• Poemas

    ACTITUD DE POETA

    Ya no arroja el poeta sus palabras con fuerza
    en versos plasmados en hojas blancas
    y a contratiempo, como olas revueltas.
    Camina, ondeando los pasos bajo la lluvia
    con la vista fija y de a ratos perdida
    en las baldosas sueltas,
    indiferente a las lentejuelas de oro y naranja
    con que el mismo sol salpica
    las ventanas de las casas.
    Un aire agrio y ventoso lo transporta
    al otro lado de la ciudad sombría.
    Reflejos de fuego en los espejados ventanales
    se mezclan con lo plateado de sus cabellos.
    Un resplandor estruendoso lo estremece  
    y una voz casi imperceptible
    le hace cambiar el rumbo.
    ¿Alguien lo sigue, lo vigila o lo cuida?
    ¡Quién sabe! Quizás ni el poeta lo sabe.

    Imagen de la red.

  • General

    AÚN DESPIERTO

    Trémulo y prosaico,
    excitado
    por la fragancia de la naturaleza,
    inmerso en el bosque
    de sus más desdichados sueños,
    solitario y cegado
    por las censuras injustas,
    pretende armonizar su espíritu
    descansando su cuerpo
    bajo la cortina de un durmiente,
    recibiendo caricias
    y latigazos de lluvia
    en su último velo de sueño,
    mientras xenón lo envuelve
    invitándolo a seguir
    encendiendo el fuego.
    Imagen: S. D. V.
                                                          
  • General

    FOBIAS

    SEGUNDA PRESENTACIÓN

    Tripanofobia: fobia a jeringas, sangre, heridas.
    Belonofobia: a las jeringas solamente.
    Arrenofobia o androfobia: miedo intenso y desproporcionado hacia los hombres.
    Erotofobia o Ginofobia: fobia la sexo.
    Ginefobia: a las mujeres.
    Caliginefobia: Fobia injustificado a las mujeres hermosas.
    Hidrofobia: Miedo al agua.
    Arsonfobia: al fuego.
    Apifobia:  a las abejas.
    Bufonofobia: a los sapos.
    Cinofobia: a los perros.

    Imagen: R. A. M.

  • Poemas

    COMO LUNA LLENA

    Cuando tus palabras me dan vida,
    me inspiras,
    a volar remotamente,
    a hurtadillas
    recorro quiméricos caminos,
    me filtro por el ojo de tu puerta,
    me interno en la tapeta
    frontal, de tu elegante camisa,
    busco tu mirada color caramelo,
    junto al fuego de la chimenea,
    como la luna llena
    me iluminas,
    y así continúo por tus venas,
    tus cabellos y tus músculos,
    por las uvas del tiempo,
    que se reflejan en tu cuerpo,
    para acabar
    en un fantástico y reconfortante sueño.

    Imagen: N. V. S.

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    FUEGO SOBRE HIELO

    Tomé una barra de hielo para triturarla, pero en  jugosa liana, me abrazó adhiriéndose a mi piel.  No pude realizar mi cometido,  el frío me quemaba las manos. Odié ese momento mientras las bañaba bajo un diminuto hilo que chorreaba de una canilla que apenas había logrado abrir. El hielo seguía firme hasta arrancarme lágrimas. Pero, como ningún mal dura cien años, apareció él. Delicadamente tomó mis manos entre las suyas y una energía muy tibia lentamente se ramificó por los poros de mi piel, de mi carne, de mi todo,  y en continuo avance logró calmar mi congelamiento. El hipnotismo de su tierna y dulce  mirada se apoderó de mí. Cuando desperté sus fornidos brazos me envolvían en un logro de transformación de frío a cálido, muy cálido. Agradecida, lo abracé fuertemente, apoyé mis labios en los suyos y me estremecí. El sol se filtraba  por la ventana. Lamento que haya sido solo un hermoso sueño. 
  • Poemas

    HUECO EN EL TIEMPO

    Mientras
    el extrañarte  no es extraño
    la nostalgia se vuelve hábito
    y por tenerte el alma clama
    el corazón se debate
    en abanico de amalgama
    Allí
    surge un hueco en el tiempo
    en el profético pensar
    que el fuego se extinguirá
    en el abismo de ese
    perdurable silencio
    Pero
    surge otro hueco en el tiempo
    y estás presente, varonil
    con perfume amaderado
    exhalando en fuerte abrazo
    tus deseos contenidos
    hoy, tal vez mañana
    es  día de victoria
    los fantasmas ya no existen
    Imagen: Lua T.
  • General

    LA VIDA

    Ha parado de llover y los pájaros trinan desde el amanecer. Sienten la felicidad de un nuevo día que les permite volar bajo el sol, bajo las celestes nubes, o reconstruir sus nidos que han caído con la tormenta. El lapacho tendrá compañía y eso le alegra, tanto que  floreció  antes de tiempo, para que en verano sus hojas broten a granel y den sombra a los polluelos. Hoy muestra al mundo su esplendor. Su ciclo de vida continúa. ¿A cuántos habrá derribado la tormenta? ¿Cuántos fueron convertidos en astillas para el fuego destinados a calentar hogares?