• Poemas

    ADVOCACIÓN

    Advocaba en sus versos
    a la dama misteriosa,
    la veía vestida con brocado azul
    con dibujos de flores asépalas,
    la consideraba una diosa.
    Tarareaba a capela  
    por las calles adoquinadas,
    dibujaba símbolos
    con versos en el aire,
    cual gaviota aterrada
    escondida en un establo.
    Sabía que nunca la encontraría,
    pero la soñaba
    con euforia exagerada.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    ESPEJO CONCA

    Penando,
    en el umbral de la azotea,
    frente al espejo
    llueven preguntas
    y se plasman en eco,
    adolorido por un hoy,
    inocente y partido
    que desgarra el corazón,
    no complaciente y herido,
    por la tiesura
    de tu voz ausente.
    Gotas de misterio,
    arrebatan la calma
    del ayer que regresa,
    por una mirada lejana,
    que requiere con urgencia,
    de palabras de verano
    sin marañas.
    Mil preguntas sin respuesta,
    que infligen
    la prosperidad de un nosotros,
    al ver en el invierno
    ausente tu mirada
    y que el tiempo
    se encarga de la nada.
    ¿Será que se puede
    dilucidar la verdad
    en el revés de las cosas?
    Quizás la respuesta
    la tenga el espejo conca,
    o esté en el verde del bosque
    o en las azules aguas borrascosas
    Imagen: R. E. Ch.
  • Poemas

    VESTIDO DE TORNASOL

    VESTIDO DE TORNASOL

    Asoma al ritmo del mundo
    con vigorosa naturalidad
    envuelto en ruborizado plumaje
    reflejando el admirable paisaje.
    Con distinguido rumbo
    se proyecta en vuelo
    de los misterios escondidos
    hacia las nubes azules
    que me hablan de tu ausencia.

    Imagen: Gentileza de R.E.Ch.

  • General

    ARPEGIOS DEL VIENTO

    Arropada en su manto
    magnifico y sedoso,
    la noche inquietante
    vierte de los cielos,
    un excitante misterio de amor.

    El viento canta loas
    con gracia y fantasía
    a la ingenuidad de la luna,
    quien perfila en sus fuentes
    una mirada inquieta,
    suave y misteriosa,
    que brota a borbotones.

    Noche misteriosa y luna inquieta
    se unen y se suman
    a los arpegios del viento
    con tan preciado talento.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    OLAS Y ONDAS

    Solitaria,
    en busca de palabras ausentes,
    circundada en el vacío,
    encuentro anclaje seguro
    en vértices de  poesía.
    Envuelta en emociones
    y salpicada de rocío,
    bajo una luna de porcelana
    me refugio en tu estío,
    en el mundo de los sueños,
    en estrecha amalgama,
    entre ondas de nubes coloridas
    abrazando una retama.
    Mi mirada hacia la espuma
    de un mar embravecido,
    observa la sonrisa del sol
    reflejada en las olas,
    las que besan la arena
    en un eterno vahído,
    olas donde  se mezcla
    el coro en sinfonía,
    de gaviotas en torbellino.
    Te busqué en la brisa,
    también en las estrellas  
    y encontré flotando
    la carta de amor más bella.
    Me decías en ella
    que estabas en camino,
    en el columpio de la vida,
    esperando al martes
    o algún otro día,
    más sereno y ligero
    sin compromisos letrados,
    en  alas de mariposa
    en el crispar del hombre a niño.
    El misterio se diluye
    en una danza silenciosa
    y en un espacio sin límites.
    Imagen: Gentileza de Ramona T. 
  • Poemas

    ABSTRACCIONES

    VIAJE SIN RETORNO
    Lunes lluvioso por aquí.
    El viaje ha sido planeado:
    partida, estadía,
    itinerarios y regreso.
    Todo iba sobre rieles,
    antes y durante el paseo.
    Pero al regresar,
    misteriosamente,
    la relación dio punto final.
    Es que hay viajes y viajes,
    medios o relámpagos,
    otros muy largos,
    también los hay galácticos,
    ociosos, interminables,
    pueden ser electrizantes,
    un tanto espeluznantes,
    y los inolvidables
    que son energizantes.
    Pero los peores,
    o tal vez los mejores,
    depende de cómo se lo mire,
    son los viajes al infinito,
    porque son aquellos,
    únicos e inigualables,
    los que no tienen retorno.
    Imagen: Nahuel V. S.
  • General

    FRAGANCIA DE OTOÑO

    COMO SERPENTINAS
    Los  silicios se escudan  tímidamente en el brisar vulcanio
    y en alas carmesí cimbran en la madrugada.
    Despertar de evaporitas que ansían un poco de dulzura
    cubren manantiales y selvas despejadas.
    Fosforitas desnudas bregan por fragancia de rosas
    entre rocas y alamedas silenciosas.
    Capas sobre capas luchan por sobrevivir
    deformaciones tectónicas limitan su potencia.
    El otoño carga sobre sus espaldas el hierro
    de amaneceres solitarios y silenciosos.
    Las esmeraldas se opacan por la humedad
    encubierta  por el frío fantasmal.
    La frialdad del ambiente invita a la radiación
    accede gustosa acompañada por la convección.
    Los magmas pugnan por un suave  sendero
    hacia las cálidas caricias del rey sol.
    El metamorfismo triunfador , airoso, baña
    con serpentinas de granates y andalucitas.
    Y el movimiento continúa sin darnos cuenta
    convirtiéndonos en misteriosos seres.
    Imagen: Gentileza de R.E.Ch.
  • General

    MISTERIOSO AMOR

    Presumida o Jactanciosa, el nombre no interesa.
    Se aproximó y le dijo:
    – ¿Te conozco? No, no sé quién eres, ¿por qué te acojo con miel y creces? ¿Dónde vives? Tal vez en la cima, quizás en un muelle o en una recova. ¿Dónde amaneces?
    – No sé quién eres, si tienes dueña. Igual te amo. ¿Es imprudente? ¿Es ambagioso?  No, es acucioso.
    Y mientras tanto construye una montaña de semas rellena de besos de dulce de leche, cubierta de caricias melosas, muy cremosas. Para que en el día tan esperado, pueda regalarle todo, toda, inclinado, parado, tumbado, ¿Qué importa la postura? Importa su ternura. 
    Imagen: Gentileza de R.E.Ch.
  • General

    EN VUELO

    Ella le enviaba cartas de amor.
    Él, indiferente,
    frecuentaba el harén,
    su escudo fue el silencio
    su cobija, un mar de dudas
    navegante en ausencia de palabras
    no  daba margen al amor.
    Ella se volvió misterio
    y asociada al desencanto
    se convirtió en orfebre
    de lagunas estériles
    lo vio volar a través del horizonte
    una y otra vez.
    Pero un día  cansado y agitado
    se posó sobre su árbol
    ese que había tallado
    con ahínco y con fervor.
    Se encontraron sus miradas
    se estrecharon en abrazos
    titilaron sus dedos entrelazados,
    sus labios, sus entrañas
    se enardecieron, y sin vacilar
    se olvidaron del mundo entero.
    Cuando él reaccionó
    ella ya no estaba.
    Fija su mirada
    en la lejanía
    la vio revolotear
    como en cimbra parpadeante.
    ¡Ven! resonó en el aire
    y de un salto se elevó
    allá fue
    juntos, siempre juntos
    felices para siempre. 
  • Poemas

    QUIEN SABE

     
     
    Vaya uno a saber
    qué misterio encierran
    los prodigios del universo.
    ¿Será el viento norte
    el que indique el sendero
    o la estrella del noreste
    iluminará el camino correcto?
    ¿Será hacia algún bosque
    o tal vez
    a un posible estero?
    Con rimas o en prosa
    esparce sobre ella
    cuerdas de confusión
    en el nivel del vacío
    donde lo que hay
    no son jazmines ni rosas.