General

EN EL MEDIO DE LA CHINA

Tendida y somnolienta
en la orilla de mi cama
despiertan mis pensamientos
con una melodía suave
sin esperar que nadie
sople una flauta o una quena
ni rasgue de un violín las cuerdas
ni tampoco una guitarra.
Una bella excursión melancólica
apareció enseguida
como si hubiese estado
en medio de la República China
sin saber si era popular
o era un infierno la misma.
Escuché una música
solitaria y silenciosa
muda y encantadora
yo cantaba y él me escuchaba.
Muy atento  percibió
la excitación en mi voz
su rostro se volvió delicioso
cuando un halo de extrañeza
se apoderó de mis huesos
de mi carne y de mi piel.
De una manera extraña surgió
todo  lo antiguo y lo nuevo
el placer y el dolor viajero
la alegría encantadora
y el temor con un temblor.
En un ambiente tranquilo
de paz y de lucha guerrera
algo así como el estar
en el cielo y a la vez en la tierra
todo al mismo tiempo.
Fue una mezcla de frío
y de calor intenso.
Malania
Imagen de la red
                                                                                                        
Compartir:

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *