• Minicuentos

    EL ESCRITORIO AZUL

    Con aire pesado y entrecortado por el abrir y cerrar de la puerta, el viejo escritorio pintado de azul
    descansaba en una habitación casi sin uso. 
    No entendía mucho su función, pasaban los días y nadie lo ocupaba.
    Ella entraba y lo miraba, aunque el color azul no le gustaba y eso se notaba. A él tampoco le importaba que esté allí o en cualquier otro lugar, junto a muchas otras cajas y muebles que con suerte, por el clima apropiado no despedían vaho.
    En la noche oscura lo visitaban algunos mosquitos y pequeñas lagartijas hambrientas. Al verlo inactivo y triste, no lo molestaban.
    Su color intacto pero, por el polvo que filtraba por alguna hendija, se lo veía apagado a pesar de la claridad del día. 
    El ruido de uno que otro automóvil de su letargo infinito lo despertaba.
    Y así fue pasando el tiempo hasta que un día, cómo su dueño no quería venderlo, se lo regaló a una niña que necesitaba tenerlo. 
    Viajó el  escritorio con miedo, sin saber a dónde iba, pero al llegar vio a la niña y se alegró pensando que allí sí tendría compañía.
    Ahora vive feliz entre osos de peluche y muñecas de gran sonrisa; la niña le cambió la vida a ese escritorio que lleno de polvo pasaba sus días.
    Se siente dichoso entre juguetes, acunando niñas acompañado de libros, y hasta puede escuchar voces por el teléfono, al que le sirve de lecho.
    Ahora no tiene sentido el llanto ni tiene que morder el silencio. Se siente acompañado y se perfuma con los aromas de las flores de rosas, jazmines e incienso. 
    La tristeza ya no derriba sus bordes engomados y aquella sorda habitación quedó en el pasado. 

    Malania

    Imagen: M. R. T.

  • Poemas

    DESPISTADA SOMBRA

    Colgado de una rama herida,
    rompe en llanto el aire de la vida.
    Un corazón se tiñe
    en el pincel del viento
    y se esconde con pena
    para no encontrar en el sol
    el futuro de la noche.
    Prefiere dormir y acunar su herida
    en despistadas sombras
    bajo una lluvia de sueños
    esos que aún no están perdidos.

    Malania

    Imagen propia

  • Poemas

    LA IMPORTANCIA DE TU EXISTIR

     
    Mi sonrisa
    se disponía a viajar
    hacia aquella densa nube,
    para internarse
    en el llanto de su espesura.
    Fue en ese mágico  instante
    sorpresivamente tus palabras
    atravesaron la puerta
    de mi madrugado sueño.
    La alegría tomó la posta
    y en armónico abrazo virtual
    cambió el aire
    de un tardío amanecer.
    Palpité tu saludo mañanero
    con fragancia silvestre y neblina fresca.
    El reflejo del último escalofrío de la noche
    se durmió bajo el agua marina
    cediendo paso a una nube rosa
    de la que emana alegría
    por saber que existes.
     
    Imagen: G. F. T. 
                                                      

  • General

    DISTRAÍDA

    DISTRAÍDA
    Ayer, atrapada por la velocidad del tiempo, que a veces apremia y no pide disculpas, así como en un abrir y cerrar de ojos, casi se le fue la vida. Cuando reaccionó, su cabeza le pasó factura. Pensó en todo lo que hubiera dejado, pero lo que más le asustó fue que nadie se hubiese percatado de su desaparición y tal vez recién en días, se enterarían cuando alguna fuerza de seguridad se dignaría a  tomar el teléfono y comunicar a alguien del mismo apellido, lo que había ocurrido.
    – Las personas comunes no somos noticia, dijo.
    Después de lo ocurrido sólo pensó en expresar su deseo:
              “Cuando me muera,
    no quiero flores en mi tumba.
    Destina ese dinero a calmar
    el llanto de un niño hambriento.
    No derrames lágrimas,
    prefiero un vals mal bailado
    de esos que aún sin aprender
    sé que  igual puedes hacerlo.
    Y deja que la lluvia
    lave mis pecados,
    por haberte amado tanto”. 
  • Poemas

    LLANTO DE AVE

    Desolada imagen
    de un triunfador derrotado
    en proceso apocalíptico
    transido por su aciago destino.
    Devuelto a la soledad
    observa las flores violetas
    del jacarandá
    caídas por el mecer del viento
    después que el tornado
    destruyera su nido
    dando fin a  su amada. 

    Imagen: E. P. L.

                                                     
  • Poemas

    CONTRAPUNTO

    Con plumajes nacarados
    y de colores radiantes,
    la naturaleza engrandecida,
    nos muestra en toda su plenitud, la vida.
    Como música de cámara a cuatro voces,
    con gorjeos y silbidos,
    aleteos y chirridos,
    algunos parecen llanto,
    mientras los más bonitos son cantos.
    Como vocales y consonantes
    en versos con sonidos,
    el concierto es placentero
    y el crepúsculo deslumbrante.

    Imagen:

  • Poemas

    DÍA DEL ESCRITOR

    POETA

     
    A ti, que eres POETA, que te explayas en tus versos. (Sin distinción de sexo)
     
     
     ¿Hacia quién diriges tus versos poeta? esos que engalanan el alma.
    ¿Hacia dónde apunta tu vector? Quizás a la misma calma,
    la que se conecta a tu vuelo, para posarse en llama,
    mientras ve en destellos, que te alejas en silencios,
    esos que desatan prisa, para volver a casa,
    los que tiernos acarician,  y a la vez atrapan.
    ¿Hacia dónde viajas rapsoda? En las noches arboladas
    rociadas de encanto y cosechas de mil llantos.
    ¿Adónde llevas tu alegría? En tus viajes de premura
    cuando abrazas armonía de tu encanto y tu ternura.
    ¿A quién visitas poeta? Con tus versos perfumados,
    con azahares ardientes, en besos apalabrados,
    navegando por los mares; besos que vuelan en nubes,
    hasta posarse en un velo, de los que vierten miel,
    hasta albergarse en un pecho y aquietarse en un lecho,
    encallados en la piel, de alguna dama fiel
    o de algún caballero inquieto.
    ¿Dónde estarán esos besos, que el deseo los reclama,
    los que enamoran y aflaman, en tiempos desordenados?
    Ven poeta, clama al viento, que el reposo te hace falta,
    para gozar en ti mismo, de todo lo que te exalta,
    de caricias primorosas, de ermitaños apagados
    exhalando lo aprisionado. Sé feliz.
     
    Imagen: G. F. T. 
  • Poemas

    VOCES

    Las voces se han callado,
    decidieron aislarse
    quién sabe hasta cuándo;
    tampoco se sabe adónde.
    Puede ser que el canto,
    se atragantó en el llanto
    de una nube rosa o quizás azul.
    Fueron bellas voces
    que vivieron por mucho tiempo,
    detrás de un cerro
    cubierto de vegetación.
    Pudo haber sido un incendio,
    ocurrido hace unos años
    y se durmieron
    sobre la tierra, sin viento
    para avivar las cenizas.
    O quizás las gargantas se cansaron
    y en silencio se quedaron.
    O tal vez el humo
    atravesó el firmamento
    y hoy pasean en las nubes
    de algún tibio aliento.

    Imagen: Javier T.

  • Poemas

    POETAS DEL CINCEL

    Poesía dedicada a los Escultores que participaron en la Exposición Bienal de Resistencia Chaco, Argentina.

    ¿Qué sueños carcomen tu tronco

    y qué magia navega en tu savia

    que solo el cincel y la gubia

    a ser de la nada te llaman?

    Qué milagros esperas,

    y qué prodigio tus ramas aguardan

    que el martillo y la sierra ruidosa,

    con llanto y dolor

    te lo arrancan?

    Y que tienes tú,

    obrero del golpe continuo,

    que le sacas a la forma escondida

    el ropaje maderil que la oculta?

    ¡Qué prodigio entre el hombre y el árbol!

    ¡Qué fuerza, qué temple, qué coraje!

    conformando los dos

    el ansiado y hermoso milagro

    …y serenamente aparece

    la bella forma de líneas y pliegues

    y la madera endiosada, pulida,

    arrebata un sueño y lo hace presente.

    Salve a ti,

    cirujano del árbol,

    que conoces con muchos detalles

    la recia y hermosa figura

    que desde siempre estuvo escondida

    y de pronto tú,

    solo tú,

    provocas

    el que sea por todos

    reconocida!

    Autor: Manuel Rodriguez

    Julio 1990

  • Poemas

    EXTRAÑO

    Te extraño

    Me parece muy extraño, el extrañarte …
    cuando mis pies por mis suspiros se humedecen
    cuando miro hacia lo alto para ver las nubes
    que nos unen a través del universo en canto
    y es ahí, cuando más te extraño
    y me escondo tras la risa de tu llanto.