• General

    INTERROGANTES

    ¿Cómo explica la ciencia
    el dulce olor de la tormenta?
    ¿Será el petricor que percibimos
    después de una sequía
    lo que nos llena los sentidos
    de perfume infinito?

    ¿A veces la geosmina
    llega antes de la lluvia?
    ¿Será que la humedad aumenta
    y se humedece el suelo sin que llueva?
    ¿El olor es una combinación de aceites
    que provienen de las plantas
    ante períodos secos
    y de bacterias que viven en el suelo?

    Y por último:
    ¿Por qué a los niños les gusta chapotear
    en un charco de agua de lluvia?
    ¿Y aunque haga frío disfrutamos
    de jugar en la blanca nieve taciturna?
    ¿Por qué no suenan como antes
    las campanas  en todas las iglesias?
    ¿O es que ya a nadie le interesa
    el petricor,  la geosmina, el chapoteo,
    el color de la nieve y el repiqueteo?
    ¿Será que nuestros sentidos han sido
    vapuleados por la pandemia?

    Malania

    Imagen: P. M.


  • Haikus

    ORQUÍDEA

    HAIKUS XIII

    Orquídea en flor
    de armoniosos matices
    alegra vidas.

    Tierra húmeda
    por lluvia bendecida
    inhibe al calor.

    Sus hojas verdes
    vigilan noche y día
    a los intrusos.

    Malania

    Imagen propia

  • Poemas

    UN ÁRBOL BAJO LAS NUBES

    ¿Qué le pedirá el árbol a las nubes?
    Quizás un poco de agua fresca
    o una repentina y copiosa lluvia.
    ¿Qué le dirán las nubes al coposo árbol?
    – Con tus flores nos teñiste de bellos colores
    en un amanecer celeste
    entre violetas y turquesas.
    Entre nubes y árbol
    se pasea flotando la brisa cálida
    de un invierno diferente
    con algunos rayos fulgentes
    que nacen con la aurora
    y se esconden con el eco
    de un concierto de pájaros
    antes que el ocaso
    se apodere del árbol y de las nubes.

    Malania

    Imagen propia.

  • Poemas

    EN UN DESPUÉS AUSENTE

    Cuando los rayos del sol aun duermen,
    tus caricias cálidas se hacen presentes
    tus besos me despiertan
    tus manos se deslizan
    y tus dedos hurgan
    como únicas herramientas
    en este juego travieso
    donde se confunden
    tu almíbar con aceites esenciales
    en un amanecer tardío
    que todavía no ha despertado
    en este día
    en que la tormenta exterior no existe
    y la lluvia de tus humedades
    estremecen mi cuerpo.
    Imagen de la red.
  • Poemas

    DESPISTADA SOMBRA

    Colgado de una rama herida,
    rompe en llanto el aire de la vida.
    Un corazón se tiñe
    en el pincel del viento
    y se esconde con pena
    para no encontrar en el sol
    el futuro de la noche.
    Prefiere dormir y acunar su herida
    en despistadas sombras
    bajo una lluvia de sueños
    esos que aún no están perdidos.

    Malania

    Imagen propia

  • General

    SOMBRAS

    Hay sombras que se tornan inseparables,
    se apropian de nuestros sentimientos
    y se convierten en nuestra propia sombra
    aunque  aparentemos ser intocables.
    Sombras que no nos abandonan
    ni de día ni de noche,
    están allí abrazándonos, besándonos
    incitándonos a continuar vivos,
    memoriosos y enérgicos,
    esas sombras que no están amortajadas.
    Están llenas de vida
    aunque aparenten ser nada,
    allí están
    para hacernos saber que el amor existe,
    simplemente están presentes
    sin descubrir el motivo por el que están.
    Se alejan y luego regresan
    sin importar horarios ni estados del tiempo,
    si hay nieve,  llueve o hace frío
    solo están.
    En medio de la lluvia, la arena
    o sobre  la tierra roja o gris,
    frágiles o fuertes, qué más da.
    El hecho es que están y no se alejan demasiado
    y si viajan luego regresan
    buscando nuestra compañía.
    Si las rechazamos corremos el riesgo
    de un memorioso nunca más.
    A veces dudo …si solo son sombras
    o es tu presencia fugaz.
    Malania
    Imagen de la red.
  • General,  Poemas

    CARICIAS

    Entre otras especies, abigarradas,
    estaban allí en el portal
    en macetas, enraizadas,
    declamándose juramentos indecentes.
    Con argucia de gacelas
    mecidas por el viento
    se acariciaban en secreto,
    se siseaban entre sí
    cuando caía la noche y decaía la brisa.
    Más tranquilas, las estrellas estaban
    sobre el piso mojado,
    por la lluvia demorada,
    por la noche sin luna.
    Breve crepúsculo arremetió,
    en hilo de luz las sorprendió
    besándose con el viento.
    Esa noche no han dormido,
    pero sí,  han soñado.
    Malania
    Imagen: M. C. R.
  • Minicuentos

    PETRONA

    Ha nacido junto a varios más, no sé bien cuántos. Fueron creciendo con la ventaja del calor de los días y el alimento que mamá gata conseguía en el vecindario, más la leche materna. Pero llegó el momento que cada uno debía conseguir un hogar para vivir y sobrevivir.
    Un día de lluvia apareció ante la puerta de Vero un pompón que maullaba. Sin pensar lo hizo pasar para darle de comer. Le preparó una cama con una caja y una pequeña alfombra que ella misma había fabricado. A Vero le gustaban las artesanías y tenía especial habilidad para esas cosas.
    Debía encontrar un nombre pero la duda se presentó cuando su hija le preguntó: ¿Es él o es ella? No se sabía porque no querían tocar al pompón para no ahuyentarlo; y lo llamaron Petrona.
    Cuando se domesticó después de varias semanas, Petrona se tiró patas arriba para dormir más cómoda en su caja, mientras Vero preparaba el almuerzo. Para sorpresa de los moradores, vieron ahí que era gato y no gata. Rieron hasta que lo despertaron. Petrona los miró y como no entendía nada, siguió durmiendo plácidamente.
    Ahora es tan mimoso y confianzudo que duerme a los pies de Vero y cuando ella estudia el curioso Petrona se acuesta sobre las hojas para llamar la atención. Busca mimos o avisa a su dueña adoptiva que es hora de descansar. Es una mascota adorable.

    Malania

    Imagen: V. D. S.

  • General

    ¿PINTADAS O NEVADAS?

    Parecen estar pintadas con tizas y acuarelas,
    amanecidas tras el blanco delantal de un escolar.
    O algunas nubes blancas se precipitaron,
    movidas por el estruendo
    del rugir de motores de los aviones
    o de los mismos truenos
    antes de una copiosa lluvia.
    O quizás la misma lluvia
    lavó las nubes blancas y las deshilachó
    tumbándolas sobre las cumbres,
    que según dicen, están nevadas por el intenso frío.
    O quizás un niño extraviado ocupó su tiempo
    y las pintó con tizas y acuarelas.

    Malania

    Imagen: C. J. V.

  • General

    TRAS EL VENDAVAL

    Los tulipanes renacieron
    entre los cilicios de la duda
    y la llovizna de las primeras luces.
    Se miró al espejo
    y detestó su propia imagen.
    La vida se volvió áspera
    mientras en el jardín
    la copiosa lluvia y vendaval
    secuestraron  pétalos y hojas nuevas.
    La rosa y otras flores asustadas
    volvieron a cerrarse en pimpollo.
    Pero el sol no tardó en brillar
    y las nubes gozaron airosas
    del aroma de las caléndulas.
    Su mirada se volvió diáfana
    ante la rosa florecida
    con sus pétalos abiertos.
    Imagen: R. E. Ch.
                                             Malania