• Poemas

    ACTITUD DE POETA

    Ya no arroja el poeta sus palabras con fuerza
    en versos plasmados en hojas blancas
    y a contratiempo, como olas revueltas.
    Camina, ondeando los pasos bajo la lluvia
    con la vista fija y de a ratos perdida
    en las baldosas sueltas,
    indiferente a las lentejuelas de oro y naranja
    con que el mismo sol salpica
    las ventanas de las casas.
    Un aire agrio y ventoso lo transporta
    al otro lado de la ciudad sombría.
    Reflejos de fuego en los espejados ventanales
    se mezclan con lo plateado de sus cabellos.
    Un resplandor estruendoso lo estremece  
    y una voz casi imperceptible
    le hace cambiar el rumbo.
    ¿Alguien lo sigue, lo vigila o lo cuida?
    ¡Quién sabe! Quizás ni el poeta lo sabe.

    Imagen de la red.

  • General

    INTERROGANTES Y RESPUESTAS

    INTERROGANTES

     He leído la presentación “INTERROGANTES” escrita, hace unos días, por Marina Collado Prieto en el Blog “Escritores y Letras” (pueden verlo en https://escritoresyletras.wordpress.com/2022/01/21/interrogantes/ y me interesó la lista, me hizo reflexionar sobre cada una de las preguntas. Si bien entiendo que su cuestionario no pretende tener respuestas (o tal vez sí), pero son preguntas que muchos quizás se hacen y tienen o pueden tener otro tipo de pensamiento sobre las mismas. Me atengo a lo que surgió en mi mente después de leer cada una y lo quiero plasmar aquí, en una primera parte, porque lo que queda, irá en una segunda presentación, para no hacer muy larga la lista.
     Invito a los lectores que quieran agregar algo y seguir completando opciones de respuestas propias, poéticas, o tomadas de  la vida diaria, consignando su inicial o el nombre completo, para identificar a quien corresponde la respuesta. Particularmente preferí identificarme como E- ( Elsa) porque con M ya le puse a Marina.

    INTERROGANTES Y RESPUESTAS

    Marina- ¿A qué saben las horas cuando estás ausente? 
    Elsa- Las ausencias saben amargas.

    M- ¿A qué huelen los recuerdos cuando en manos del olvido se pierden?
    E- Los recuerdos perdidos huelen a polvo enmohecido.

     M- ¿Dónde se detienen los vientos cuando la brisa no me alcanza? 
    E- Los vientos no se detienen, solo cambian de sentido según el vector de la estación del año y el tiempo.

    M- ¿A qué saben los adioses cuando el tiempo se diluye en la distancia?
    E- Los adioses saben a nostalgia, a sal de lágrimas.

    M- ¿Hacia dónde viajan los sueños que no se cumplieron? 
    E- Los sueños que no se cumplieron viajan al fondo del mar o al mismo cielo para perderse entre las nubes.

    M- ¿Hacia dónde se dirige la ilusión y se funde con los deseos?
    E- La ilusión y los deseos se conjugan en el cuerpo y en el alma.  

    M- ¿En qué lugar del tiempo se escucha el eco de lo no vivido? 
    E- El eco de lo no vivido se escucha en el corazón cuando postrado ya no tiene razón de seguir viviendo.

    M- ¿Dónde se entierran los te quiero cuando el corazón se desangra?
    E- En cada lágrima caída en un pañuelo o en el regazo mismo, o bien…se entierra en el silencio y el mutismo.

    M-¿Dónde comienzan las dudas y se pierde la confianza?
    E- Las dudas comienzan cuando hay titubeos, silencios no justificados, largas ausencias, teléfonos no disponibles, evasiones y /o cambios de actitudes.
    Y al existir dudas, la desconfianza va en paralelo.

    Autoras: Marina Collado Prieto y Malania Nashki (Elsa)

  • General,  Poemas

    CALLEJÓN

    Una aureola lo envolvió,
    y por un camino equivocado lo llevó.
    Con fastidiosa insistencia
    y promesas incumplidas,
    por un callejón sin salida
    en un laberinto lo encerró.
    Él pensaba diferente
    quería florecer en otro ambiente,
    pero la emoción de la luz
    lo hizo desviar a trasluz
    hacia un lago desconocido,
    donde vivió un sinsentido
    en relación absorbente,
    hasta que su corazón latente
    lo despertó con un “bobazo”.
    Revelado y despierto
    relató su secreto.
    Por suerte a tiempo
    fue internado,
    salvándose de un letargo.

    Imagen: R. E. Ch.

  • Poemas

    ENCANTO DE AZUL

    De azul te vistes, y apareces sin tiempo ni límites
    y yo poeta clamo: ¡que poco azul para tanto cielo!,
    así, emerges tan natural como la cotidiana aurora,
    cual luz que besa mis sombras, y como luz clara,
    usted se irá posando en mi tierno y sufriente corazón,
    para avivar la llama dormida que fraguara mis sueños.

    Vibra el azul en tu cuerpo, delineando a tu fina figura
    porque más azul que el azul no podría imaginar en ti
    que vestida así os juro debías ser mi azulado consuelo,
    consuelo que alentará a la guitarra mía de todas maneras
    a dar sus trinos como dádiva de un corazón enamorado.


    Pero ahí están resplandeciendo tus pupilas límpidas
    que como remansos y alboradas de abril expresan vida,
    auguran la alegría de vivir y quizá algún sueño por venir
    y, aunque esas tus pupilas reflejen misterios insondables
    en el sol de tu mirada toda el agua de verdad parece azul.

    Como un sol de primavera tu encantadora sonrisa
    nace cada mañana entre dulzura, gracia y belleza
    como sustento natural de tu alma plena y sensible,
    relumbras con fuerza para el deleite del peregrino
    que añora retozar en los rosales de tu jardín florido.

    Vestida toda de azul deslumbras al poeta peregrino
    como una princesa que surge sugestiva cual venus,
    centelleante, ebúrnea y bella desde el mar primordial
    llegas como aurora blonda alborozada y desbordante
    expandiendo tus encantos como cantos frescos de amor.

    Autor. Paquito Peralta. Derechos Reservados. Lima- Perú.

  • Poemas

    INFLORESCENCIA

     
    Delineo mi nombre
    en tu espalda entregada
    con pinturas naturales
    aún reptando en jangada
    en el acerbo tiempo
    con jugoso  anagrama
    tu nombre en gallardía
    En fortuito menester
    e indomable deseo
    surge un giro inesperado
    avellanando mi espacio
    con tu cálido placer
    en blanco, rosa y topacio. 
  • Poemas

    MIRADA DESDE EL SÉPTIMO PISO

    Carga sobre sus espaldas,
    vivencias tristes y alegres.
    Algunas son indelebles,
    otras olvidadas en el eco.
    Vive en un séptimo piso
    de un edificio moderno.
    Como una armadura cerrada
    y por el tiempo cicatrizada,
    repleto de experiencias
    tantas buenas como malas,
    un hombre lleva en la piel
    por los años modelada,
    los estragos que la vida
    talló en su rostro huraño.
    La apacibilidad se encargó
    de suavizar su mirada,
    esta vez detenida en la brisa
    que penetra por su ventana,
    pintada de plata o dorado
    y con finas violetas decorada.
    Se sienta por las mañanas
    con su pipa encendida,
    dibujando en sus  pupilas
    el deseo de armonía y paz
    por él, por todos, tan deseada.

    Imagen: G.F.T.

  • Poemas

    SORTEANDO MURALLAS

    Ella quiso decirte amor,
    que quiso decir Amor;
    pero no, no se atrevió;
    es que hubo muchos
    murallones escondidos;
    y hoy recordando dice:
    “En el laberinto de la vida
    halló una senda en colina.
    Un entramado nevado
    sedujo sus sentidos callados.
    Con diferente mirada
    vio el brillo de sus hebras.
    Su sonrisa iluminada
    al camino lo hizo rosa.
    El entusiasmo no tardó
    y se sintió muy dichosa.
    Siguió su curso el andar
    y pudo el cariño encontrar.
    Días ralos de la agenda
    iban desapareciendo.
    Y  la ausencia se notó
    con vientos que iban surgiendo.
    Cuando el agua desbordó
    el camino se hizo opaco.
    Y por obras del destino
    barreras aparecieron.
    El amor que iba en camino
    se detuvo en una brisa,
    porque si se daba prisa
    podría estampar su cara
    contra una de esas murallas
    del destino, desplegadas.
    Y como nada es eterno
    sobrevino la alegría
    sus corazones latieron
    a la par y en armonía.
    Sin exacción ni molduras
    en dispar algarabía
    entrelazaron su dedos
    se estrecharon en abrazos.
    Ella dibujó senderos
    sobre su espalda muy tibia
    con sus labios entreabiertos.
    Él le regaló sonrisas
    y con encuetados dedos
    humedecidos círculos.
    Ella, encelada por dentro.
    Él silencioso y calmo.
    Y sin medición del tiempo
    exhaustos en infinito
    disfrutaron sin destiento.”
    Imagen de la red.
  • Poemas

    EL DON DE SER POETA

    Mágicas letras atraviesan el portal
    derribando cicatrices que creía curadas
    ceden paso a una lágrima al despertar  
    recuerdos adormecidos por el tiempo
    y la nada.
    Creí que era una sola
    no me di cuenta que detrás
    venían lágrimas en caravana.
    El dolor estalla
    todo da vuelta a mi alrededor
    sorbo a sorbo voy tragando
    lo amargo de la soledad no agotada.
    Caen destellos de preguntas
    ¿Por qué te has ido
    si vibrabas de juventud a los 59?
    Deshojabas dulzura
    y a pesar de que celabas de mis versos
    tus ojos siempre reflejaban
    ¡poesía!
    Y a ti, el  de las mágicas letras:
    has revuelto mi corazón  
    con tu don de ser poeta.
  • Poemas

    APLAUSOS PARA EL PINTOR

    Aunque lo quiera azul o rosado,
    hoy el cielo está anaranjado,
    quizás alguien lo ha pintado
    en un atardecer tornasolado.
    ¿Nunca te ha pasado…
    que lo quieres negro
    y te lo ofrecen blanco?
    ¿O lo prefieres pequeño
    y te lo muestran en grande?
    ¿O lo buscas rígido
    y lo único que encuentras es flexible?
    Puede ser que a veces …
    buscamos lo inalcanzable,
    o en lugar y tiempo equivocado,
    y en vez de disfrutar
    un momento venturoso
    conseguimos solamente
    el pasar de un día azaroso.
    Entonces piensa …
    que no todos los días son malos
    que no todos están nublados,
    y mañana puede estar muy soleado.
    En la vida todo se acomoda
    y siempre las cosas ocurren por algo.
    Hoy el cielo está anaranjado,
    disfrutemos del espectáculo natural,
    y aplaudamos al pintor
    que nos alegra el corazón
    con un atardecer de tornasol.

    Imagen: E. P. L.