuación de la Primera parte publicada el día 29-09-2024……

    “No quiero volver a la pudrición de vivir sólo por el dinero”…

    Segunda parte

    No quiero pasar lo que pasé cuando estuve en Norte América, comentó Rubén. Necesito volver a la luz, a la verdad, volver a vivir como cualquier ser de luz (que no he vuelto a ser por casi 20 años).
    Entendí que me había sacado una capa de encima, -como si fuese una cebolla-.  Pero no tengo en claro cuántas capas más debo retirar de mi caparazón de tristezas para volver a ser lo que una vez creía que era, sin darme cuenta de en qué me estaba convirtiendo -con el paso del tiempo- que simplemente era en otra cosa que nunca quise ser, ni siquiera entendí por qué llegué aún muy confundido, a ciertas situaciones terribles de mi vida, sólo intentando que no me hagan más daño, y cuidando de no hacer daño a nadie. Toda una vida loca.
    Quizás, la lectura de ayer (sobre “Anatomía de un ataque Arcóntico” de Patrick Herbert) del sitio “Biblioteca Pléyades”, me acercó ciertos conceptos importantes para poder entender mejor la verdad de las cosas y “qué es lo que está pasando” en el mundo, realmente.
    Desde hace cierto tiempo, unos 12 a 15 años atrás, sentí como que algo o alguien definió que yo ya estaba “como maduro” para aprovechar mis sentimientos, y desde allí empezó una campaña de terror sobre mí, para cosechar/ordeñar mis sentimientos de miedo y angustia. Era una cosa que intentaba catalogar de loca, de que no podía ser, de que un Dios bueno (épocas que creía que un dios bueno nos cuidaba) no podía dejar hacer tales cosas con la gente que Él cuida, ni dejar que seres malvados tomen posesión de uno de “sus hijos”. Pensaba: “Si yo, a los cachorritos de mi perra de raza doberman, no los vendía a la gente que me parecía que no tenía amor por los perros (y eso que me darían buena cantidad de dinero por ellos), y se los regalaba a aquellos que no tenían dinero, pero los veía con tanto amor por los animales… ¿Cómo Dios no haría mucho más por mí?
    Después… vi que eso no pasaba.
    Que mis miedos y angustia eran cada vez más fuertes. Y no era sólo una sensación, sino que la vida, aun teniendo en ese tiempo buenos ingresos económicos, se me presentaba angustiante, terrible y esquiva. Finalmente terminó en lo que terminó en 2012.
    Al volver a Argentina pensé que era el designio de Dios. Que aquí Dios me cuidaría mejor, quizás. Que como aquel país del norte es el paraíso del mal, no debí haber pensado en ir allá, como lo había intentado siempre, desde adolescente. Que ahora, estando en mi país, adonde yo pertenecía, un dios bueno me cuidaría de nuevo. Pero me equivoqué una vez más. El juez que me tocó en el reclamo sobre mí por denuncias mentirosas hizo –porque no pude pagar una fianza de mucho dinero, que es lo que me pidió- lo necesario para que vuelva al infierno, donde me torturaron hasta que entendí que sólo los delincuentes salen libres. Acepté convertirme en falso delincuente, para que me soltaran, me liberaran del suplicio, y así poder volver a Argentina, mi país de origen.
    Para este momento, ya Dios no era ninguna entidad para mí. No queda nada de esas ideas. Con todo lo que me pasó, pienso que a este mundo lo controlan los demonios. Y que la única posibilidad de estar alejado de ellos es que no te identifiquen como una probable “vaca lechera” de emociones negativas. Yo perdí. Ya estoy catalogado. Todo ocurrió en aquel país, donde los sentimientos de envidia, angustia, y todo tipo de tensiones emocionales negativas son las reglas que manejan la vida de los habitantes. Por eso hay tantas muertes, tanta delincuencia. Por eso también hay tantas historias de gente que pasa de “millonario” a vagabundo, o “linyera”, y también al revés. Hay tantas almas dando vueltas con tantos sentimientos negativos para “colectar” que, a veces, los diablos  se olvidan de los anteriores, o bien les permiten volver a su vida para luego poder “ordeñarlos” de sentimientos negativos mucho mejores, más fuertes, después de haberles permitido tener esperanzas en una vida mejor. En eso caí yo. Pero siempre creo que todas las cosas tienen alguna salida, y tengo que encontrarla.
    Lo bueno es que ya sé que no hay un dios que nos cuide, o al menos a las almas como la mía, que ya cayó en manos de los demonios que controlan esta parte del universo donde estoy. Y también sé que estos entes tratarán de hacerme todo el daño posible –a través de cualquiera- para hacerme generar miedos, angustias, y todo tipo de sentimientos negativos de los que ellos se alimentan. Y finalmente sé que es probable que lo consigan, porque aún no estoy dispuesto a morirme y abandonar este sector del universo donde estoy puesto a prueba, pero, a la vez, estoy trabajando en evitar mi sentimiento de odio, que supongo es lo más delicioso para alguien que se alimenta del mal. Quizás pueda alejarles con mi voluntad de no hacer daño a nadie, ni pensar en ganar mucho dinero.
    Hoy el ataque de estos demonios viene a través del indio que vive en la misma propiedad que habito, en el departamento que está adelante del mío, de esta casa donde vivo mi miseria actual. Siendo una persona tan primitiva este indio (no creo que lea nada más fuera del Whatsafpp en su teléfono), entiendo que lo podrán manipular con facilidad. Y por eso hoy está atacándome con lo que puede. Ahora que lo entendí, voy a operar contra eso, tratándolo de la mejor forma posible, y no haciendo caso a las provocaciones de él. Será “uno fuera”.
    Ahora decido que vuelvo a mi vida. Estoy despierto. El sueño del amanecer ya pasó. Una vez más, pude esclarecer dónde está el mal, y lo que hace. Ya no me volveré a dormir por hoy, creo.

    Continuará el domingo 13 próximo.

    Malania

    Imagen: Propia y de la red

  • Poemas

    AMORES PERDIDOS

    Ni el mal tiempo la detiene,
    su alma bondadosa la sostiene.
    Pinta en su mágico lienzo
    la naturaleza viva,
    con amor inmenso.
    El cielo siempre claro,
    el sol por demás radiante,
    hojas y flores brillantes,
    alas abiertas que vuelan alto.
    Pinta versos de su vida
    en historias infinitas.
    Recuerdos de amores perdidos
    sin llanto, con una sonrisa.

    Malania
    Imagen propia y de la red