• Poesía

    SOLITARIA

    Desde la rigidez de su columna
    irradia su luminosidad,
    penetrando suavemente
    en la mañanera bruma
    de una ciudad en cuna,
    de un río calmo sin dunas,
    imitando los gestos de la luna.

    Malania

    Imagen propia
                                             
  • Poemas

    VOY A CAMINAR

    Voy a caminar donde el silencio se esconde,
    donde duerme la risa y la magia se apronta queriendo salir.

    Voy a caminar donde los sueños esperan
    para acompañarme cargando felicidad.

    Voy a caminar donde nos cante el viento
    haciendo danzar las hojas de cada árbol del lugar.

    Voy a caminar donde brille el sol aunque no lo veamos,
    donde las noches regalen su luna y toditas sus estrellas
    pintando sonrisas.

    Autor: poeta uruguayo Miguel Márquez

    Imágenes: M. J. T.

  • General

    FLOR OLVIDADA

    Ilustración de la red: obra artística de Mari Luz Vindel Benito 

    Entre la llanura nevada
    y la luna menguante
    flotaba el silencio y acechaba.  
    En efecto crispante  
    una alianza se enzarzaba
    esperando que el sol
    desparrame su calidez brillante
    sobre la cima de las montañas heladas.
    Pero ya nada era igual
    y aunque ella no era Némesis
    quizás él eligió ser Epicúreo.
    La simbiosis se había acabado
    desde la supernova de una noche ajena
    la estrella dejó de brillar
    ante el déspota que la cobijaba.
     
    Malania
     
    Imagen propia:

     

  • General

    ÁRBOLES CAÍDOS

    Catalina, cansada del ruido de la gran ciudad, decidió un destino diferente para pasar los días de sus vacaciones.  Preparó su maleta con pocas ropas, y los elementos personales, solo lo necesario como para no tener que cargar peso. Su artrosis no le permitía abuzar de sus fuerzas, que por suerte, gracias a Dios y al universo, se encontraba muy bien.
    Mientras caminaba, pensaba en todo lo que podría realizar en esos días, aunque era consciente de que mucho no podía planificar porque las veces que lo hacía a largo plazo, nunca lo lograba tal como quería. Prefirió entonces concentrarse en ese día, ya que pronto llegaría a destino.
    Ya en el lugar, acomodó sus cosas, comió el sándwich, bebió jugo de naranja y salió a pasear por el sendero que la llevaba hacia el arroyo.
    A pocos pasos de la morada, se encontró con un árbol derribado por la tormenta, que hacía pocos días había hecho estragos en varios lugares de la zona.
    No sé bien por qué, pero tengo una especial atención y un sentimiento nostálgico hacia los árboles caídos –pensó. Cada vez que veo uno derrumbado por el hombre, pienso en lo que habrá sido en vida. Por suerte, ahora existe una ley que exige solicitar permiso para talar bosques, sobre todo si son nativos. Y cuando veo un árbol seco que se ha caído a causa de algún efecto climático, opino,  que si no obstruye el paso de la gente, se lo debería dejar ahí mismo donde cayó.
    ¿Quedaría algo así como parte de un jardín que expone el ayer y el hoy, la vida y la muerte?
    Hay jardines en el mundo que exponen este tipo de ejemplares, árboles de pié y otros caídos en forma natural.
    Hay árboles que crecen derechos y otros que crecen torcidos. Pero todos ellos tienen su belleza propia. Además son útiles, los que crecen erguidos muchas veces se los utiliza en la industria maderera para fabricar casas, puentes, muebles, etc. En cambio los que crecen torcidos se pueden utilizar como ornamentales o según el lugar donde han crecido, son talados para hacer leña para cocinar, hornear pan y calentar el hogar.

    Malania

    Imagen: M. J. T.  

  • Prosa Poética

    PALABRAS AL VIENTO

    “Palabras que perdidas al antojo del viento nunca lograron encontrarse”. de “El paño blanco” escrito por Hanna.

    Me hizo recordar a varios mensajes que algún día perdido en el tiempo fueron enviados y nunca tuvieron respuestas. Quizás se fueron con  el viento a otra parte, o se dispersaron con alguna tormenta, desparramándose sus letras.
    Hoy las busco en el lejano horizonte y las veo entre las nubes atravesadas por los últimos rayos del sol. Son indescifrables, se han deteriorado con el ardor del verano, con el frío invierno y las inclemencias del tiempo.
    Siento que nunca más las podré hilar para que queden bordadas en bellas frases, aquellas que plasmabas en escritos memorables.

    Malania

    Imagen propia

  • General

    DÍAS QUE SON NOCHES

    Cuando hablamos del día y de la noche como momentos de esas veinticuatro horas de reloj, nos hacemos la idea de la claridad y de la oscuridad.
    Pero a veces escuchamos decir: “Se nos vino la noche”, a plena luz del día soleado. Es que hay días que se oscurecen, pero no con la negra oscuridad que la naturaleza nos presenta, salvo que esté reinando la luna llena con todo su esplendor y ahí sí, hasta se puede pasear por algún parque en buena compañía sin necesidad de luz artificial.
    Es que muchas veces los pensamientos son los que oscurecen la jornada cuando algo sale mal. Pero “No hay mal que por bien no venga” y “Dibujemos el sol en días nublados” “Dibujemos el sol con una sonrisa”. Puede resultar difícil pero no imposible impedir que la oscuridad nos nuble la vista en días soleados.

    Me gusta leer a los poetas amigos porque sus trabajos también me inspiran y me llevan a volcar en letras esos pensamientos.
    No duden en escribir lo que emerge del interior de cada ser. Escribir hace bien.

    Malania.

    Imagen propia

  • General

    HONGOS VIOLETAS

    No sé cómo nacieron en medio del verde césped o en medio de la nada, lejos de los jardines con flores de muchos colores.
    La naturaleza nos invita a contemplar especies como estas, nunca antes vistas, al menos por mí.
    La tierra seguramente ha recibido alguna semilla desde el aire, soltada por algún pájaro, o tal vez su semilla remontó en alas del viento hasta aterrizar en este espacio verde, eligiendo un lugar alejado de quien sabe cuántos hongos más que puede haber por muchos otros lugares.
    Yo lo tomo como un regalo del cielo, quizás alguna persona de las que no está más en esta vida, me la envió de regalo, sabiendo que me gustan las flores y las plantas silvestres, y también sabía que mi color preferido era y es el violeta.
    No sé si serán comestibles o no, pero por seguridad, prefiero que estén en el mismo lugar. Ahí nacieron y allí se quedarán hasta que la misma naturaleza se los lleve.
    GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.

    Malania

    Imágenes propias

  • General

    SENTENCIA

     
    Nubes negras como hollín, barrieron el círculo dorado del cielo.
    Sus reflejos tristes, se hundieron en las profundidades del mar. 
    El fulgor del sol desapareció vertiginoso.  
    Mientras tanto en los estrados, los procesos incoados contra la orden roja, no les permitían condenarla por herética, con sentencia definitiva.
    Pasaron horas, días y meses. No había pruebas en su contra. Nadie se animaba a ser testigo en la causa.
    El caso tuvo un exhaustivo colofón con las palabras del abogado defensor. 
    Caso cerrado.
                                                                                                       Malania
    Imagen de la red
     
     

     

    Imagen propia.

  • General

    DE GORRIONES

     
     
     
    Enigmático
    así pequeño como es
    como si lo enviaras tú
    me despierta todos los días
    canta a la misma hora
    la misma canción indescifrable
    espera ser fotografiado
    luego vuela y desaparece.
    Quizá hoy se ha ido a dormir
    en una de esas nubes blancas
    que festonean el cielo
    tal vez viajó a otra ventana
    para acariciar el oído y despertar
    a quien todavía duerme
    ensimismado y del mundo ajeno
    o se ha ido en busca del sol
    que recién está naciendo.
                                          
    Malania
     
    Imágenes propias

  • Prosa Poética

    EN BUSCA DE TU PRIMAVERA

    Seguiré el vuelo de las aves, emigrando donde tu primavera florece.
    Iré tras los latidos que agitan mi pecho, a anidar en las ramas de tu corazón.
    Preguntaré a los trigales que visten  la llanura por las huellas de tus pasos que me lleven hasta ti.
    A un costado del camino, un ballet de hojas que hace tiempo su otoño quedó atrás, danzan arremolinadas a mi alrededor para contarme qué cerca estás y mis suspiros como brújula señalan el punto cardinal de tu sonrisa.
    Si el atardecer me encuentra donde el sol bebe de tus aguas, recostaré mis ansias sobre la montaña y llenaré de aire mi espera…recogeré jazmines del cielo, sembraré de caricias tus manos y antes de perderme en tus brazos, mi amor en versos endulzará de besos tus labios.

    Autor: Poeta argentino Patricio Massa

    Imagen: R. E. Ch.

    Imagen: de la red, gentileza P. M.