DETRÁS DE UN CERRO
No recuerdo cuál fue el primer día
que comencé a observar la luna y las estrellas.
Creo que nace ese poder de contemplación
cuando el amor se manifiesta y corre por nuestras venas,
entonces surge la necesidad de ir
más allá de nuestro alrededor,
de buscar nuevos horizontes
y así encontrarnos con la fuente de inspiración,
muy poderosa por cierto, la luz de la luna,
que si bien no es suya propia,
sabe reflejar muy bien al astro rey de la naturaleza,
obra de la creación del universo.
Es por eso que sufro cuando veo y siento que:
Se ha anestesiado el poeta
se han vuelto mudos sus versos
sus palabras se han ahogado
en aguas del manso río
detrás de algún cerro.
Y es por eso que le digo:
Sé como el pájaro, vuela.
Que la tormenta no detenga tu soñar.
No pierdas el tiempo en rencores
o en nostalgias por cosas no realizadas.
Sé un triunfador ante todos
vístete de sonrisas
construye tus días con alegría
y pinta al viento
con tus versos en melodías.
Recuerda que eres poeta en esencia
y ríndele homenaje en emotiva memoria
a aquel día cuando has escrito
tu primer poema de amor.
No dejes que nada ni nadie
te quite el poder de reflejar tus deseos
en el canto alegre de un zorzal.Imagen: R. E. Ch.
CANTO COLIBRÍ
Estás ausente,
pero tu imagen,
siempre presente.
En mi corazónllueven cristalesde una ventana etérea.Entran por ellael aire frío,el polvo rojo de reseca tierra,la húmeda brisay la triste risade niño soñoliento,el canto colibríaún hambrientoposado en carmín.Besa la nube, besa la flor,clama al sol por su calory le reclama por su amor.Imagen: R. E. Ch.LO QUE DICE ELSA
Me dices que estos versos son oscuros, y acasolo son, sin embargo, menos de lo que he querido.Cerremos nuestra ventana sobre la felicidad robada,por miedo a que entre el día,y vele para siempre la foto que deseaste.Me dices nuestro amor si es que inaugura un mundo,es un mundo en el que la gente gusta de hablar sencillamente.Deja allá a Lancelot, deja la Tabla Redonda,Ireo Virnana Esclarnionda,que por espejo tenía una espada deformadora.Lee el amor en mis ojos y no en las sombras.No trastornes tu corazón con sus antiguos filtros.Las ruinas a mediodía son solamente escombros.Esa es la hora en que tenemos dos sombraspara mejor estorbar el arte de los románticos.Tendría acaso la noche más encanto que el día.Vergüenza para aquellos que ante el puro cielo no suspiran.Vergüenza para aquellos que, un niño de golpe no desarma.Vergüenza para aquellos que no tienen lágrimaspara un canto callejero una flor en los prados.
Tú me dices si tú quieres que te ame y te ame.Es preciso que ese retrato que vas a pintarmetenga como un verde nido sobre fondo de crisantemo.Un tema escondido en su tema.Y une al amor el sol que ha de venir.Autor: Louis Aragon fallecido en París en 1982 (Elsa, su esposa)POR EL SENDERO
Cantaba sin oírse y sin que nadie lo oyera,llenando las horas vacías de la calma;regaba el lecho de misteriosas piedras,un arroyo profundo de aguas pálidas.Se despojaba de los rumores de almasesperando la lluvia para limpiar estrellas,que reflejadas en el crepúsculo cálidogozaban en laberinto agudo de sus breñas.El sol improvisaba una sonrisa fresca,besando con sus rayos lianas y rosaledas,crespones oscuros y hojas pintorescas,en un amanecer fragante de la naturaleza.Mientras camino por orillados senderos,pienso en ti y en tu sonrisa bella.LETRAS DE INVIERNO
Vientos gélidos y furiosos,golpeaban los cristales de las ventanascomo queriendo refugiarseen el ambiente cálido,para no empaparsecon gotas de agua y escarcha.Ella parecía no escuchar,inmersa entre las páginasde algún libro preferidoo en letras y palabras sueltasescritas al azarpor algún autor desconocido.Resurgían emociones,afloraban vivenciasvolando en una nube de sueños.Lo importante era continuar,no estancarse,no quería bajar los brazosaunque no tuviera planes futuros.En sus nocturnas pausaslo veía cercanorestregando sus manos frías.Recordaba sus letras, sus ademanes,sus gestos y su sonrisa.“No tengo frío” decíay ella lo estrechaba fuertemente.Hoy todo es diferente en su ausenciay ella sigue inmersaen las páginas de algún libro,entre sus letras y palabras sueltaso en alguna de sus poesías.Imagen: R. E. Ch.OTRO SUEÑO
Fúlgida luna de enero,atravesó las organzasy con ella su miradaen la penumbra de plata.Sus taciturnos ojos,se posaron en mi almohadareposando junto a mimuy callado en alborada.Y con el agua lunarde sus sueños derramadadepositó en mi piel su rocíocon calidez acicalada.Me susurró al oído“quise huir de aquel recuerdopero no encontré la puertame adormeció un vahído”.El recuerdo resurgió,las calles adoquinadascon olor a crisantemosy bayas de tamarindo.Fue un día cualquieraen el frescor de mayonos vieron salir juntosde aquel café peregrino.Y el camino nos vio unidoshasta la histórica esquinadonde de pronto nacióel primer beso en la mejilla.Imagen de la red.NADA FUGAZ
En el holográfico universo,múltiples planosen grises y naranja,entremezcladoscon colores sin nombre.Planos misteriosos y mágicos,que se desplazanentre la fresca y divertidabrisa del horizonte,cuando el solse va despidiendosin rigor del tiempo,desmontadode los hombros gigantesde una nube.Imagen: E. P. L.A LA ORILLA DE UN ARROYO
Se había sentido embriagada como si le hubiera hablado el pájaro aquel, sublime alondra, que esperaba volver a oír después de mudarse al campo, luego de que en la gran ciudad sólo escuchaba al zorzal cuando la despertaba.
Recuerda que antes de mudarse a la gran ciudad todos querían impedirle que se fuera. Le decían que estaba loca. “Aquí estás segura y te vas a un lugar donde todo el mundo trata de alejarse de ahí”. Pero su valentía fue superior a todo aquello que, por una parte, sabía que era así. Su lugar estaba allí en la gran ciudad.
Tenía que enfrentar la vida como fuera, de la mejor manera. En ese cambio se dio cuenta de la importancia que tienen una ruta, un puente, una altura de calle…pero también la de una mirada, una sonrisa, o simplemente el silencio.
Esa tarde, siguió las huellas del canto de la alondra por la cuesta de los espinos amarillos. Las hojas y las flores se movían sin cesar. Vio a lo lejos en graduación los glaciares azules que coloreaban el horizonte.
De pronto ya no había luz en el cielo. Tropezando con cuanto había en los senderos, se equivocó de camino. Llegó hasta la ladera de las cumbres y allí esperó a los primeros rayos del sol. Su sorpresa fue el paisaje y el despertar con el canto de la alondra, a la orilla de un arroyo en un bosque pantanoso.
Nadie sabe cómo pudo llegar hasta ahí, ni ella recordaba adónde tenía que ir.Imagen: R. E. Ch.
BRISA Y BRIZA
Errática la brisa,vela en la noche,mece a la brizay a muchas otras flores,
todas en silencio,
envueltas en fríos vapores,
de un Calafate helado,
en atardecer temprano.Imagen: N. V. S.LA LECHUZA Y EL VIENTO
La lechuza está asustada,
a su hijo se lo llevó el viento en picada
y cayó a un balcón desde la rama.¿Cómo saber si el viento está enojado y con su furia barre todo lo que encuentra a su paso?
¿O será que quiere despertar el temor en nosotros, manifestando su poder, incontrolable a nuestro alcance?
¿O quizás es su forma de sentirse feliz viéndonos aterrorizados, corriendo, cerrando puertas y ventanas, y a los niños escondiéndose bajo la cama?
¿Por qué estará enojado? ¿Se peleó con las estrellas o con las nubes o con alguna sirena? ¿O tal vez no pudo dormir por los sonidos de los parlantes molestos y atrevidos?Hoy el viento está calmo y nos regala una suave brisa, que es como una caricia fresca con aroma a moras y fresas.
Ojalá pudiéramos sentir siempre al viento, suave y bondadoso.Y es así como queremos que la humanidad se manifieste, siempre con suavidad y bondad, respetando a los demás. Que se termine la agresión, el acoso, la burla, las peleas y todas aquellas actitudes que indignan al ser humano, a aquellos que son correctos y quieren el bienestar de todos.
Imagen: R. M. T.