FLORES EN LA PLAYA
Verano inquieto
El río se funde al mar
Vientos del Este.
Flores de playa,
fucsias y amarillas
resplandecientes.Malania
Imagen: G. S. M.
EN VILO
Montada sobre un sepulcral silencio,una madrugada,después otra, después otra másy así sucesivamente…se acoplaron el día y la nochecon un aire de vil crueldadvagando por las orillasdel abierto ventanalsin una letra, ni una palabrani una frase de amistad,menos una de amorsiquiera pintada con cal.Pero a sus ruegosde un mejor destinoacudió sin desatinoun duende angelical.La despertó a las tresinvitándola a navegarpor el mar de las gaviotas.Concurrieron las marmotascon dulces de toda clase,con flores en la alfombray aromando el universoen cada mano una rosa.MalaniaImagen propiaNOMEOLVIDES SILVESTRES
El mes de octubre
diferente occidente
trajo la lluvia.
Bajo la luna
van sin prisa ninguna;
su aroma esparcen.
Flores silvestres
al borde del camino:
Las Nomeolvides.
MalaniaImagen: propia
MARIPOSA MIMETIZADA
Quizás no debió ser y no fue,
un desencuentro fortuito con lo desconocido.
Fue cuando la oscuridad abolió
el juego del eclipse fallido.
Y la inundación canceló
los desfiles del aniversario.
Pero… ¿aniversario de qué?
¿Del primer aleteo de una mariposa?
delicada y fina como el cristal
transparente como lencería de noche
con movimientos casi fantasmales
mimetizándose entre las flores
aleteando en la verde pradera.
Y alguien inventó, quizás el universo,
el día del aleteo maravilloso
entre los dedos de la mágica naturaleza
para que podamos gozar
de la belleza de su vuelo
aunque no haya juegos de eclipses
desencuentros fortuitos
ni desfiles de aniversario.Malania.
Imagen: R. E. Ch.
PANAL DE AVISPAS
He encontrado un panal de avispas en el hall de mi casa pero antes lo había soñado.
¿Qué significa soñar con avispas y otros insectos?Soñar con insectos puede representar pequeños obstáculos a superar. Se suele tratar de pequeños problemas o preocupaciones, que son necesarios eliminar, para que no se conviertan en algo mayor.
Por otra parte, los insectos en los sueños simbolizan la sensibilidad y la exactitud.
A veces los insectos en los sueños se interpretan como mensajeros divinos. Quizás lo que están diciendo es la necesidad de replantear valores y principios, para poner en orden nuestra vida.
Soñar con insectos puede también ser una promesa de ganancias financieras o la resolución de un misterioEncontrar un panal de avispas en casa es considerado un buen augurio en países como China y Tailandia, puesto que hace un llamado de atención para vivir armoniosamente en comunidad y tener una buena relación sincera, larga y duradera con los que te rodean.
También, tener un panal de avispas en casa indica que debes tener una visión mayor de la cosas, es decir, observar con más detenimiento lo que está pasando a tu alrededor y analizar cada aspecto profundamente, desechando lo negativo.
Es necesario aprender a tomar buenas decisiones en todos los ámbitos de tu vida.
Encontrar un panal de avispas en la casa es de buena suerte, porque ellas representan el valor y la energía vital que debes tener para salir vencedor de la situación que estás viviendo, porque las avispas son animales de poder.
No te alarmes al ver un panal de avispas porque estos increíbles animales son espíritus protectores y se instalaron allí para traer a tu hogar y a quienes lo habitan, protección y tranquilidad. Por eso, no debes destruir su panal, de lo contrario, puede traer energías negativas y malas vibras.
Las avispas también polinizan flores y cumplen un papel clave para el medio ambiente matando y comiendo otros insectos considerados pestes.
El significado de avispas en casa generalmente es positivo, porque las avispas representan un nuevo comienzo, así como también desarrollo, trabajo en equipo, inteligencia y eficiencia. Sin embargo, en algunas civilizaciones este insecto está relacionado con las energías negativas.Información tomada de la red.
Imagen de la red
Imagen propia
BURBUJAS MATIZADAS
Nacen flores y
frutillas matizadas
entre burbujas.
Malania
Imagen: R. E. Ch.
LA CAJA DE COLORES
Escuela de campo.
El primer día de clase, no hay mochilas, cuadernos ni lápices.
Con manos casi vacías, con una bolsita de plástico y en su interior un trozo de pan y un trapito de pañuelo.
Los padres tareferos, apenas ganaban para comprar lo esencial y así mantener su hogar.
Con sus alpargatas mojadas los días de lluvia a clase asistían igual.
Desayunaban en la escuela y antes de la salida recibían su ración de comida.
Si un plato sobraba lo pedían y llevaban para su hermanito menor o para su abuela.
Les gustaba dibujar y con colores pintar, con lápices que juntaban
año tras año en una caja de cartón muy particular.
Nada se tiraba, todo servía.
La maestra les compraba los fibrones de colores y los lápices de palo porque eran los que más duraban.
Al terminar las clases la caja quedaba guardada en el armario marrón desteñido por los años.
Durante las vacaciones los vecinos cortaban el pasto para que luzca bonita
la escuela que mucho querían.
Mataban a las hormigas para conservar el jardín que muchas flores tenía, sobre todo rosas y un jazmín.
Al comenzar las clases se abría el armario, se sacaba la caja y lista en mano los mismos niños controlaban si estaban todos los colores:
diez amarillos, diez verde claro, diez azules, diez anaranjados…y más.
Y así de diez en diez todo estaba contado.
Nunca olvidaré la tan querida caja de los colores de palo.Malania
Imagen propia
EL ESCRITORIO AZUL
Con aire pesado y entrecortado por el abrir y cerrar de la puerta, el viejo escritorio pintado de azul
descansaba en una habitación casi sin uso.
No entendía mucho su función, pasaban los días y nadie lo ocupaba.
Ella entraba y lo miraba, aunque el color azul no le gustaba y eso se notaba. A él tampoco le importaba que esté allí o en cualquier otro lugar, junto a muchas otras cajas y muebles que con suerte, por el clima apropiado no despedían vaho.
En la noche oscura lo visitaban algunos mosquitos y pequeñas lagartijas hambrientas. Al verlo inactivo y triste, no lo molestaban.
Su color intacto pero, por el polvo que filtraba por alguna hendija, se lo veía apagado a pesar de la claridad del día.
El ruido de uno que otro automóvil de su letargo infinito lo despertaba.
Y así fue pasando el tiempo hasta que un día, cómo su dueño no quería venderlo, se lo regaló a una niña que necesitaba tenerlo.
Viajó el escritorio con miedo, sin saber a dónde iba, pero al llegar vio a la niña y se alegró pensando que allí sí tendría compañía.
Ahora vive feliz entre osos de peluche y muñecas de gran sonrisa; la niña le cambió la vida a ese escritorio que lleno de polvo pasaba sus días.
Se siente dichoso entre juguetes, acunando niñas acompañado de libros, y hasta puede escuchar voces por el teléfono, al que le sirve de lecho.
Ahora no tiene sentido el llanto ni tiene que morder el silencio. Se siente acompañado y se perfuma con los aromas de las flores de rosas, jazmines e incienso.
La tristeza ya no derriba sus bordes engomados y aquella sorda habitación quedó en el pasado.Malania
Imagen: M. R. T.
DE MALA MADRE
Cuando me dijeron su nombre: Mala Madre, me ha sorprendido.
Es que nunca hubiera imaginado la razón de esa denominación.
En los bordes de sus hojas maduras, que a su vez han nacido a causa de otras hojas que han caído, no por descuido sino por el viento mismo, han salido hojitas que parecen flores pequeñas con pétalos prendidos a su hoja madre.
Esas que para mí son bellas florecillas, son expulsadas una vez que han crecido. De ahí el nombre de Mala Madre porque cumplido cierto tiempo no quiere sostener más a sus hijos.
Si están cerca de otras macetas o de algún jardín florido, al caer sobre la tierra, lo más probable es que se reproduzcan y se conviertan en plantas madres.
Seguramente el proceso se repetirá una y otra vez.Malania
Imagen propia
ANA EN CELO
¡Ana! ¡Ana! ¡Anaaaaaaa! Gritaba un hombre y me detuve para ver si era a mí a quien llamaba.
Mi nombre no es ese, pero podría haberme confundido con otra persona. A esa hora de la mañana no circulan muchos peatones.
¡Ana! ¡Ana! ¡Anaaaaaaa! Y me di cuenta que perseguía a una perrita negra. De pronto vi que la mascota venía en dirección a mí y sorprendida más que asustada me quedé quieta sobre la acera. Ana se metió poco más entre mis piernas como pidiendo auxilio. Pero al ver que su dueño se acercaba comenzó nuevamente a disparar y detrás, un perro un poco más alto que ella de color canela la perseguía. El hombre cansado corría y gritaba ¡Ana! Casi sin aliento.
No sé por qué me causó gracia, quizás porque escuché la algarabía de los pájaros sobre un lapacho florecido de rosa, como festejando la situación.
Dos colibríes con colorido aleteo y una abeja gozaban de las apetitosas y perfumadas flores de azahar.
Dobló la esquina el hombre detrás de Ana y el perro.
Una vecina dijo: – Ana está en celo por eso la locura de su dueño. Ana se le había escapado cuando había abierto el portón de su casa para salir con su moto.Malania
Imagen: L. M. R.