MALVA
La malva es una planta medicinal rica en compuestos fenólicos y flavonoides que sirve para aliviar la congestión nasal, combatir y prevenir infecciones, principalmente en la boca, y aliviar los síntomas de enfermedades en la piel.
Esta planta pertenece a la especie Malva sylvestris, conocida también como malva de campo, y posee propiedades antioxidantes, antimicrobianas y antiinflamatorias, siendo sus partes más utilizadas las flores y hojas, las cuales pueden ser usadas para preparar té, infusiones o cataplasma.
La malva puede ser comprada en las tiendas de productos naturales o farmacias, debiendo ser usada bajo la orientación de un médico u otro profesional de salud que tenga experiencia con el uso de plantas medicinales.Cómo usar la malva
Las partes normalmente utilizadas de la malva son tanto sus hojas como las flores, de las cuales son extraídas las sustancias activas con propiedades medicinales para preparar tés, infusiones o cataplasmas. Por eso, la forma de usar la malva puede variar de acuerdo con el objetivo de la persona.
1. Té de malva
El té de malva puede ser usado para ayudar en el tratamiento de problemas respiratorios, como tos, bronquitis, dolor de garganta, faringitis, laringitis, gastritis, úlceras en el estómago o estreñimiento, y otras afecciones de piel, por ejemplo.
Malania
Info e imágenes de la red
COMO GRANDES PECES
El espectáculo de las nubes en la amplitud del cielo, la belleza de sus colores y sus formas, lo deprisa que pasan sus imágenes cambiantes, me habla de la Creación, y me cambia el ánimo en un despertar madrugador luego de una noche mal dormida.
Esta vez son como grandes peces en un mar que ha sumergido a su antojo, extensos campos y árboles de pie, y se ha unido con el cielo en comunión horizontal.
Quizás la lluvia venidera y las ráfagas de vientos pronosticados por los expertos, rompan esas nubes en mil pedazos y luego el sol se encargue de secar el ambiente y devolver el aire apropiado, para que los árboles puedan albergar nidos de pájaros, dar sombra al acalorado campesino y puedan ser acariciados por la brisa de un amanecer normal, como en días primaverales.Malania
Imagen: M. J. T.
GOZO AL NATURAL
Pasan los años
y la vida se presenta
como un proceso de demolición.
De nada sirve
ser demasiado formal
y horriblemente previsible.
Queda un desafío
salir de lo trillado
dejando de lado
la agenda del tiempo.
Hoy mi ciudad y el campo
amanecieron de buen humor
contagiando los corazones
de los que madrugan
y gozan con ver salir el sol.
Acaece una fiesta
la de la primavera
en la que bailan
las hojas verdes
al compás del viento
mezcla de perfume
y de bellos colores
de las diferentes flores
que nos regala
la incomparable naturaleza.Malania
Imagen propia
PESADILLA O REALIDAD
Al atardecer, cuando la luz de las coloridas vidrieras se vuelve mate, desaparecen los colores, todo se vuelve gris y negruzco. Se callan las voces.
Las mentes se relajan y deambulan por el mundo sin ton ni son.
Algunas ciudades han quedado reducidas a escombros y cenizas.
Entre los habitantes que han podido huir no existe la euforia solo inquietud de que el mañana sea algo diferente a lo esperado, algo mejor.
Cuando todo parece estar calmo, acompañan al sol en su salida con la esperanza de poder bañarse en el río y secar las ropas aprovechando las bondades del astro rey. Se sumergen entre los camalotes mientras el sol también se cuela entre la abundante vegetación.
De pronto el cielo se encapota sobre los campos, son nubes grises de vapor que dejan los aviones adversarios.
Pero Dios no los abandona y sin esperar, la lluvia aparece entre truenos y rayos, lo que hace abandonar la misión de los homicidas. La espera por otro día de sol resulta pesada y sus pensamientos se desvían y evocan imágenes que prefieren olvidar. Aunque luego piensan que es mejor así antes que morir bajo las manos del enemigo.
La humedad se instala durante días, no deja de llover. El tiempo es nuboso. Se escucha como cae una llovizna desagradable en la calle y percibe cómo las hojas mustias se acumulan en la acera delante del gran galpón.
Pero alguien llamó a la puerta y apareció él.
Ella miró a través de los cristales mojados por la lluvia y comprobó que el cielo estaba despejado. El sol brillaba resplandeciente en las hojas de las plantas, como si fueran restos de fuegos artificiales de colores o restos de un arco iris.
Él fue como un rayo de sol al despertarla y levantar su ánimo decaído.Malania
Imagen: de la red.
DESPUÉS DE LA LLUVIA
A algunos, el tiempo lluvioso les abate los ánimos. Pero hoy pueden reír y dejar de quejarse porque el cielo se ha despejado y el sol se cuela entre la vegetación, cubriendo con sus rayos el sendero de tierra roja.
El olor a café se extiende por toda la casa, incluso hasta el portón de entrada, donde se mezcla con el aroma de tierra mojada que ha dejado la reciente lluvia.
El campo es como una isla en el océano, un lugar cálido y seguro en medio del mar tempestuoso.
El café para algunos y el mate para otros les cambia el estado de ánimo, charlan y ríen contando anécdotas, la vida vuelve a parecerles divertida y planifican el trabajo del día felices y contentos.
Los mosquitos, por la humedad acumulada danzan alrededor de mis tobillos desnudos y de mis brazos desprovistos de mangas, pero nadie se percata de ello. Entonces mojo mis manos y los voy atrapando uno a uno. Con las manos húmedas es más fácil.
Hace buen tiempo, brilla el sol y brillan las miradas con ánimo de seguir trabajando.
¿Qué importa los mosquitos? ¡A trabajar se ha dicho!Malania
Imagen: R. A. M.
DÍA DEL ANIMAL
29 DE ABRIL
Muchos son los animales que nos acompañan a diario en nuestros hogares,
otros ayudan en trabajos de campo, y la mayoría son útiles al ser humano de alguna manera.
Hoy es su día. Y voy a compartir una imagen de dos perros que jugaban al costado de una ruta
mientras el contingente humano disfrutaba de la vista de un hermoso paisaje.
Esta vez no nos pedían comida, y digo eso porque muchas veces hay animales sueltos que fueron abandonados por sus dueños por diversos motivos, para mí, injustificables, y andan revolviendo la basura en busca de algo para saciar su hambre.FELIZ DÍA DEL ANIMAL.
Malania
AMOR Y COMIDA
LA IMPORTANCIA DE APRENDER A COCINAR
Cuando terminé mi carrera de Profesora para la Enseñanza Primaria, (Maestra de Grado), comencé a trabajar al año siguiente. Era soltera y vivía con mis padres. Pero a los cuatro años, tuve que escoger y decidirme por alguna escuela lejos de mi casa si quería continuar trabajando. Los cargos se distribuían de acuerdo al Padrón de Valoración y una colega me desplazó. Un primo, hijo del hermano de mi madre, con voluntad incondicional, me acompañó a cada una de las escuelas que me habían ofrecido, fueron tres pero todas estaban en el campo. Como no tenía vehículo lo único que me quedaba era vivir toda la semana en un lugar cercano a la escuela, y a mi casa podría ir solo los fines de semana.
Elegí una escuela en una zona rural llamada Fachinal, porque una tía, esposa del hermano mayor de mi madre, vivía enfrente con una hija soltera. Mi tío ya había fallecido. Ellas no querían dar pensión a nadie porque se pasaban todo el día trabajando con plantaciones y animales (vacas y cabras) y no les daba tiempo para otra cosa. Además ambas eran muy buenas pero muy tercas. Preferían estar solas, levantarse cuando salía el sol y se iban a dormir ni bien entraba la noche. Una vida diferente a la de la ciudad.
Yo no sabía cocinar y mi compañera con la que compartiríamos la casa del docente, -de madera, sin luz eléctrica ni agua potable-, tampoco sabía y no le gustaba hacerlo, menos aún para las dos. Por lo tanto se me complicó el tema de la comida. Mi colega se ofreció a limpiar la casa, lavar la ropa y toda otra actividad doméstica pero menos cocinar.
Al principio contratamos a una señorita, hija de la enfermera del lugar, para la tarea, pero la comida no se parecía en nada a la que preparaba mi madre. Un día nos ofreció papas (patatas) crudas, otro día la carne quemada, muy salada, muy picante, etc. Nada era sabroso. Había que buscar una solución urgente.
El primer fin de semana en casa, conté a mi madre lo sucedido y decidí pedirle que me enseñe.
– Pero la cocina no es fácil, hay que dedicar tiempo y tener paciencia, dijo.
Entonces tomé un cuaderno y un bolígrafo, la senté a mi madre a mi lado y comencé a escribir paso a paso las recetas, primero los ingredientes y luego la forma de preparar las diferentes comidas para los cinco días de la semana. Pero hubo un inconveniente: mi madre no usaba balanza, todo lo hacía a ojo, y la única indicación que me dio fue usar la palma de la mano y medir con puñados por ejemplo el arroz, los fideos para la sopa, etc. Tuve que apelar a mi imaginación y habilidad y de a poco me fui internando con gusto y mucha dedicación al nuevo mundo culinario.
Las recetas fueron aumentando a medida que iba a la casa de mis padres los fines de semana. Mi hermana mayor me ayudaba a veces con algunas de comidas que había aprendido a hacer en la Escuela Profesional de Mujeres, cuando estudiaba. Conservaba en muy buen estado un cuaderno con recetas que no prestaba a nadie. Pero fue una gran ayuda para salir de lo repetitivo que en un momento podría llegar a cansar. Comer siempre lo mismo, cansa y hace perder el apetito.
Así aprendí a preparar desde una sencilla sopa hasta los más exquisitos canelones de verdura y otros rellenos. Por suerte todo eso duró poco más de un año cuando se presentó a la escuela el Director que había sido designado por Concurso de Antecedentes y Oposición y desplazó a mi colega, la que tuvo que ir a atender su grado, y también trajo a su esposa que me desplazó a mí. Así es la docencia, mientras no fui titular, siempre existía esa posibilidad de ser desplazado del cargo. No sé cómo se habrán arreglado con la cocina porque mi compañera pidió su traslado, (ella sí podía porque era titular) en cambio yo tuve que esperar otras suplencias.
Volví a casa de mis padres y aprendí a cocinar más aún, ya con el pretexto de que si me pasara otra vez el ir al campo, necesitaba reforzar mis conocimientos culinarios.
Al año siguiente fui designada a trabajar con un Director, que por suerte manejaba el tema cocina como si fuera un chef profesional. Con él aprendí a elaborar entre otros platos, la polenta guisada, algo que hasta hoy día lo hago y a mi hijo menor le encanta. Tomé tanto amor a la tarea de preparar comidas que las casas que tienen delivery pierden plata conmigo, aunque para suerte de ellas muchas personas lo prefieren.
Pero igual, de tanto querer preparar comida casera, nunca se termina aprendiendo del todo. Como anécdota: Una vez casada, mi suegro se quedó a almorzar. Quise lucirme con ñoquis caseros de mandioca -también llamada yuca-. Tanta cantidad preparé que comimos lo mismo como tres días seguidos. No tenía idea de las cantidades. Eso sí, la salsa alcanzó solo para ese día, por suerte, porque no me gusta la salsa recalentada ya que puede caer mal. Si bien, en casa no se tira nada de comida porque lo reciclo, lo importante es que nadie se queja.
Hoy día prefiero preparar postres, tortas y panes dulces. Alguna vez lo he hecho para ayudar a una cuñada que lo vendía. Aprendí mucho con ella.
El trabajo en la cocina, sirve de complemento ya sea para comer sano y rico, o para aportar a la economía hogareña. A mí hasta me ha servido como terapia anti estrés.
Muchas madres no enseñan a cocinar a sus hijas o hijos, por falta de paciencia, por miedo a que se lastimen con algún utensilio de cocina, que se quemen, o simplemente porque no quieren que pierdan tiempo en eso y se dediquen al estudio (esto último decía mi madre). Pero creo que es importante enseñarles aunque sea lo básico para que sepan desenvolverse en caso de necesitarlo. Es por eso que sugiero a las madres a que no le quiten a sus hijos la posibilidad de aprender a cocinar, sobre todo si ellos demuestran tener interés por hacerlo.
ESO SÍ, LA COMIDA HECHA CON AMOR, ES SABROSA Y SIEMPRE SALE MEJOR.Malania Nashki.
DESEO LATENTE
Si pudiera ser ellapara contemplarte en la nocheo en horas de siestapara peinar tus cabellosreflejar tu miraday aliviar tus angustiasdecirte que eres únicoque cada línea de tiempono marca vejezsolo traza huellaque indica experiencia.Si pudiera ser ellala que advierte tormentasy alerta ante la lluviapara que no te haga dañoy puedas descansar ocultoen tu lecho al vientobajo nubes grisestras campos desiertosllenos de silencios.Quisiera ser ellala poderosa lunadel brillo de tus ojos, espejode tu sonrisa el reflejo,porque tú has sidoy sigues siendo mi sol.Malania
Imagen: Lua T.
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CERRO DE SIETE COLORES
El Cerro de los Siete Colores está ubicado sobre la Ruta Nacional 52 que se dirige al Paso de Jama, frontera entre Argentina y Chile, a la vera del pueblo de Purmamarca, provincia de Jujuy. Es un pueblo primitivo cuyo trazado urbano se hizo en torno a la iglesia principal, Santa Rosa de Lima. Fue declarado Sitio Histórico Nacional. Y es por eso que las viviendas y locales de venta, conservan sus formas primitivas.
“Purma”, significa campo sin sembrar o campo en el desierto y “marca”, significa pueblo. De allí el significado de “Pueblo de Tierra Virgen” o “Pueblo del Desierto”
El Cerro, atractivo turístico, está conformado por sedimentos marinos, lacustres y fluviales que fueron depositándose en la zona durante siglos.
Su color rosado está compuesto por arcilla roja, fango y arena.
El color blanquecino, por piedra caliza o calcárea, cualitas de color blanco.
Los colores pardos, marrones y morados, compuestos por plomo y carbonato de calcio.
El rojo, por hierro y arcilla.
El color verde, compuesto por filitas, pizarras de óxido de cobre.
El color pardo terroso, por roca con manganeso.
Y el color amarillo mostaza por areniscas calcáreas con azufre.
Toda esta compleja composición data de millones de años.
Una de las versiones de la leyenda sobre el Cerro de los Siete Colores se la puede escuchar aquí:Malania
Imagen propiaPERRO GUARDIÁN
Canelo estaba malherido, tirado al borde de la carretera que une dos pueblos de Misiones, Argentina. Fue encontrado por cazadores a los que se les había descompuesto el automóvil en el que viajaban de regreso a sus casas.
Apenas si respiraba, Canelo fue llevado en otro vehículo que cruzaba por el lugar, a una veterinaria.
Pero había un problema: ¿Quién se haría cargo del perroUna vez medicado había que retirarlo para no tener que pagar internación en ese lugar.
Uno de los cazadores, Mauro, preguntó a varias personas si lo querían, pero nadie respondió que sí.
Mauro ya tenía tres perras en su casa y se le hacía difícil, pero tampoco lo dejaría en la calle. Así que, a pesar de todo, decidió llevarlo consigo. A los pocos días Canelo ya comía y movía la cola cuando él se le acercaba. Por la noche cuando nadie lo veía, y como no tenía bandeja con piedritas para satisfacer sus necesidades, pero sí, un enorme patio donde hacerlo, se movía solo para eso y volvía al lugar asignado a recuperarse, una cucha debajo de la pileta del lavadero.
Hoy Canelo vive en una casa de campo con Adela, una señora de mediana edad que lo cuida como uno más de la familia. Durante la semana viven los dos solos porque los hijos de Adela trabajan y solo la acompañan los fines de semana, cuando pueden.
Adela se subió al árbol para recoger a su loro que se le ha escapado de la jaula. Canelo la acompaña para asegurarse que no le pase nada.Malania
Imagen: Reina.